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MISAL MAYO DEL 2016 / www.laverdadcatolica.org |
INTENCIONES
DEL SANTO PADRE PARA MAYO 2016 |
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INTENCIÓN UNIVERSAL | |
Las
mujeres en la sociedad |
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INTENCIÓN POR LA EVANGELIZACIÓN | |
El
Rosario |
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Blanco VI Domingo de Pascua [Se omite la memoria de SAN JOSÉ, Obrero MR p. 377 (382) / Lecc. I, p. 342 LH 2a. Semana del Salterio
Otros santos: Ricardo Pampuri, presbítero. Beata Petronila de Troyes, abadesa.
EL TONO FRATERNO
Hch 15, 1-2. 22-29; Ap 21 10-14. 22-23; Jn 14,23-29
El tema, la dinámica de la reunión y el tono del comunicado del Concilio de Jerusalén reflejan la vivencia de la fraternidad cristiana. El acuerdo final está firmado por los hermanos apóstoles y presbíteros y va dirigido a los hermanos de Antioquía. El contenido y las determinaciones del acuerdo revelan la comunión espiritual de una Iglesia atenta a discernir la voz del Espíritu Santo, sin otro afán que el cumplimiento del encargo misionero. En ese sentido los cristianos de la primera hora estaban siendo beneficiados por la promesa final del Maestro, quien les había asegurado que el Padre les enviaría al Espíritu para que les instruyera en la verdad. Jesús anima en esta despedida a sus discípulos a vivir confiadamente, asegurándoles que a través del Espíritu, él continuaría sosteniendo y animando el caminar de sus discípulos.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Is 48,20
Con voz de júbilo, anúncienlo; que se oiga. Que llegue a todos los rincones de la tierra: el Señor ha liberado a su pueblo. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso, concédenos continuar celebrando con incansable amor estos días de tanta alegría en honor del Señor resucitado, y que los misterios que hemos venido conmemorando se manifiesten siempre en nuestras obras. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA
PALABRA
PRIMERA LECTURA
El Espíritu Santo y nosotros hemos decidido no imponerles más cargas que las necesarias.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 15, 1-2. 22-29
En aquellos días,
vinieron de Judea a Antioquía algunos discípulos y se pusieron
a enseñar a los hermanos que si no se circuncidaban conforme a la ley
de Moisés, no podrían salvarse.
Esto provocó un altercado y una violenta discusión con Pablo y
Bernabé; al fin se decidió que Pablo, Bernabé y algunos
más fueran a Jerusalén para tratar el asunto con los apóstoles
y los presbíteros.
Los apóstoles y los presbíteros, de acuerdo con toda la comunidad
cristiana, juzgaron oportuno elegir a algunos de entre ellos y enviarlos a Antioquía
con Pablo y Bernabé. Los elegidos fueron Judas (llamado Barsabás)
y Silas, varones prominentes en la comunidad. A ellos les entregaron una carta
que decía: "Nosotros, los apóstoles y los presbíteros,
hermanos suyos, saludamos a los hermanos de Antioquía, Siria y Cilicia,
convertidos del paganismo. Enterados de que algunos de entre nosotros, sin mandato
nuestro, los han alarmado e inquietado a ustedes con sus palabras, hemos decidido
de común acuerdo elegir a dos varones y enviárselos, en compañía
de nuestros amados hermanos Bernabé y Pablo, que han consagrado su vida
a la causa de nuestro Señor Jesucristo. Les enviamos, pues, a Judas y
a Silas, quienes les transmitirán, de viva voz, lo siguiente: 'El Espíritu
Santo y nosotros hemos decidido no imponerles más cargas que las estrictamente
necesarias.
A saber: que se abstengan de la fornicación y de comer lo inmolado a
los ídolos, la sangre y los animales estrangulados. Si se apartan de
esas cosas, harán bien'. Los saludamos".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 66, 2-3. 5.6.8
R/. Que te alaben, Señor, todos los pueblos. Aleluya.
Ten piedad de nosotros y
bendícenos; vuelve, Señor, tus ojos a nosotros. Que conozca la
tierra tu bondad y los pueblos tu obra salvadora. R/.
Las naciones con júbilo te canten, porque juzgas al mundo con justicia;
con equidad tú juzgas a los pueblos y riges en la tierra a las naciones.
R/.
Que te alaben, Señor, todos los pueblos, que los pueblos te aclamen todos
juntos. Que nos bendiga Dios y que le rinda honor el mundo entero. R/.
SEGUNDA LECTURA
Un ángel me mostró la ciudad santa, que descendía del cielo.
Del libro del Apocalipsis del apóstol san Juan: 21, 10-14. 22-23
Un ángel me transportó
en espíritu a una montaña elevada, y me mostró a Jerusalén,
la ciudad santa, que descendía del cielo, resplandeciente con la gloria
de Dios. Su fulgor era semejante al de una piedra preciosa, como el de un diamante
cristalino.
Tenía una muralla ancha y elevada, con doce puertas monumentales, y sobre
ellas, doce ángeles y doce nombres escritos, los nombres de las doce
tribus de Israel. Tres de estas puertas daban al oriente, tres al norte, tres
al sur y tres al poniente. La muralla descansaba sobre doce cimientos, en los
que estaban escritos los doce nombres de los apóstoles del Cordero.
No vi ningún templo en la ciudad, porque el Señor Dios todopoderoso
y el Cordero son el templo. No necesita la luz del sol o de la luna, porque
la gloria de Dios la ilumina y el Cordero es su lumbrera.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 14,23
R/. Aleluya, aleluya.
El que me ama, cumplirá mi palabra, dice el Señor; y mi Padre lo amará y vendremos a él. R/.
EVANGELIO
El Espíritu Santo les recordará todo cuanto les he dicho.
Del santo Evangelio según san Juan: 14, 23-29
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "El que me ama, cumplirá mi palabra
y mi Padre lo amará y vendremos a él y haremos en él nuestra
morada.
El que no me ama no cumplirá mis palabras. Y la palabra que están
oyendo no es mía, sino del Padre, que me envió. Les he hablado
de esto ahora que estoy con ustedes; pero el Paráclito, el Espíritu
Santo que mi Padre les enviará en mi nombre, les enseñará
todas las cosas y les recordará todo cuanto yo les he dicho.
La paz les dejo, mi paz les doy. No se la doy como la da el mundo. No pierdan
la paz ni se acobarden. Me han oído decir: 'Me voy, pero volveré
a su lado'. Si me amaran, se alegrarían de que me vaya al Padre, porque
el Padre es más que yo. Se lo he dicho ahora, antes de que suceda, para
que cuando suceda, crean".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Credo.
PLEGARIA UNIVERSAL
Unidos a Cristo, que
intercede siempre por nosotros, elevemos, hermanos, nuestras súplicas
al Padre diciendo: Te rogamos, Señor. (R/. Te rogamos, Señor.)
Para que el que estaba muerto y ahora vive por los siglos de los siglos
conceda a la Iglesia ser, con firmeza y valentía, testimonio perseverante
de su resurrección, roguemos al Señor.
Para que el resucitado, que dio a los apóstoles su paz, quiera concederla
también en abundancia a todos los pueblos, roguemos al Señor.
Para que el vencedor de la muestre transforme los sufrimientos de los enfermos,
de los moribundos y de todos los que sufren en aquella alegría que nunca
nadie les podrá quitar, roguemos al Señor.
Para que el que tiene las llaves de la muerte y de su reino nos conceda celebrar
un día su resurrección con los ángeles y los santos en
su reino, roguemos al Señor.
Dios nuestro, que has prometido hacer morada en aquel que escucha tu palabra
y la guarda, escucha nuestra oración y envíanos el Espíritu
Santo, para que nos recuerde constantemente todo lo que Cristo ha dicho y enseñado
y nos haga capaces de dar testimonio de ello con nuestras obras y palabras.
Por Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina, inmortal y glorioso, por los siglos
de los siglos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Suba hasta ti, Señor, nuestra oración, acompañada por estas ofrendas, para que, purificados por tu bondad, nos dispongas para celebrar el sacramento de tu inmenso amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 14, 15-16
Si me aman, cumplirán mis mandamientos, dice el Señor; y yo rogaré al Padre, y él les dará otro Abogado, que permanecerá con ustedes para siempre. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios todopoderoso y eterno,
que, por la resurrección de Cristo, nos has hecho renacer a la vida eterna,
multiplica en nosotros el efecto de este sacramento pascual, e infunde en nuestros
corazones el vigor que comunica este alimento de salvación. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, p. 595 (603).
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- La colegialidad entendida como una forma evangélica de tomar acuerdos de manera consensuada y fraterna es una herencia valiosa que el Señor Jesús nos entregó. Hemos sido exhortados a ejercer el servicio de autoridad de manera alternativa a los usos verticales y autoritarios vigentes en las instituciones políticas. La nueva familia que Jesús ha conformado con sus discípulos y apóstoles, se ha de caracterizar por la voluntad de servir y por la determinación de no incurrir en prácticas de dominación. La Iglesia ha emprendido un camino sinodal de participación y comunión que debe impulsarse no solamente en el ámbito de la iglesia universal, sino en cada una de las iglesias locales, en las parroquias y en los movimientos y organizaciones pastorales básicas. La comunión amorosa que vive la Trinidad es el referente que ha de animar nuestra forma de ser Iglesia.
Blanco Memoria de San Atanasio, Obispo y Doctor de La Iglesia MR p. 707 (726) / Lecc. I, p. 929
Otros santos: Félix de Sevilla, mártir. Beato Boleslao Strzelecki, mártir.
Fue obispo de Alejandría (328-373) y su objetivo único fue defender la fe en la divinidad de Cristo, que había definido el Concilio de Nicea, pero que por dondequiera se controvertía. Ni el poco valor de los obispos ni las trampas de la policía ni sus cinco destierros pudieron acabar con su valor, ni mucho menos con su amor al Señor Jesús, Dios hecho hombre.
EL SEÑOR LE ABRIÓ EL CORAZÓN
Hch 16,11-15; Jn 15,26-16,4
El mensaje cristiano provoca división y conflicto: para unos es una amenaza que contraviene sus deseos y aspiraciones más genuinos y por eso proclaman "la muerte de Dios" y juzgan como fanáticos a los cristianos que viven congruentemente su fe; para otros es una buena noticia que da sentido y plenitud a la existencia. Desde esta perspectiva Lidia, comerciante en telas en la ciudad de Filipos, decidió asumir el camino cristiano, se desvinculó de la sinagoga a la que se había adherido y eligió a Jesús como Señor y dueño de su fidelidad. Esta decisión de pertenecer a Jesús no nace únicamente de la voluntad de cada persona, el primer paso para nosotros los creyentes, siempre lo da Dios cuando abre el corazón el creyente y lo anima a conducir su vida por el camino del Evangelio.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Si 15, 5
En medio de la Iglesia abrió su boca, y el Señor lo llenó del espíritu de sabiduría e inteligencia, y lo revistió de gloria. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso y eterno, que suscitaste al obispo san Atanasio como insigne defensor de la divinidad de tu Hijo, concédenos bondadoso que, alegres por su protección y por sus enseñanzas, crezcamos continuamente en tu conocimiento y tu amor. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
El Señor tocó el corazón de Lidia para que aceptara el mensaje de Pablo.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 16, 11-15
Por aquellos días,
zarpamos de Tróade y navegamos rumbo a Samotracia; al día siguiente,
hacia Neápolis y de ahí a Filipos, colonia romana y ciudad principal
de la región de Macedonia.
En Filipos nos quedamos unos días. El sábado salimos de la ciudad
y nos fuimos por la orilla del río hasta un sitio donde solían
tenerse las reuniones de oración. Allí nos sentamos y trabamos
conversación con las mujeres que habían acudido.
Entre las que nos escuchaban, había una mujer, llamada Lidia, de la ciudad
de Tiatira, comerciante en púrpura, que adoraba al verdadero Dios. El
Señor le tocó el corazón para que aceptara el mensaje de
Pablo. Después de recibir el bautismo junto con toda su familia, nos
hizo esta súplica: "Si están convencidos de que mi fe en
el Señor es sincera, vengan a hospedarse en mi casa". Y así,
nos obligó a aceptar.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 149, 1-2.3-4.5-6a.9b
R/. El Señor es amigo de su pueblo. Aleluya.
Entonen al Señor
un canto nuevo, en la reunión litúrgica proclámenlo. En
su creador y rey, en el Señor, alégrese Israel, su pueblo santo.
R/.
En honor de su nombre, que haya danzas, alábenlo con arpa y tamboriles.
El Señor es amigo de su pueblo y otorga la victoria a los humildes. R/.
Que se alegren los fieles en el triunfo, que inunde el regocijo sus hogares,
que alaben al Señor con sus palabras, porque en esto su pueblo se complace.
R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 15, 26. 27
R/. Aleluya, aleluya.
El Espíritu de la verdad dará testimonio de mí, dice el Señor, y ustedes también darán testimonio. R/.
EVANGELIO
El Espíritu de la verdad dará testimonio de mí.
Del santo Evangelio según san Juan: 15, 26-16, 4
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "Cuando venga el Paráclito, que yo
les enviaré a ustedes de parte del Padre, el Espíritu de la verdad
que procede del Padre, él dará testimonio de mí y ustedes
también darán testimonio, pues desde el principio han estado conmigo.
Les he hablado de estas cosas para que su fe no tropiece. Los expulsarán
de las sinagogas y hasta llegará un tiempo, cuando el que les dé
muerte creerá dar culto a Dios. Esto lo harán, porque no nos han
conocido ni al Padre ni a mí. Les he hablado de estas cosas para que,
cuando llegue la hora de su cumplimiento, recuerden que ya se lo había
predicho yo".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Mira, Señor las ofrendas que te presentamos en la conmemoración de san Atanasio, y ya que profesamos su misma fe incontaminada, haz que el testimonio que damos de tu verdad nos sirva para la salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN 1 Co 3,11
El único cimiento válido es Jesucristo y nadie puede poner otro distinto. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios todopoderoso, a quienes confesamos firmemente, junto con san Atanasio, que tu Hijo es verdadero Dios, concédenos que este sacramento nos dé vida y nos proteja siempre. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Fiesta de La Santa Cruz En la República mexicana
Rojo MR p. 708 (727) / Lecc. I, p. 912
Otros santos: San Teodosio de Pecersk, abad. Beato Tomás Acerbis de Olera, religioso.
En la Iglesia universal la fiesta de la Santa Cruz se celebra el 14 de septiembre, al día siguiente de la dedicación de la "Iglesia de la Resurrección", levantada en Jerusalén sobre el sepulcro de Jesucristo. Antes de la reforma litúrgica del Vaticano II esta fiesta se llamaba "La exaltación de la Santa Cruz". Entonces también se celebraba otra fiesta, la del "Hallazgo de la Santa Cruz", el día 3 de mayo. Dado que en México la celebración de la Santa Cruz en este día está muy arraigada, sobre todo en el sector de la construcción, el Episcopado Mexicano pidió autorización a la Santa Sede para seguirla celebrando el 3 de mayo en vez del 14 de septiembre, con lo cual siempre cae dentro del Tiempo Pascual. Ciertamente la cruz es el trofeo de la victoria pascual de Cristo sobre la muerte.
TIENE QUE SER LEVANTADO EN ALTO
Flp 2,6-11; Jn 3,13-17
El hermoso y emotivo himno cristológico que celebra la humillación y el anonadamiento de Jesús Mesías que se hizo uno de tantos y asumió la muerte en cruz, con toda su carga de sufrimiento e ignominia, conmemora también efusiva y alegremente su victoria sobre la muerte y su exaltación al lado del Padre. El relato evangélico anunciaba la elevación del Hijo del Hombre en la cruz para constituirse en causa de salvación para cuantos consigan descifrar en esa muerte escandalosa, la manifestación plena del amor del Padre. El himno de Filipenses y el pasaje evangélico encajan perfectamente en la celebración de la Santa Cruz. En una sociedad secular que ha ido arrinconando los símbolos cristianos, la conmemoración de la cruz es una ocasión de reafirmar nuestra identidad como seguidores del crucificado. Como todo símbolo, éste también necesita ser sustentado por la actitud de entrega absoluta que lleva consigo venerar la Cruz de Cristo.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Ga 6, 14
Que nuestro único orgullo sea la Cruz de nuestro Señor Jesucristo, porque en él tenemos la salvación, la vida y la resurrección, y por él hemos sido salvados y redimidos. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que quisiste que tu Unigénito sufriera la cruz para salvar al género humano, concédenos que quienes conocimos su misterio en la tierra, merezcamos alcanzar en el cielo el premio de su redención. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Cristo se humilló a sí mismo; por eso Dios lo exaltó.
De la carta del apóstol
san Pablo a los filipenses: 2, 6-11 Cristo Jesús, siendo Dios, no consideró
que debía aferrarse a las prerrogativas de su condición divina,
sino que, por el contrario, se anonadó a sí mismo tomando la condición
de siervo, y se hizo semejante a los hombres.
Así, hecho uno de ellos, se humilló a sí mismo y por obediencia
aceptó incluso la muerte, y una muerte de cruz.
Por eso Dios lo exaltó sobre todas las cosas y le otorgó el nombre
que está sobre todo nombre, para que, al nombre de Jesús, todos
doblen la rodilla en el cielo, en la tierra y en los abismos, y todos reconozcan
públicamente que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 77, 1-2. 34-35. 36-37. 38
R/. No olvidemos las hazañas del Señor.
Escucha, pueblo mío,
mi enseñanza; presten oído a las palabras de mi boca. Abriré
mi boca y les hablaré en parábolas; anunciaré lo que estaba
oculto desde la creación del mundo. R/.
Cuando Dios los hacía morir, lo buscaban y madrugaban para volverse hacia
Él. Se acordaban de que Dios era su auxilio; el Dios altísimo,
su redentor. R/.
Lo adulaban con su boca, le mentían con su lengua; su corazón
no era sincero con Él ni eran fieles a su alianza. R/.
Pero Él sentía lástima de ellos, les perdonaba su culpa
y no los destruía. Muchas veces dominó su ira y apagó el
furor de su cólera. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO
R/. Aleluya, aleluya.
Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos, porque con tu santa cruz redimiste al mundo. R/.
EVANGELIO
El Hijo del hombre tiene que ser levantado.
Del santo Evangelio según san Juan: 3, 13-17
En aquel tiempo, Jesús
dijo a Nicodemo: "Nadie ha subido al cielo sino el Hijo del hombre, que
bajó del cielo y está en el cielo. Así como Moisés
levantó la serpiente en el desierto, así tiene que ser levantado
el Hijo del hombre, para que todo el que crea en Él tenga vida eterna.
Porque tanto amó Dios al mundo, que le entregó a su Hijo único,
para que todo el que crea en Él no perezca, sino que tenga vida eterna.
Porque Dios no envió a su Hijo para condenar al mundo, sino para que
el mundo se salvara por Él".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Te rogamos, Señor, que este sacrificio, que en el altar de la cruz borró el pecado del mundo entero, nos purifique de todas nuestras ofensas. Por Jesucristo, nuestro Señor.
PREFACIO
La victoria de la Cruz gloriosa.
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno. Porque has puesto la salvación del género humano en el árbol de la Cruz, para que, de donde tuvo origen la muerte, de allí resurgiera la vida; y el que en un árbol venció, fuera en un árbol vencido, por Cristo, Señor nuestro. Por él, celebran tu majestad los ángeles, te adoran las dominaciones, se estremecen las potestades. Te celebran, unidos en la alegría, los cielos, las virtudes celestiales y los bienaventurados serafines. Permítenos asociarnos a sus voces cantando humildemente tu alabanza: Santo, Santo, Santo...
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 12, 32
Cuando yo sea levantado de la tierra, atraeré a todos hacia mí, dice el Señor. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor nuestro, Jesucristo, fortalecidos con este alimento santo, te pedimos que conduzcas a la gloria de tu resurrección a quienes redimiste por el madero vivificante de la cruz. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Fiesta de Los Santos Felipe y Santiago
Rojo , Apóstoles MR p. 707 / Lecc. I, p. 1015
Otros santos: Silvano de Gaza, mártir. Beato Ceferino Jiménez "el Pelé", mártir.
El único dato que se conserva acerca de Santiago es que pertenecía al grupo de los doce apóstoles. Felipe, lo mismo que Pedro y Andrés, era oriundo de Betsaida y había sido discípulo de Juan el Bautista. En la última cena le dijo a Jesús: "Señor, muéstranos al Padre". El Señor le contestó: "Felipe, quien me ve a mí, ve también al Padre".
LOS IRÁ GUIANDO EN LA VERDAD
1 Co 15,1-8; Jn 16,6-14
La muerte de Jesús sumió a los discípulos en el desaliento y la confusión. De pronto se quedaron sin referentes ni coordenadas para enfrentar los desafíos del discipulado. Si el Hijo obediente del Padre había sido aplastado por los poderosos, su esperanza quedaba hecha pedazos. Dios Padre no se quedó mudo ni arrinconado ante la ejecución de su Hijo, sino que lo reivindicó elevándolo a su diestra. Esa gloriosa resurrección no podía quedar en la penumbra, tenía que ser proclamada y manifiesta a los discípulos: Pedro, Juan, Santiago, Magdalena y muchos otros fueron beneficiarios de aquella alegre noticia y ellos mismos la condensaron en la antiquísima fórmula del kerigma: "que el Mesías murió por nuestros pecados, como lo anunciaban las Escrituras, que fue sepultado y que resucitó al tercer día, como lo anunciaban las Escrituras; que se apareció a Pedro y más tarde a los Doce".
ANTÍFONA DE ENTRADA
Éstos son los santos varones que Dios eligió con amor verdadero y les dio la gloria eterna. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que cada año nos alegras con la festividad de los santos apóstoles Felipe y Santiago, concédenos, por su intercesión, tener parte en la pasión y resurrección de tu Unigénito, para que merezcamos llegar a contemplarte eternamente. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Después se le apareció a Santiago y luego a todos los apóstoles.
De la primera carta del apóstol san Pablo a los corintios: 15, 1-8
Hermanos: Les recuerdo el
Evangelio que yo les prediqué y que ustedes aceptaron y en el cual están
firmes. Este Evangelio los salvará, si lo cumplen tal y como yo lo prediqué.
De otro modo, habrán creído en vano.
Les transmití, ante todo, lo que yo mismo recibí: Que Cristo murió
por nuestros pecados, como dicen las Escrituras; que fue sepultado y que resucitó
al tercer día, según estaba escrito; que se le apareció
a Pedro y luego a los Doce; después se apareció a más de
quinientos hermanos reunidos, la mayoría de los cuales vive aún
y otros ya murieron. Más tarde se le apareció a Santiago y luego
a todos los apóstoles. Finalmente, se me apareció también
a mí.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 18, 2-3.
4-5
R/. El mensaje del Señor llega a toda la tierra. Aleluya.
Los cielos proclaman la
gloria de Dios y el firmamento anuncia la obra de sus manos. Un día comunica
su mensaje al otro día y una noche se lo transmite a la otra noche. R/.
Sin que pronuncien una palabra, sin que resuene su voz, a toda la tierra llega
su sonido y su mensaje hasta el fin del mundo. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 14, 6. 9
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy el camino, la verdad y la vida, dice el Señor. Felipe, quien me ve a mí, ve al Padre. R/.
EVANGELIO
Tanto tiempo hace que estoy con ustedes, ¿y todavía no me conocen?
Del santo Evangelio según san Juan: 14, 6-14
En aquel tiempo. Jesús
dijo a Tomás: "Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie va al
Padre si no es por mí. Si ustedes me conocen a mí, conocen también
a mi Padre. Ya desde ahora lo conocen y lo han visto".
Le dijo Felipe: "Señor, muéstranos al Padre y eso nos basta".
Jesús le replicó: "Felipe, tanto tiempo hace que estoy con
ustedes, ¿y todavía no me conoces? Quien me ve a mí, ve
al Padre. ¿Entonces por qué dices: 'Muéstranos al Padre'?
¿O no crees que yo estoy en el Padre y que el Padre está en mí?
Las palabras que yo les digo, no las digo por mi propia cuenta. Es el Padre,
que permanece en mí, quien hace las obras. Créanme: yo estoy en
el Padre y el Padre está en mí. Si no me dan fe a mí, créanlo
por las obras. Yo les aseguro: el que crea en mí, hará las obras
que hago yo y las hará aún mayores, porque yo me voy al Padre;
y cualquier cosa que pidan en mi nombre, yo la haré para que el Padre
sea glorificado en el Hijo. Yo haré cualquier cosa que me pidan en mi
nombre".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta, Señor, los dones que te presentamos en esta festividad de tus santos apóstoles Felipe y Santiago, y concédenos vivir nuestra fe con un corazón puro y sincero. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I o II de los Apóstoles, pp. 531-532. (532-533).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 14, 8-9
Señor, muéstranos al Padre y nos basta. Felipe, el que me ha visto a mí, ha visto a mi Padre. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Purifica, Señor,
nuestros corazones por este sacramento que acabamos de recibir, para que, contemplándote
en tu Hijo, con los apóstoles Felipe y Santiago, merezcamos alcanzar
la vida eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, p. 602 (610).
Blanco Feria de la VI Semana de Pascua MR p. 378 (383) / Lecc. I, p. 943
Otros santos: Hilario de Arlés, obispo; Florián de Lorch, mártir; Eulogio de Alejandría, patriarca.
SU PENA ACABARÁ EN ALEGRÍA
Hch 18,1-8; Jn 16,16-20
La repentina separación física que provocó la muerte y crucifixión de Jesús dejó consecuencias en los discípulos: se llenaron de miedo y de pena y se atrincheraron en una casa para no sufrir el mismo destino que su maestro. El desánimo parecía haber llegado para quedarse, porque no daban crédito a los mensajes de las mujeres que alegaban haber visto a Jesús resucitado y vuelto a la vida plena. Quienes lo entendieron se llenaron de alegría y vivieron en otra perspectiva por el resto de su vida. Los cristianos que nos presenta san Lucas en los Hechos de los Apóstoles, soportaron insultos y agravios por causa de su adhesión a Jesús. El rechazo de sus vecinos de Corinto los afligía, pero era más fuerte la confianza que tenían en Cristo muerto y resucitado y por eso se mantenían firmes en la fe y se bautizaban en el nombre de Jesucristo.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 67, 8-9. 20
Cuando saliste, Señor, al frente de tu pueblo y le abriste camino a través del desierto, la tierra se estremeció y hasta los cielos se fundieron. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que hiciste a tu pueblo partícipe de tu redención, concédenos vivir perpetuamente llenos de gozo por la resurrección del Señor. Él, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos.
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Pablo se estableció en la casa de Aquila, trabajaba y predicaba en la sinagoga.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 18, 1-8
En aquellos días,
Pablo salió de Atenas y se fue a Corinto. Allí encontró
a un judío, llamado Aquila, natural del Ponto, que acababa de llegar
de Italia con su mujer, Priscila, en acatamiento a las órdenes de Claudio,
que expulsó de Roma a todos los judíos. Pablo se acercó
a ellos, y como eran del mismo oficio, se quedó a vivir y a trabajar
con ellos. Su oficio era fabricar tiendas de campaña. Cada sábado
Pablo discutía en la sinagoga y trataba de convencer a judíos
y griegos.
Cuando Silas y Timoteo llegaron de Macedonia, Pablo se dedicó por completo
a la predicación y afirmó delante de los judíos que Jesús
era el Mesías. Como éstos lo contradecían y lo insultaban,
se rasgó las vestiduras y dijo: "Que la sangre de ustedes caiga
sobre su propia cabeza: yo soy inocente. De ahora en adelante, iré a
hablar a los paganos".
Salió de allí y entró en la casa de Tito Justo, que adoraba
a Dios, y cuya casa estaba al lado de la sinagoga.
Crispo, el jefe de la sinagoga, creyó en el Señor, junto con toda
su familia. Asimismo, al oír a Pablo, muchos de los corintios creyeron
y recibieron el bautismo.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 97, 1-2-3ab. 3cd-4
R/. El Señor
nos ha demostrado su amor y su lealtad. Aleluya.
Cantemos al Señor un canto nuevo, pues ha hecho maravillas. Su diestra
y su santo brazo le han dado la victoria. R/.
El Señor ha dado a conocer su victoria y ha revelado a las naciones su
justicia. Una vez más ha demostrado Dios su amor y su lealtad hacia Israel.
R/.
La tierra entera ha contemplado la victoria de nuestro Dios. Que todos los pueblos
y naciones aclamen con júbilo al Señor. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 14, 18
R/. Aleluya, aleluya.
No los dejaré desamparados, dice el Señor; me voy, pero volveré a ustedes y entonces se alegrará su corazón. R/.
EVANGELIO
Su tristeza se transformará en alegría.
Del santo Evangelio según san Juan: 16, 16-20
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "Dentro de poco tiempo ya no me verán;
y dentro de otro poco me volverán a ver". Algunos de sus discípulos
se preguntaban unos a otros: "¿Qué querrá decir con
eso de que: 'Dentro de poco tiempo ya no me verán, y dentro de otro poco
me volverán a ver', y con eso de que: 'Me voy al Padre'?" Y se decían:
"¿Qué significa ese 'un poco'? No entendemos lo que quiere
decir".
Jesús comprendió que querían preguntarle algo y les dijo:
"Están confundidos porque les he dicho: 'Dentro de poco tiempo ya
no me verán y dentro de otro poco me volverán a ver'. Les aseguro
que ustedes llorarán y se entristecerán, mientras el mundo se
alegrará. Ustedes estarán tristes, pero su tristeza se transformará
en alegría". Palabra del Señor. Gloria a ti,
Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Suba hasta ti, Señor, nuestra oración, acompañada por estas ofrendas, para que, purificados por tu bondad, nos dispongas para celebrar el sacramento de tu inmenso amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I- V de Pascua. 499-503 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 28, 20
Yo estaré con ustedes todos los días hasta el fin del mundo. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios todopoderoso y eterno,
que, por la resurrección de Cristo, nos has hecho renacer a la vida eterna,
multiplica en nosotros el efecto de este sacramento pascual, e infunde en nuestros
corazones el vigor que comunica este alimento de salvación. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición p. 611 (619).
Blanco Feria de la VI Semana MR p. 388 (390) / Lecc. I, p. 945
Otros santos: Evodio de Antioquia, mártir; Lucio de Cirene, mártir; Domingo Savio, laico.
UNA ALEGRÍA IMPERECEDERA
Hch 18,9-18: Jn 16,20-23
Personas felices que viven en sintonía con sus más profundas convicciones existen sin duda alguna y cada uno las habrá conocido y sabrá que esa gente profundamente auténtica, tiene una razón profunda para serlo. Me tocó participar en una Eucaristía con ese santo profeta y obispo brasileño que fue don Hélder Cámara y también con su sucesor don Marcel Pinto y pude apreciar de cerca la hondura de su vida cristiana. Los que acertadamente son y viven como seguidores de Jesús son reconocibles porque irradian la paz y la alegría que da el Espíritu del resucitado. Como bien dijera el Papa Francisco no podemos decir que creemos en Jesús y tener cara de funeral ni actitud de solterona. Quien ha recibido la vida de Dios aprende a dar vida, y esa entrega de vida lo transforma y lo llena de verdadera alegría.
ANTÍFONA DE ENTRADA Ap 5, 9-10
Señor, con tu sangre has rescatado a hombres de toda raza, lengua, pueblo y nación y has hecho de nosotros un reino de sacerdotes para Dios. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Escucha, Señor, nuestras súplicas, y haz que el efecto santificador que prometió tu Palabra se cumpla en todas partes por la predicación evangélica y que, conforme a lo que anunció, el testimonio de tu verdad lleve a plenitud nuestra adopción filial. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Muchos de esta ciudad pertenecen a mi pueblo.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 18, 9-18
En aquellos días,
Pablo tuvo una visión nocturna en Corinto, en la que le dijo el Señor:
"No tengas miedo. Habla y no calles, porque yo estoy contigo y nadie pondrá
la mano sobre ti para perjudicarte. Muchos de esta ciudad pertenecen a mi pueblo".
Por eso Pablo se quedó allí un año y medio, explicándoles
la palabra de Dios.
Pero cuando Galión era procónsul de Acaya, los judíos,
de común acuerdo, se abalanzaron contra Pablo y lo llevaron hasta el
tribunal, donde dijeron: "Este hombre trata de convencer a la gente de
que den a Dios un culto contrario a la ley".
Iba Pablo a tomar la palabra para responder, cuando Galión dijo a los
judíos: "Si se tratara de un crimen o de un delito grave, yo los
escucharía, como es razón; pero si la disputa es acerca de palabras
o de nombres o de su ley, arréglense ustedes". Y los echó
del tribunal. Entonces se apoderaron de Sóstenes, jefe de la sinagoga,
y lo golpearon delante del tribunal, sin que Galión se preocupara en
lo más mínimo. Pablo se quedó en Corinto todavía
algún tiempo. Después se despidió de los hermanos y se
embarcó para Siria, con Priscila y Aquila. En Céncreas se rapó
la cabeza para cumplir una promesa que había hecho.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 46, 2-3. 4-5. 6-7
R/. Dios es el rey del universo. Aleluya.
Aplaudan, pueblos todos;
aclamen al Señor, de gozo llenos, que el Señor, el Altísimo,
es terrible y de toda la tierra, rey supremo. R/.
Fue él quien nos puso por encima de todas las naciones y los pueblos,
al elegirnos como herencia suya, orgullo de Jacob, su predilecto. R/.
Entre voces de júbilo y trompetas, Dios, el Señor, asciende hasta
su trono. Cantemos en honor de nuestro Dios, al rey honremos y cantemos todos.
R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Lc 24, 46. 26
R/. Aleluya, aleluya.
Cristo tenía que morir y resucitar de entre los muertos, para entrar así en su gloria. R/.
EVANGELIO
Nadie podrá quitarles su alegría.
Del santo Evangelio según san Juan: 16, 20-23
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "Les aseguro que ustedes llorarán
y se entristecerán, mientras el mundo se alegrará. Ustedes estarán
tristes, pero su tristeza se transformará en alegría.
Cuando una mujer va a dar a luz, se angustia, porque le ha llegado la hora;
pero una vez que ha dado a luz, ya no se acuerda de su angustia, por la alegría
de haber traído un hombre al mundo. Así también ahora ustedes
están tristes, pero yo los volveré a ver, se alegrará su
corazón y nadie podrá quitarles su alegría. Aquel día
no me preguntarán nada".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, con bondad, estas ofrendas de tu familia santa, para que, con la ayuda de tu protección, conserve los dones recibidos y llegue a poseer los eternos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Rm 4, 25
Cristo fue condenado a muerte por nuestros pecados y resucitó para nuestra justificación. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Protege, Señor, con
amor constante a quienes has salvado, para que, una vez redimidos por la pasión
de tu Hijo, se llenen ahora de alegría por su resurrección. Él
que vive y reina por los siglos de los siglos.
Puede utilizarse la fórmula de bendición sobre el pueblo n. 2
p. 606 (614).
Blanco Feria de la VI Semana de Pascua Misa Votiva de Santa María de Guadalupe LH Vísperas I de mañana: todo propio de la Ascención del Señor. Tomo II: p. 920 Para los fieles: p. 349 Edición popular: pp. 450 y 202. MR p. 1138 (1187)/ Lecc. I, p. 947
Otros santos: Rosa Venerini, fundadora; Flavia Domitila de Roma, mártir. Beato Francisco Paleari, presbítero.
EL PADRE MISMO LOS QUIERE
Hch 18, 23-28; Jn 16, 23-28
Aquila y Priscila fueron una familia judía que se convirtió al Evangelio de Jesucristo, emigraron de su tierra natal en el Ponto (actual zona norte de Turquía) hasta Roma, de donde fueron expulsados por mandato del emperador Claudio. Era un matrimonio entusiasta que no claudicaba en su esperanza cristiana. En otro momento radicaron en Corinto y compartieron con el apóstol Pablo la bodega donde tejían y vendían sus tiendas; desde esa condición común vivieron como artesanos y misioneros, ganándose el pan con el sudor de su frente y testimoniando vigorosamente junto con Apolo, la mesianidad de Jesús. El relato de los Hechos de los Apóstoles nos los presenta como un matrimonio ejemplar, un referente que puede seguir animando a las familias de hoy a vivir el evangelio con la actitud que recomienda el Señor Jesús: desde la conciencia de sabernos amados por el Padre.
ANTÍFONA DE ENTRADA
¡Bendita tú, Madre de la luz: siendo Virgen engendraste a Cristo, y eres modelo y Madre de la Iglesia, que engendra a la vida nueva a todos los que creen, mediante el agua virginal del bautismo! Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios y Padre nuestro, que por el misterio pascual de tu Hijo colmaste de bendiciones y de los dones del Espíritu Santo a la santísima Virgen María, concédenos, por la intercesión de aquella a quien veneramos bajo la advocación de Guadalupe, que participemos de los mismos dones para proclamar con nuestras obras y palabras la buena nueva de la resurrección. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
El judío Apolo demostró, por medio de la Escritura, que Jesús es el Mesías.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 18, 23-28
En aquellos días,
después de haber estado en Antioquía algún tiempo, emprendió
Pablo otro viaje y recorrió Galacia y Frigia, confirmando en la fe a
los discípulos.
Un judío, natural de Alejandría, llamado Apolo, hombre elocuente
y muy versado en las Escrituras, había ido a Éfeso. Aquel hombre
estaba instruido en la doctrina del Señor, y siendo de ferviente espíritu,
disertaba y enseñaba con exactitud lo concerniente a Jesús, aunque
no conocía más que el bautismo de Juan.
Apolo comenzó a hablar valientemente en la sinagoga. Cuando lo oyeron
Priscila y Aquila, lo tomaron por su cuenta y le explicaron con mayor exactitud
la doctrina del Señor. Como él deseaba pasar a Grecia, los hermanos
lo animaron y escribieron a los discípulos de allá para que lo
recibieran bien. Cuando llegó, contribuyó mucho, con la ayuda
de la gracia, al provecho de los creyentes, pues refutaba vigorosamente en público
a los judíos, demostrando, por medio de las Escrituras, que Jesús
era el Mesías.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 46, 2-3. 8-9. 10
R/. Dios es el rey del universo. Aleluya.
Aplaudan, pueblos todos;
aclamen al Señor, de gozo llenos, que el Señor, el Altísimo,
es terrible y de toda la tierra, rey supremo. R/.
Porque Dios es el rey del universo, cantemos el mejor de nuestros cantos. Reina
Dios sobre todas las naciones desde su trono santo. R/.
Los jefes de los pueblos se han reunido con el pueblo de Dios, Dios de Abraham,
porque de Dios son los grandes de la tierra. Por encima de todo Dios está.
R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO
Jn 16, 28 R/. Aleluya, aleluya.
Salí del Padre y vine al mundo, ahora dejo el mundo y vuelvo al Padre, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
El Padre mismo los ama, porque ustedes me han amado y han creído que salí del Padre
Del santo Evangelio según san Juan: 16, 23-28
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "Yo les aseguro: cuanto pidan al Padre en
mi nombre, se lo concederá. Hasta ahora no han pedido nada en mi nombre.
Pidan y recibirán, para que su alegría sea completa.
Les he dicho estas cosas en parábolas; pero se acerca la hora en que
ya no les hablaré en parábolas, sino que les hablaré del
Padre abiertamente. En aquel día pedirán en mi nombre, y no les
digo que rogaré por ustedes al Padre, pues el Padre mismo los ama, porque
ustedes me han amado y han creído que salí del Padre. Yo salí
del Padre y vine al mundo; ahora dejo el mundo y vuelvo al Padre". Palabra
del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios y Padre nuestro, que
estos dones que te presentamos, por el amor con que resucitaste a tu Hijo y
por la intercesión de santa María de Guadalupe, nos ayuden a estar
atentos a la acción de tu Espíritu Santo y buscar en todo tu gloria.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio: Con Santa María de Guadalupe participamos de la gloria pascual.
p. 1139 (1188).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Lc 1, 28
Alégrate, Virgen María, porque Cristo ha resucitado del sepulcro.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios y Padre nuestro, que nos alimentas con el pan vivo de tu Hijo resucitado, concédenos participar de su victoria pascual, para que en la alegría de este tiempo y ayudados por santa María de Guadalupe, juntos avancemos por el camino de la salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
La Ascensión del Señor
Blanco, Solemnidad, Misa de la Vigilia MR p. 383 (386) / Lecc. 1, p. 936
Otros santos: Domingo de la Calzada, laico.
LA PROMESA DEL PADRE
Hch 1,1-11; Hb 9,24-28; 10,19-23; Lc 24, 46-53
Las promesas nacidas de una persona que tiene autoridad moral y afecto sincero hacia nosotros nos entusiasman y suscitan el anhelo de verlas cumplidas en el corto plazo. En esa relación de confianza plena se mantenían los discípulos con el Señor Jesús. Desde ese contexto hemos de entender la promesa del envío del Espíritu Santo que tiene lugar al momento de las apariciones pascuales. Los apóstoles continúan atados a esquemas antiguos, siguen aferrados a la idea de un mesianismo político que restauraría el reino de Israel. El Señor Jesús les advierte que el destino del mundo y el futuro de la Iglesia están en las manos del Padre y no tiene sentido hacer cálculos humanos. El Reino de Dios no está sujeto a anhelos populares, es un regalo gratuito del Padre. El don del Espíritu Santo será la primera evidencia de que los tiempos nuevos han llegado.
Esta Misa se dice en la tarde del día que precede a la solemnidad, ya sea antes o después de las primeras Vísperas de la Ascensión.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 67, 33. 35
Canten a Dios, reinos de la tierra, toquen para el Señor, que asciende sobre los cielos; su majestad y su poder resplandecen sobre las nubes. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios eterno, cuyo Hijo subió hoy al cielo en presencia de sus Apóstoles, te pedimos nos concedas que él, de acuerdo a su promesa, permanezca siempre con nosotros en la tierra, y nos permita vivir con él en el cielo. Él, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
En la celebración de la Misa de la Vigilia se utiliza el mismo formulario de lecturas que en la Misa del día de la Ascensión del Señor, tal como aparecen en las páginas que siguen.
Se dice Credo.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, cuyo Unigénito, nuestro mediador, vive para siempre y está sentado a tu derecha para interceder por nosotros, concédenos acercarnos llenos de confianza al trono de la gracia y obtener así tu misericordia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I o II de la Ascensión, pp. 504-505 (505-506).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Hb 10, 12
Cristo ofreció un solo sacrificio por el pecado, y se sentó para siempre a la derecha de Dios. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Te pedimos, Señor, que los dones que hemos recibido de tu altar, enciendan en nuestros corazones el deseo de la patria celeste, para que, siguiendo las huellas de nuestro Salvador, tendamos siempre a la meta a donde nos ha precedido. El, que vive y reina por los siglos de los siglos. Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, p. 596 (603).
MISA DEL DÍA
ANTÍFONA DE ENTRADA Hch 1, 11
Hombres de Galilea, ¿qué hacen allí parados mirando al cielo? Ese mismo Jesús, que los ha dejado para subir al cielo, volverá como lo han visto marcharse. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Concédenos, Dios todopoderoso, rebosar de santa alegría y, gozosos, elevar a ti fervorosas gracias ya que la ascensión de Cristo, tu Hijo, es también nuestra victoria, pues a donde llegó él, que es nuestra cabeza, esperamos llegar también nosotros, que somos su cuerpo. Por nuestro Señor Jesucristo...
O bien:
Te rogamos nos concedas, Dios todopoderoso, que al reafirmar, en este día, nuestra fe en la ascensión a los cielos de tu Unigénito, nuestro Redentor, nosotros vivamos también con nuestros pensamientos puesto en las cosas celestiales. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Se fue elevando a la vista de sus apóstoles.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 1,1-11
En mi primer libro, querido
Teófilo, escribí acerca de todo lo que Jesús hizo y enseñó,
hasta el día en que ascendió al cielo, después de dar sus
instrucciones, por medio del Espíritu Santo, a los apóstoles que
había elegido. A ellos se les apareció después de la pasión,
les dio numerosas pruebas de que estaba vivo y durante cuarenta días
se dejó ver por ellos y les habló del Reino de Dios.
Un día, estando con ellos a la mesa, les mandó: "No se alejen
de Jerusalén. Aguarden aquí a que se cumpla la promesa de mi Padre,
de la que ya les he hablado: Juan bautizó con agua; dentro de pocos días
ustedes serán bautizados con el Espíritu Santo".
Los ahí reunidos le preguntaban: "Señor, ¿ahora sí
vas a restablecer la soberanía de Israel?" Jesús les contestó:
"A ustedes no les toca conocer el tiempo y la hora que el Padre ha determinado
con su autoridad; pero cuando el Espíritu Santo descienda sobre ustedes,
los llenará de fortaleza y serán mis testigos en Jerusalén,
en toda Judea, en Samaria y hasta los últimos rincones de la tierra".
Dicho esto, se fue elevando a la vista de ellos, hasta que una nube lo ocultó
a sus ojos. Mientras miraban fijamente al cielo, viéndolo alejarse, se
les presentaron dos hombres vestidos de blanco, que les dijeron: "Galileos,
¿qué hacen allí parados, mirando al cielo? Ese mismo Jesús
que los ha dejado para subir al cielo, volverá como lo han visto alejarse".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 46, 2-3. 6-7. 8-9
R/. Entre voces de júbilo, Dios asciende a su trono. Aleluya.
Aplaudan, pueblos todos;
aclamen al Señor, de gozo llenos; que el Señor, el Altísimo,
es terrible y de toda la tierra, rey supremo. R/.
Entre voces de júbilo y trompetas, Dios, el Señor, asciende hasta
su trono. Cantemos en honor de nuestro Dios, al rey honremos y cantemos todos.
R/.
Porque Dios es el rey del universo, cantemos el mejor de nuestros cantos. Reina
Dios sobre todas las naciones desde su trono santo. R/.
SEGUNDA LECTURA**
Lo hizo sentar a su derecha en el cielo.
De la carta del apóstol san Pablo a los efesios: 1, 17-23
Hermanos: Pido al Dios de
nuestro Señor Jesucristo, el Padre de la gloria, que les conceda espíritu
de sabiduría y de revelación para conocerlo.
Le pido que les ilumine la mente para que comprendan cuál es la esperanza
que les da su llamamiento, cuán gloriosa y rica es la herencia que Dios
da a los que son suyos y cuál la extraordinaria grandeza de su poder
para con nosotros, los que confiamos en él, por la eficacia de su fuerza
poderosa.
Con esta fuerza resucitó a Cristo de entre los muertos y lo hizo sentar
a su derecha en el cielo, por encima de todos los ángeles, principados,
potestades, virtudes y dominaciones, y por encima de cualquier persona, no sólo
del mundo actual sino también del futuro.
Todo lo puso bajo sus pies y a él mismo lo constituyó cabeza suprema
de la Iglesia, que es su cuerpo, y la plenitud del que lo consuma todo en todo.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
O bien:
Cristo entró en el cielo mismo.
De la carta a los hebreos: 9, 24-28; 10, 19-23
Hermanos: Cristo no entró
en el santuario de la antigua alianza, construido por mano de hombres y que
sólo era figura del verdadero, sino en el cielo mismo, para estar ahora
en la presencia de Dios, intercediendo por nosotros.
En la antigua alianza, el sumo sacerdote entraba cada año en el santuario
para ofrecer una sangre que no era la suya; pero Cristo no tuvo que ofrecerse
una y otra vez a sí mismo en sacrificio, porque en tal caso habría
tenido que padecer muchas veces desde la creación del mundo. De hecho,
él se manifestó una sola vez, en el momento culminante de la historia,
para destruir el pecado con el sacrificio de sí mismo.
Y así como está determinado que los hombres mueran una sola vez
y que después de la muerte venga el juicio, así también
Cristo se ofreció una sola vez para quitar los pecados de todos. Al final
se manifestará por segunda vez, pero ya no para quitar el pecado, sino
para la salvación de aquellos que lo aguardan y en él tienen puesta
su esperanza.
Hermanos, en virtud de la sangre de Jesucristo, tenemos la seguridad de poder
entrar en el santuario, porque él nos abrió un camino nuevo y
viviente a través del velo, que es su propio cuerpo. Asimismo, en Cristo
tenemos un sacerdote incomparable al frente de la casa de Dios.
Acerquémonos, pues, con sinceridad de corazón, con una fe total,
limpia la conciencia de toda mancha y purificado el cuerpo por el agua saludable.
Mantengámonos inconmovibles en la profesión de nuestra esperanza,
porque el que nos hizo las promesas es fiel a su palabra.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Mt 28, 19. 20
R/. Aleluya, aleluya.
Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos, dice el Señor, y sepan que yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo. R/.
EVANGELIO
Mientras los bendecía, iba subiendo al cielo.
Del santo Evangelio según san Lucas: 24, 46-53
En aquel tiempo, Jesús
se apareció a sus discípulos y les dijo: "Está escrito
que el Mesías tenía que padecer y había de resucitar de
entre los muertos al tercer día, y que en su nombre se había de
predicar a todas las naciones, comenzando por Jerusalén, la necesidad
de volverse a Dios para el perdón de los pecados.
Ustedes son testigos de esto. Ahora yo les voy a enviar al que mi Padre les
prometió. Permanezcan, pues, en la ciudad, hasta que reciban la fuerza
de lo alto".
Después salió con ellos fuera de la ciudad, hacia un lugar cercano
a Betania; levantando las manos, los bendijo, y mientras los bendecía,
se fue apartando de ellos y elevándose al cielo. Ellos, después
de adorarlo, regresaron a Jerusalén, llenos de gozo, y permanecían
constantemente en el templo, alabando a Dios.
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Se dice Credo.
PLEGARIA UNIVERSAL
Pongamos, hermanos,
nuestra mirada en Jesús, nuestro gran sacerdote, que ha atravesado el
cielo para interceder por nosotros, y pidámosle por las necesidades de
todos los hombres diciendo: Te rogamos, Señor. (R/. Te rogamos, Señor.)
Para que Cristo, desde el trono de su gloria, venga en ayuda de su Iglesia,
que lucha en medio de las dificultades del mundo, y no permita que sus fieles
se dejen cautivar por los bienes de la tierra, roguemos al Señor.
Para que Jesús, el Señor, que prometió que, al ser elevado
sobre la tierra, atraería a todos hacia sí, revele su nombre a
los hombres que aún no lo conocen, roguemos al Señor.
Para que el Señor, que con su triunfo ha glorificado nuestra carne colocándola
cerca de Dios Padre, llene de esperanza a los que sufren enfermedades en el
cuerpo o angustias en el espíritu, roguemos al Señor.
Para que el Señor, elevado al cielo, nos envíe el Espíritu
Santo, para que nos enseñe a amar los bienes de arriba y a no dejarnos
cautivar por las cosas de la tierra, roguemos al Señor.
Dios, Padre todopoderoso, que has resucitado a Cristo, tu Hijo, y los has
hecho Señor del universo, reconoce la voz de tu amado en las oraciones
de la Iglesia y concédenos lo que, te hemos pedido. Por Jesucristo, tu
Hijo, que vive y reina, inmortal y glorioso, por los siglos de los siglos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Al ofrecerte, Señor, este sacrificio en la gloriosa festividad de la ascensión, concédenos que por este santo intercambio, nos elevemos también nosotros a las cosas del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I o II de la Ascensión, pp. 505-505 (505-506).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 28, 20
Yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios todopoderoso y eterno, que nos permites participar en la tierra de los misterios divinos, concede que nuestro fervor cristiano nos oriente hacia el cielo, donde ya nuestra naturaleza humana está contigo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- El mandato de Jesús resucitado tiene tanta vigencia en el primer siglo como en la actualidad. No podemos desentendernos del encargo misionero. La tentación de "quedarnos mirando al cielo" puede manifestarse de diferentes maneras: a unos se les antoja simplemente permanecer en la llamada "zona de confort", a otros se les ocurre ridiculizar a quienes emprenden una labor misionera. A fin de cuentas sobran los pretextos para justificar la pasividad y el egoísmo. El Señor Jesús nos invita a no seguir formando parte "de la generación del no" que multiplica los obstáculos y excusas para justificar la omisión y la pasividad. Afortunadamente ha habido miles de cristianos de quienes no sabemos nombre y apellido que iniciaron el camino del testimonio y gracias a su labor y su palabra, nosotros tuvimos acceso a Jesús.
Blanco Feria de la VII Semana de Pascua MR p. 393 (394) / Lecc. I, p. 949 / LH 3a. Semana
Otros santos: Isaías, profeta; Pacomio de la Tebaida, abad. Beata Teresa de Jesús Gerhardinger, fundadora.
ÁNIMO, YO HE VENCIDO AL MUNDO
Hch 19,1-8; Jn 16,29-33
La frase que encabeza este comentario utiliza el verbo en pasado para referirse a una acción que Jesús cumplirá en el futuro. Él está tan cierto del testimonio supremo que rendirá en la hora decisiva de su pasión, que se anticipa a referirlo como si fuera un hecho cumplido: Jesús ya ha vencido al orden maligno que se opone al proyecto del Padre. De la misma manera los discípulos de Éfeso supieron sortear las persecuciones de quienes desacreditaban el camino cristiano y se agruparon bajo la guía y el entusiasmo del apóstol san Pablo y consolidaron la comunidad eclesial que sesionaba en la escuela de Tirano. De muchas maneras pueden agruparse los seguidores de Jesús para continuar dando testimonio en la circunstancia presente.
ANTÍFONA DE ENTRADA Hch 1, 8
Recibirán la fuerza del Espíritu Santo, que descenderá sobre ustedes, y serán mis testigos hasta los confines de la tierra. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Descienda sobre nosotros, Señor, la fuerza del Espíritu Santo, para que podamos cumplir fielmente tu voluntad y manifestarla con una vida santa. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
¿Han recibido el Espíritu Santo, cuando abrazaron la fe?
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 19, 1-8
En aquellos días,
mientras Apolo estaba en Corinto, Pablo atravesó las regiones altas de
Galacia y Frigia y bajó a Éfeso. Encontró allí a
unos discípulos y les preguntó: "¿Han recibido el
Espíritu Santo, cuando abrazaron la fe?" Ellos respondieron: "Ni
siquiera hemos oído decir que exista el Espíritu Santo".
Pablo replicó: "Entonces, ¿qué bautismo han recibido?"
Ellos respondieron: "El bautismo de Juan".
Pablo les dijo: "Juan bautizó con un bautismo de conversión,
pero advirtiendo al pueblo que debían creer en aquel que vendría
después de él, esto es, en Jesús".
Al oír esto, los discípulos fueron bautizados en el nombre del
Señor Jesús, y cuando Pablo les impuso las manos, descendió
el Espíritu Santo y comenzaron a hablar lenguas desconocidas y a profetizar.
Eran en total unos doce hombres.
Durante los tres meses siguientes, Pablo frecuentó la sinagoga y habló
con toda libertad, disputando acerca del Reino de Dios y tratando de convencerlos.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 67, 2-3. 4-5ac. 6-7ab.
R/. Cantemos a Dios un canto de alabanza. Aleluya.
Cuando el Señor actúa
sus enemigos se dispersan y huyen ante su faz los que lo odian; cual se disipa
el humo, se disipan; como la cera se derrite al fuego, así ante Dios
perecen los malvados. R/.
Ante el Señor, su Dios, gocen los justos y salten de alegría.
Entonen alabanzas a su nombre. En honor del Señor toquen la cítara.
R/.
Porque el Señor, desde su templo santo, a huérfanos y viudas da
su auxilio; él fue quien dio a los desvalidos casa, libertad y riqueza
a los cautivos. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Col 3, 1
R/. Aleluya, aleluya.
Puesto que han resucitado con Cristo, busquen los bienes de arriba, donde está Cristo, sentado a la derecha de Dios. R/.
EVANGELIO
Tengan valor, porque yo he vencido al mundo.
Del santo Evangelio según san Juan: 16, 29-33
En aquel tiempo, los discípulos
le dijeron a Jesús: "Ahora sí nos estás hablando claro
y no en parábolas. Ahora sí estamos convencidos de que lo sabes
todo y no necesitas que nadie te pregunte. Por eso creemos que has venido de
Dios".
Les contestó Jesús: "¿De veras creen? Pues miren que
viene la hora, más aún, ya llegó, en que se van a dispersar
cada uno por su lado y me dejarán solo. Sin embargo, no estaré
solo, porque el Padre está conmigo. Les he dicho estas cosas, para que
tengan paz en mí. En el mundo tendrán tribulaciones; pero tengan
valor, porque yo he vencido al mundo".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Que este sacrificio inmaculado nos purifique, Señor, y fortalezca nuestros corazones con el poder divino de tu gracia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio de Pascua o de la Ascensión.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Jn 14, 18; 16, 22
No los dejaré huérfanos, dice el Señor; vendré de nuevo a ustedes y se alegrarán sus corazones. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, muéstrate
benigno con tu pueblo, y ya que te dignaste alimentarlo con los misterios celestiales,
hazlo pasar de su antigua condición de pecado a una vida nueva. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición sobre el pueblo no. 7,
p. 607 (615).
Blanco Feria de la VII Semana de Pascua MR p. 394 (395) / Lecc. I, p. 952
Otros santos: Juan de Ávila, presbítero; Antonino de Florencia, obispo; Job, laico. Beato Iván Merz, laico.
UN SÓLO CAMINO
Hch 20,17-27; Jn 17,1-11
La Iglesia de Éfeso aprendió a identificar la vida cristiana con la imagen de un camino, enfatizando con eso el carácter dinámico del discipulado. Hay un punto de partida y un término de llegada, una meta. Quien se decida a recorrerlo tiene que tomar decisiones radicales como las que tomaron los paganos de aquella ciudad, que se desprendieron de sus prácticas y creencias supersticiosas. Quien toma la decisión de seguir a Jesús, marca un antes y un después. Tal como dice el Evangelio de san Juan, el Señor Jesús nos invita a salir del mundo, es decir, del ambiente decadente donde se dilapidan los recursos naturales, donde se trata como mercancía a las personas y se ejerce violencia contra ellas. De ese mundo nefasto y de sus prácticas mortíferas es necesario salir para vivir el camino de la vida y el cuidado responsable de la creación.
ANTÍFONA DE ENTRADA Ap 1, 17-18
Yo soy el primero y el último, yo soy el que vive; estuve muerto, pero ahora estoy vivo para siempre. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Te pedimos, Dios omnipotente y misericordioso, que venga a nosotros el Espíritu Santo, que se digne habitar en nuestros corazones y nos perfeccione como templos de su gloria. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Quiero llegar al fin de mi carrera y cumplir el encargo que recibí del Señor Jesús.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 20, 17-27
En aquellos días,
hallándose Pablo en Mileto, mandó llamar a los presbíteros
de la comunidad cristiana de Éfeso. Cuando se presentaron, les dijo:
"Bien saben cómo me he comportado entre ustedes, desde el primer
día en que puse el pie en Asia: he servido al Señor con toda humildad,
en medio de penas y tribulaciones, que han venido sobre mí por las asechanzas
de los judíos. También saben que no he escatimado nada que fuera
útil para anunciarles el Evangelio, para enseñarles públicamente
y en las casas, y para exhortar con todo empeño a judíos y griegos
a que se arrepientan delante de Dios y crean en nuestro Señor Jesucristo.
Ahora me dirijo a Jerusalén, encadenado en el espíritu, sin saber
qué sucederá allá. Sólo sé que el Espíritu
Santo en cada ciudad me anuncia que me aguardan cárceles y tribulaciones.
Pero la vida, para mí, no vale nada. Lo que me importa es llegar al fin
de mi carrera y cumplir el encargo que recibí del Señor Jesús:
anunciar el Evangelio de la gracia de Dios.
Por lo pronto sé que ninguno de ustedes, a quienes he predicado el Reino
de Dios, volverá a verme. Por eso declaro hoy que no soy responsable
de la suerte de nadie, porque no les he ocultado nada y les he revelado en su
totalidad el plan de Dios".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 67, 10-11. 20-21
R/. Reyes de la tierra, canten al Señor. Aleluya.
A tu pueblo extenuado diste
fuerzas, nos colmaste, Señor, de tus favores y habitó tu rebaño
en esta tierra, que tu amor preparó para los pobres. R/.
Bendito sea el Señor, día tras día, que nos lleve en sus
alas y nos salve. Nuestro Dios es un Dios de salvación porque puede librarnos
de la muerte. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 14, 16
R/. Aleluya, aleluya.
Yo le rogaré al Padre y él les dará otro Paráclito para que esté siempre con ustedes, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
Padre, glorifica a tu Hijo.
Del santo Evangelio según san Juan: 17, 1-11
En aquel tiempo, Jesús levantó los ojos al cielo y dijo: "Padre,
ha llegado la hora. Glorifica a tu Hijo, para que tu Hijo también te
glorifique, y por el poder que le diste sobre toda la humanidad, dé la
vida eterna a cuantos le has confiado. La vida eterna consiste en que te conozcan
a ti, único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien tú has enviado.
Yo te he glorificado sobre la tierra, llevando a cabo la obra que me encomendaste.
Ahora, Padre, glorificame en ti con la gloria que tenía, antes de que
el mundo existiera.
He manifestado tu nombre a los hombres que tú tomaste del mundo y me
diste. Eran tuyos y tú me los diste. Ellos han cumplido tu palabra y
ahora conocen que todo lo que me has dado viene de ti, porque yo les he comunicado
las palabras que tú me diste; ellos las han recibido y ahora reconocen
que yo salí de ti y creen que tú me has enviado.
Te pido por ellos; no te pido por el mundo, sino por éstos, que tú
me diste, porque son tuyos. Todo lo mío es tuyo y todo lo tuyo es mío.
Yo he sido glorificado en ellos. Ya no estaré más en el mundo,
pues voy a ti; pero ellos se quedan en el mundo".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, las súplicas de tus fieles junto con estas ofrendas que te presentamos, para que, lo que celebramos con devoción, nos lleve a alcanzar la gloria del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio de Pascua, de la Ascensión.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 20, 28
El Espíritu Santo, que el Padre enviará en mi nombre, dice el Señor, los instruirá en todo y les recordará lo que yo les he dicho. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Al recibir, Señor,
el don de estos sagrados misterios, te suplicamos humildemente que lo que tu
Hijo nos mandó celebrar en memoria suya, nos aproveche para crecer en
nuestra caridad fraterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición sobre el pueblo no. 9,
p. 607 (615).
Blanco Feria de la VII Semana de Pascua MR p. 395 (396) / Lecc. I, p. 954
Otros santos: Nuestra Señora de la Luz. Mayolo de Cluny, abad; Estela de Francia, mártir; Ignacio de Láconi, religioso.
NO PERTENECEN AL MUNDO
Hch 20, 28-38; Jn 17, 11-19
Dos discursos de despedida pronunciados con toda entereza por el Señor Jesús a sus discípulos y por el apóstol San Pablo a los responsables de las iglesias de Efeso. Uno y otro los pronuncian con gran entereza y con la tranquilidad de conciencia de haber cumplido el propio deber. El Señor Jesús no cedió ni a la presión popular ni al miedo a morir ni a la intimidación de las autoridades judías, sino que se mantuvo fiel a la voluntad de su Padre, no por obediencia ciega, sino porque entendió que ese designio era el que traería vida al mundo, restituiría la dignidad a los pobres y a los enfermos. Su decisión de entregar su vida obedeció a un amor total por sus hermanos. De igual manera el apóstol san Pablo superó las más diversas dificultades y se mantuvo fiel al mandato evangelizador de Cristo Jesús, confirmando en la fe a sus hermanos.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 46, 2
Pueblos todos, aplaudan y aclamen a Dios con gritos de júbilo. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios misericordioso, concede benignamente a tu Iglesia que, congregada por el Espíritu Santo, te sirva con todo su corazón y permanezca con sinceridad en comunión fraterna. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Ahora los dejo en manos de Dios, que puede hacerlos crecer y alcanzar la herencia prometida.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 20, 28-38
En aquellos días,
Pablo dijo a los presbíteros de la comunidad cristiana de Éfeso:
"Miren por ustedes mismos y por todo el rebaño, del que los constituyó
pastores el Espíritu Santo, para apacentar a la Iglesia que Dios adquirió
con la sangre de su Hijo.
Yo sé que después de mi partida, se introducirán entre
ustedes lobos rapaces, que no tendrán piedad del rebaño y sé
que, de entre ustedes mismos, surgirán hombres que predicarán
doctrinas perversas y arrastrarán a los fieles detrás de sí.
Por eso estén alerta. Acuérdense que durante tres años,
ni de día ni de noche he dejado de aconsejar, con lágrimas en
los ojos, a cada uno de ustedes.
Ahora los encomiendo a Dios y a su palabra salvadora, la cual tiene fuerza para
que todos los consagrados a Dios crezcan en el espíritu y alcancen la
herencia prometida. Yo no he codiciado ni el oro ni la plata ni la ropa de nadie.
Bien saben que cuanto he necesitado para mí y para mis compañeros,
lo he ganado con mis manos. Siempre he mostrado que hay que trabajar así,
para ayudar como se debe a los necesitados, recordando las palabras del Señor
Jesús: 'Hay más felicidad en dar que en recibir' ".
Dicho esto, se arrodilló para orar con todos ellos. Todos se pusieron
a llorar y abrazaban y besaban a Pablo, afligidos, sobre todo, porque les había
dicho que no lo volverían a ver. Y todos lo acompañaron hasta
el barco.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 67, 29-30. 33-35a. 35bc. 36c
R/. Reyes de la tierra, canten al Señor. Aleluya.
Señor, despliega
tu poder, reafirma lo que has hecho por nosotros, desde Jerusalén, desde
tu templo, a donde vienen los reyes con sus dones. R/.
Cántenle al Señor, reyes de la tierra, denle gloria al Señor
que recorre los cielos seculares, y que dice con voz como de trueno: "Glorifiquen
a Dios". R/.
Sobre Israel su majestad se extiende y su poder, sobre las nubes. Bendito sea
nuestro Dios. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 17, 17
R/. Aleluya, aleluya.
Tu palabra, Señor, es la verdad; santifícanos en la verdad. R/.
EVANGELIO
Padre, que ellos sean uno, como nosotros.
Del santo Evangelio según san Juan: 17, 11-19
En aquel tiempo, Jesús
levantó los ojos al cielo y dijo: "Padre santo, cuida en tu nombre
a los que me has dado, para que sean uno, como nosotros. Cuando estaba con ellos,
yo cuidaba en tu nombre a los que me diste; yo velaba por ellos y ninguno de
ellos se perdió, excepto el que tenía que perderse, para que se
cumpliera la Escritura.
Pero ahora voy a ti, y mientras estoy aún en el mundo, digo estas cosas
para que mi gozo llegue a su plenitud en ellos. Yo les he entregado tu palabra
y el mundo los odia, porque no son del mundo, como yo tampoco soy del mundo.
No te pido que los saques del mundo, sino que los libres del mal. Ellos no son
del mundo, como tampoco yo soy del mundo.
Santifícalos en la verdad. Tu palabra es la verdad. Así como tú
me enviaste al mundo, así los envío yo también al mundo.
Yo me santifico a mí mismo por ellos, para que también ellos sean
santificados en la verdad". Palabra del Señor. Gloria
a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta, Señor, el sacrificio que tú mismo nos mandaste ofrecer, y, por estos sagrados misterios, que celebramos en cumplimiento de nuestro servicio, dígnate llevar a cabo en nosotros la santificación que proviene de tu redención. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio de Pascua, o de la Ascensión.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 15, 26-27
Cuando venga el Abogado que yo les enviaré, el Espíritu de la verdad que procede del Padre, dará testimonio de mí, dice el Señor, y también ustedes darán testimonio. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que la participación
en este sacramento celestial, multiplique en nosotros tu gracia, Señor,
y, purificándonos con su poder, nos haga siempre más capaces de
seguir recibiendo tan admirable don. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición sobre el pueblo no. 10,
p. 607 (615).
Blanco / Rojo Feria de la VII Semana de Pascua o Santos Nereo y Aquileo, mártires, o San Pancracio, mártir MR p. 711 (730). 886 (925) / Lecc. I, p. 956
Otros santos: Beata Imelda Lambertini, virgen.
Eran soldados en tiempo del emperador Diocleciano. De acuerdo con los informes que nos da el Papa Dámaso, no eran aún cristianos cuando estalló la persecución; pero el valor de los mártires los impulsó a creer en Jesucristo. Fueron degollados en Roma (304).
QUE TODOS SEAN UNO
Hch 22, 30; 23, 6-11; Jn 17, 20-26
La oración sacerdotal de Jesús pone punto final al periodo de la así llamada vida pública de Jesús pues en adelante viene el relato de la pasión. Terminado el tiempo del testimonio, ha llegado la hora de revelar en plenitud la gloria del Padre. Así como el Hijo ha vivido en íntima unidad con el Padre, así los discípulos tendrán que sobreponerse a la tentación de construir bandos y facciones —como los que atinadamente aprovechará san Pablo en el relato de los Hechos para librarse de los abusos del Consejo judío— para convivir en un clima de tolerancia, fraternidad y comunión. La auténtica comunión espiritual no demanda la uniformidad ni el orden autoritario, es algo mucho más exigente, que pasa por el diálogo y el discernimiento de la voluntad de Dios en un clima de escucha y de colegialidad.
ANTÍFONA DE ENTRADA Mt 25,34
Vengan, benditos de mi Padre, y tomen posesión del Reino, preparado para ustedes desde la creación del mundo. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso, ya que hemos conocido la fortaleza con la cual confesaron la fe los gloriosos mártires Nereo y Aquileo, concédenos experimentar su piedad al interceder por nosotros ante ti. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Tendrás que dar testimonio de mí en Roma.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 22, 30; 23, 6-11
En aquellos días,
el comandante, queriendo saber con exactitud de qué acusaban a Pablo
los judíos, mandó que le quitaran las cadenas, convocó
a los sumos sacerdotes y a todo el sanedrín, y llevando consigo a Pablo,
lo hizo comparecer ante ellos.
Como Pablo sabía que una parte del sanedrín era de saduceos y
otra de fariseos, exclamó: "Hermanos: Yo soy fariseo, hijo de fariseos,
y me quieren juzgar porque espero la resurrección de los muertos".
Apenas dijo esto, se produjo un altercado entre fariseos y saduceos, que ocasionó
la división de la asamblea. (Porque los saduceos niegan la otra vida,
sea de ángeles o de espíritus resucitados; mientras que los fariseos
admiten ambas cosas).
Estalló luego una terrible gritería y algunos escribas del partido
de los fariseos, se pusieron de pie y declararon enérgicamente: "Nosotros
no encontramos ningún delito en este hombre. ¿Quién puede
decirnos que no le ha hablado un espíritu o un ángel?"
El alboroto llegó a tal grado, que el comandante, temiendo que hicieran
pedazos a Pablo, mandó traer a la guarnición para sacarlo de allí
y llevárselo al cuartel. En la noche siguiente se le apareció
el Señor a Pablo y le dijo: "Ten ánimo, Pablo; porque así
como en Jerusalén has dado testimonio de mí, así también
tendrás que darlo en Roma".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 15, 1-2a. 5.7-8.9-10.11
R/. Enséñanos, Señor, el camino de la vida. Aleluya.
Protégeme, Dios mío,
pues eres mi refugio. Yo siempre he dicho que tú eres mi Señor.
El Señor es la parte que me ha tocado en herencia; mi vida está
en sus manos. R/.
Bendeciré al Señor, que me aconseja, hasta de noche me instruye
internamente. Tengo siempre presente al Señor y con él a mi lado,
jamás tropezaré. R/.
Por eso se me alegran el corazón y el alma, y mi cuerpo vivirá
tranquilo, porque tú no me abandonarás a la muerte ni dejarás
que sufra yo la corrupción. R/.
Enséñame el camino de la vida, sáciame de gozo en tu presencia
y de alegría perpetua junto a ti. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 17, 21
R/. Aleluya, aleluya.
Que todos sean uno, como tú, Padre, en mí y yo en ti somos uno, a fin de que el mundo crea que tú me has enviado, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
Que su unidad sea perfecta.
Del santo Evangelio según san Juan: 17, 20-26
En aquel tiempo, Jesús
levantó los ojos al cielo y dijo: "Padre, no sólo te pido
por mis discípulos, sino también por los que van a creer en mí
por la palabra de ellos, para que todos sean uno, como tú, Padre, en
mí y yo en ti somos uno, a fin de que sean uno en nosotros y el mundo
crea que tú me has enviado.
Yo les he dado la gloria que tú me diste, para que sean uno, como nosotros
somos uno. Yo en ellos y tú en mí, para que su unidad sea perfecta
y así el mundo conozca que tú me has enviado y que los amas, como
me amas a mí.
Padre, quiero que donde yo esté, estén también conmigo
los que me has dado, para que contemplen mi gloria, la que me diste, porque
me has amado desde antes de la creación del mundo.
Padre justo, el mundo no te ha conocido; pero yo sí te conozco y éstos
han conocido que tú me enviaste. Yo les he dado a conocer tu nombre y
se lo seguiré dando a conocer, para que el amor con que me amas esté
en ellos y yo también en ellos".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Al conmemorar la muerte dichosa de tus justos, te ofrecemos, Señor, aquel mismo sacrificio en el que tuvo su origen todo martirio. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Ap 2, 7
Al vencedor le daré a comer del árbol de la vida, que está en el paraíso de Dios. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Al celebrar en este divino banquete la celestial victoria de los santos mártires Nereo y Aquileo, te pedimos, Señor, que concedas la victoria a quienes nos alimentamos con este pan de vida, y que, ya vencedores, nos lleves a comer del árbol de la vida en el paraíso. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición sobre el pueblo no. 26, p. 611 (619).
Nuestra Señora de Fátima
Blanco Memoria, MR p. 712 (731). 876 (916) / Lecc. I, p. 959
Otros santos: Eutimio "el Grande" de Palestina, ermitaño; Juliana de Norwich, mística.
E1 13 de mayo de 1917, en Cova de Iría, Portugal, tuvo lugar la primera aparición de la santísima Virgen a tres pastorcitos: Lucía, de diez años, Francisco, de ocho, y Jacinta, de siete. El 13 de mayo de 2000, el Papa Juan Pablo II declaró beatos a Jacinta y Francisco durante su viaje al santuario de las apariciones. En este día contemplamos a la que, en el orden de la gracia, es nuestra Madre clementísima, quien intercede para que en muchos fieles, Dios suscite la oración por los pecadores y la profunda conversión de los corazones.
EL RESTABLECIMIENTO DE LA CONFIANZA
Hch 25,13-21: Jn 21,15-19
La vida y la muerte son
más continuación que ruptura, uno muere como ha vivido. Jesús
vivió haciendo el bien a sus hermanos y cumpliendo la voluntad de su
Padre y de ese mismo modo culminó sus días en esta tierra. Sus
adversarios no lograron salirse con la suya, no lo confinaron en un sepulcro,
y no era un difunto como decía Festo, sino el Señor de la vida
como afirma convencido san Pablo. Este hecho que, para un observador ajeno como
el gobernante romano no pasaba de ser un incidente curioso, para los seguidores
de Jesús se convirtió en el acontecimiento fundamental. El apóstol
Pedro no lo había entendido así, por eso renegó de su maestro
en la víspera de su muerte; por eso mismo era necesario que
Jesús lo confrontara, para que así se restableciera la confianza
y la autoridad moral del pescador delante de sus hermanos.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 29,12
Cambiaste mi llanto en gozo, Señor, y me vestiste de fiesta. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios y Padre nuestro, que nos diste a la Madre de tu Hijo como Madre nuestra, concédenos que, preservando en la penitencia y en la oración a favor de la salvación del mundo, podamos promover cada vez con más eficacia el reinado de Cristo, Hijo tuyo y Señor nuestro. Él que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Pablo asegura que está vivo un hombre llamado Jesús, que había muerto.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 25, 13-21
En aquellos días,
el rey Agripa y Berenice llegaron a Cesarea para saludar a Festo. Como se detuvieron
algún tiempo allí, Festo expuso al rey el caso de Pablo con estas
palabras: "Tengo aquí un preso que me dejó Félix,
cuya condenación me pidieron los sumos sacerdotes y los ancianos de los
judíos, cuando estuve en Jerusalén.
Yo les respondí que no era costumbre romana condenar a ningún
hombre, sin carearlo antes con sus acusadores, para darle la oportunidad de
defenderse de la acusación.
Vinieron conmigo a Cesarea, y sin dar largas al asunto, me senté en el
tribunal al día siguiente y mandé que compareciera ese hombre.
Los acusadores que se presentaron contra él, no le hicieron cargo de
ninguno de los delitos que yo sospechaba.
Se trataba sólo de ciertas discusiones acerca de su religión y
de un tal Jesús, ya muerto, que Pablo asegura que está vivo. No
sabiendo qué determinación tomar, le pregunté a Pablo si
quería ir a Jerusalén para que se le juzgara allá de esos
cargos; pero como él pidió ser juzgado por el César, ordené
que siguiera detenido hasta que yo pudiera enviárselo".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 102, 1-2. 11-12. 19-20ah.
R/. Bendigamos al Señor,
que es el rey del universo. Aleluya.
Bendice al Señor, alma mía, que todo mi ser bendiga su santo nombre.
Bendice al Señor, alma mía, y no te olvides de sus beneficios.
R/.
Como desde la tierra hasta el cielo, así es de grande su misericordia;
como dista el oriente del ocaso, así aleja de nosotros nuestros delitos.
R/.
En el cielo el Señor puso su trono y su reino abarca el universo. Bendigan
al Señor todos los ángeles, ejecutores fieles de sus órdenes.
R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 14, 26
R/. Aleluya, aleluya.
El Espíritu Santo les enseñará todas las cosas y les recordará todo cuanto yo les he dicho, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
Apacienta mis corderos, apacienta mis ovejas.
Del santo Evangelio según san Juan: 21, 15-19
En aquel tiempo, le preguntó
Jesús a Simón Pedro: "Simón, hijo de Juan, ¿me
amas más que éstos?" Él le contestó: "Sí,
Señor, tú sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta
mis corderos".
Por segunda vez le preguntó: "Simón, hijo de Juan, ¿me
amas?" Él le respondió: "Sí, Señor, tú
sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Pastorea mis ovejas".
Por tercera vez le preguntó: "Simón, hijo de Juan, ¿me
quieres?" Pedro se entristeció de que Jesús le hubiera preguntado
por tercera vez si lo quería, y le contestó: "Señor,
tú lo sabes todo; tú bien sabes que te quiero". Jesús
le dijo: "Apacienta mis ovejas.
Yo te aseguro: cuando eras joven, tú mismo te ceñías la
ropa e ibas a donde querías; pero cuando seas viejo, extenderás
los brazos y otro te ceñirá y te llevará a donde no quieras".
Esto se lo dijo para indicarle con qué género de muerte habría
de glorificar a Dios. Después le dijo: "Sígueme".Palabra
del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Padre santo, la ofrenda de nuestra humildad que, llenos de alegría, te presentamos al celebrar la conmemoración de la santísima Virgen María y concédenos que, asociados al sacrificio de Cristo, recibamos el consuelo en la vida presente y los gozos de la salvación eterna. Él que vive y reina por los siglos de los siglos.
Prefacio I- V de santa María Virgen en la conmemoración, pp. 526-530 (527-531).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
Alégrate, Virgen Madre, porque Cristo ha resucitado del sepulcro. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Fortalecidos con los sacramentos
pascuales, te rogamos, Señor, que quienes celebramos la memoria de la
Madre de tu Hijo, manifestemos la vida de Jesús en nuestra carne mortal.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición sobre el pueblo no. 2,
p. 607 (614).
Rojo Fiesta de San Matías, Apóstol MR p. 712 (731)/ Lecc. I, p. 1017
Otros santos: María Dominga Mazzarello, cofundadora; Miguel Garicoits, fundador.
Siguió a Jesús "desde que éste fue bautizado hasta su ascensión". Por este motivo, cuando Judas desertó y hubo necesidad de completar el número de los doce Apóstoles, Pedro lo propuso para que se uniera al grupo apostólico y "se convirtiera en testigo de la resurrección" del Señor.
AMAR A LA MANERA DE JESÚS
Hch 1, 15-17. 20-26, Jn 15, 9-17
El verdadero amor nace de una libre decisión de entregarse, por eso mismo nadie puede exigir que le amen. Quien ama dispone de su libertad y la encarcela al entregarse sin condiciones a quien ama. Desde la clave del amor podemos comprender la necedad de Judas que quiso forzar las cosas y entregó al Maestro en manos de sus captores. No permitió que el Señor Jesús eligiera cabalmente su forma de acatar el designio del Padre, entregándolo a sus adversarios, quiso anteponer su voluntad a la del Padre. El verdadero amor no manipula, ni domina, sino que se entrega sin cálculo alguno. El Señor Jesús podía invitar a sus discípulos a amar hasta la entrega de la propia vida, porque dejando atrás sus propios intereses y su seguridad, empeñó completamente su vida para que resplandeciera la voluntad amorosa del Padre.
ANTÍFONA DE ENTRADA Jn 15, 16
No son ustedes los que me han elegido, dice el Señor; soy yo quien los ha elegido y los ha destinado para que vayan y den fruto y su fruto permanezca. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que asociaste a san Matías al colegio de los Apóstoles, concédenos, por su intercesión, que, teniendo la dicha de ser amados por ti, merezcamos ser contados entre tus elegidos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Echaron suertes, le tocó a Matías y lo asociaron a los once apóstoles.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 1, 15-17. 20-26
En aquellos días,
Pedro se puso de pie en medio de los hermanos, que eran unos ciento veinte,
y dijo: "Hermanos, tenía que cumplirse aquel pasaje de la Escritura
en que el Espíritu Santo, por boca de David, hizo una predicción
tocante a Judas, quien fue el que guio a los que apresaron a Jesús. Él
era de nuestro grupo y había sido llamado a desempeñar con nosotros
este ministerio. Ahora bien, en el libro de los Salmos está escrito:
Que su morada quede desierta y que no haya quien habite en ella; que su cargo
lo ocupe otro. Hace falta, por lo tanto, que uno se asocie a nosotros como testigo
de la resurrección de Jesús, uno que sea de los que nos acompañaron
mientras convivió con nosotros el Señor Jesús, desde que
Juan bautizaba hasta el día de la ascensión".
Propusieron entonces a dos: a José Barsabá, por sobrenombre "el
Justo", y a Matías, y se pusieron a orar de este modo: "Tú,
Señor, que conoces los corazones de todos, muestra a cuál de estos
dos has elegido para desempeñar este ministerio y apostolado, del que
Judas desertó para irse a su propio lugar". Echaron suertes, le
tocó a Matías y lo asociaron a los once apóstoles.Palabra
de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 112, 1-2. 3-4. 5-6. 7-8
R/. Lo puso el Señor entre los jefes de su pueblo. Aleluya.
Bendito sea el Señor,
alábenlo sus siervos. Bendito sea el Señor desde ahora y para
siempre. R/.
Desde que sale el sol hasta su ocaso, alabado sea el nombre del Señor.
Dios está sobre todas las naciones, su gloria, por encima de los cielos.
R/.
¿Quién hay como el Señor? ¿Quién iguala al
Dios nuestro, que tiene en las alturas su morada, y sin embargo de esto, bajar
se digna su mirada para ver tierra y cielo? R/.
Él levanta del polvo al desvalido y saca al indigente del estiércol,
para hacerlo sentar entre los grandes, los jefes de su pueblo. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 15, 16
R/. Aleluya, aleluya.
Yo los he elegido del mundo, dice el Señor, para que vayan y den fruto y su fruto permanezca. R/.
EVANGELIO
No son ustedes los que me han elegido, soy yo quien los ha elegido.
Del santo Evangelio según san Juan: 15, 9-17
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "Como el Padre me ama, así los amo
yo. Permanezcan en mi amor. Si cumplen mis mandamientos, permanecen en mi amor;
lo mismo que yo cumplo los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor.
Les he dicho esto para que mi alegría esté en ustedes y su alegría
sea plena.
Este es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros como yo los he amado.
Nadie tiene amor más grande a sus amigos que el que da la vida por ellos.
Ustedes son mis amigos, si hacen lo que yo les mando. Ya no los llamo siervos,
porque el siervo no sabe lo que hace su amo; a ustedes los llamo amigos, porque
les he dado a conocer todo lo que le he oído a mi Padre.
No son ustedes los que me han elegido, soy yo quien los ha elegido y los ha
destinado para que vayan y den fruto y su fruto permanezca, de modo que el Padre
les conceda cuanto le pidan en mi nombre. Esto es lo que les mando: que se amen
los unos a los otros".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta, Señor, los dones que tu Iglesia te presenta con devoción en la festividad de san Matías, y, por ellos, fortalécenos con el poder de tu gracia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I o II de los Apóstoles, pp. 531-532 (532-533).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 15, 12
Éste es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros como yo los he amado, dice el Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, tú
que das con abundancia a tu familia, estos dones celestiales, por la intercesión
de san Matías dígnate recibirnos en la claridad de tu luz, para
que tengamos parte con los santos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, p. 602 (610).
Domingo de Pentecostés
Rojo Solemnidad, MR p. 401 (400) / Lecc. 1, p. 964 / LH de la solemnidad.
Otros santos: Isidro, Labrador; Juana de Lestonnac, fundadora. Beato Andrés Abellón, presbítero.
EL ABOGADO DEL PADRE
Hch 2, 1-11; Rm 8, 8-17; Jn 14, 15-16. 23-26
Es el Espíritu de la verdad, como tal vive al servicio de la verdad, es decir, de la oferta de vida plena que el Señor Jesús nos ofrece en nombre del Padre. Demasiadas historias torcidas hemos conocido y tal vez padecido a manos de abogados que no merecen tal nombre. Sin embargo, el Espíritu Santo no se asemeja a quienes viven al servicio de intereses económicos y venden la justicia al mejor postor. El Espíritu del Resucitado no es un simple complaciente con quienes lo invocamos, sino que va mostrando aprobación o rechazo, según que exista o no conformidad con el designio del Padre celestial. La muerte y resurrección de Jesús se convirtió en la piedra decisiva en la vida del Israel en el primer siglo, de modo que unos cimentaron su existencia en tan grande oferta de vida y otros, quisieron negarla con infundios y argumentaciones sesgadas.
Misa de la Vigilia (Primera forma)
La Misa de la Vigilia de Pentecostés se dice en la tarde del sábado, ya sea antes o después de las primeras Vísperas de la solemnidad.
ANTÍFONA DE ENTRADA Rm 5, 5; Cfr. 8, 11
El amor de Dios ha sido infundido en nuestros corazones por el Espíritu Santo, que habita en nosotros. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios eterno y todopoderoso, que quisiste que la celebración del sacramento de la Pascua perdurara a lo largo de estos cincuenta días, haz que todos los pueblos de la tierra, en otro tiempo dispersos, superada la multiplicidad de lenguas, se congreguen y, movidos por el don venido del cielo, confiesen unánimes la gloria de tu nombre. Por nuestro Señor Jesucristo...
O bien:
Concede, Dios todopoderoso,
que resplandezca sobre nosotros el fulgor de tu gloria, y tú, luz de
luz, mediante la iluminación del Espíritu Santo, reafirma los
corazones de quienes, por tu gracia, renacieron a una vida nueva. Por nuestro
Señor Jesucristo...
El Leccionario ofrece cuatro opciones para la primera lectura, aquí proponemos
las dos siguientes:
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA**
Derramaré mi espíritu sobre mis siervos y siervas.
Del libro del profeta Joel: 3, 1-5
Esto dice el Señor
Dios: "Derramaré mi espíritu sobre todos; profetizarán
sus hijos y sus hijas, sus ancianos soñarán sueños y sus
jóvenes verán visiones. También sobre mis siervos y mis
siervas derramaré mi espíritu en aquellos días. Haré
prodigios en el cielo y en la tierra: sangre, fuego, columnas de humo. El sol
se oscurecerá, la luna se pondrá color de sangre, antes de que
llegue el día grande y terrible del Señor.
Cuando invoquen el nombre del Señor se salvarán, porque en el
monte Sión y en Jerusalén quedará un grupo, como lo ha
prometido el Señor a los sobrevivientes que ha elegido". Palabra
de Dios. Te alabamos, Señor.
O bien:
El Señor infundirá su espíritu a los huesos secos y revivirán.
Del libro del profeta Ezequiel: 37, 1-14
En aquellos días,
la mano del Señor se posó sobre mí, y su espíritu
me trasladó y me colocó en medio de un campo lleno de huesos.
Me hizo dar vuelta en torno a ellos. Había una cantidad innumerable de
huesos sobre la superficie del campo y estaban completamente secos.
Entonces el Señor me preguntó: "Hijo de hombre, ¿podrán
acaso revivir estos huesos? Yo respondí: "Señor, tú
lo sabes". Él me dijo: "Habla en mi nombre a estos huesos y
diles: 'Huesos secos, escuchen la palabra del Señor. Esto dice el Señor
Dios a estos huesos: He aquí que yo les infundiré el espíritu
y revivirán. Les pondré nervios, haré que les brote carne,
la cubriré de piel, les infundiré el espíritu y revivirán.
Entonces reconocerán ustedes que yo soy el Señor' ".
Yo pronuncié en nombre del Señor las palabras que él me
había ordenado, y mientras hablaba, se oyó un gran estrépito,
se produjo un terremoto y los huesos se juntaron unos con otros. Y vi cómo
les iban saliendo nervios y carne y cómo se cubrían de piel; pero
no tenían espíritu. Entonces me dijo el Señor: "Hijo
de hombre, habla en mi nombre al espíritu y dile: 'Esto dice el señor:
Ven, espíritu, desde los cuatro vientos y sopla sobre estos muertos,
para que vuelvan a la vida'".
Yo hablé en nombre del Señor, como él me había ordenado.
Vino sobre ellos el espíritu, revivieron y se pusieron de pie. Era una
multitud innumerable. El Señor me dijo: "Hijo de hombre: Estos huesos
son toda la casa de Israel, que ha dicho: 'Nuestros huesos están secos;
pereció nuestra esperanza y estamos destrozados'. Por eso habla en mi
nombre y diles: "Esto dice el Señor: Pueblo mío, yo mismo
abriré sus sepulcros, los haré salir de ellos y los conduciré
de nuevo a la tierra de Israel. Cuando abra sus sepulcros y los saque de ellos,
pueblo mío, dirán que yo soy el Señor. Entonces les infundiré
mi espíritu, los estableceré en su tierra y sabrán que
yo, el Señor, lo dije y lo cumplí'". Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 103,1-2a. 24. 35c. 27-28. 29bc-30
R/. Envía, Señor, tu Espíritu, a renovar la tierra. Aleluya.
Bendice al Señor,
alma mía; Señor y Dios mío, inmensa es tu grandeza. Te
vistes de belleza y majestad, la luz te envuelve como un manto. R/.
¡Qué numerosas son tus obras, Señor, y todas las hiciste
con maestría! La tierra está llena de tus creaturas. Bendice al
Señor, alma mía. R/.
Todos los vivientes aguardan que les des de comer a su tiempo; les das el alimento
y lo recogen, abres tu mano y se sacian de bienes. R/.
Si retiras tu aliento, toda creatura muere y vuelve al polvo. Pero envías
tu espíritu, que da vida, y renuevas el aspecto de la tierra. R/.
SEGUNDA LECTURA
El Espíritu intercede por nosotros con gemidos que no pueden expresarse con palabras.
De la carta del apóstol san Pablo a los romanos: 8, 22-27
Hermanos: Sabemos que la
creación entera gime hasta el presente y sufre dolores de parto; y no
sólo ella, sino también nosotros, los que poseemos las primicias
del Espíritu, gemimos interiormente, anhelando que se realice plenamente
nuestra condición de hijos de Dios, la redención de nuestro cuerpo.
Porque ya es nuestra la salvación, pero su plenitud es todavía
objeto de esperanza. Esperar lo que ya se posee no es tener esperanza, porque,
¿cómo se puede esperar lo que ya se posee? En cambio, si esperamos
algo que todavía no poseemos, tenemos que esperarlo con paciencia.
El Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad, porque nosotros no sabemos
pedir lo que nos conviene; pero el Espíritu mismo intercede por nosotros
con gemidos que no pueden expresarse con palabras. Y Dios, que conoce profundamente
los corazones, sabe lo que el Espíritu quiere decir, porque el Espíritu
ruega conforme a la voluntad de Dios, por los que le pertenecen.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO
R/. Aleluya, aleluya.
Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor. R/.
EVANGELIO
Brotarán ríos de agua que da la vida.
Del santo Evangelio según san Juan: 7, 37-39
El último día
de la fiesta, que era el más solemne, exclamó Jesús en
voz alta: "El que tenga sed, que venga a mí; y beba, aquel que cree
en mí. Como dice la Escritura: Del corazón del que cree en mí
brotarán ríos de agua viva".
Al decir esto, se refería al Espíritu Santo que habían
de recibir los que creyeran en él, pues aún no había venido
el Espíritu, porque Jesús no había sido glorificado. Palabra
del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Se dice Credo.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Derrama, Señor, sobre estos dones la bendición de tu Espíritu Santo, para que, por medio de ellos, reciba tu Iglesia tan gran efusión de amor, que la impulse a hacer resplandecer en todo el mundo la verdad del misterio de la salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio de Pentecostés, como en la Misa del día, p. 101.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 7, 37
El último día de la fiesta, Jesús se puso de pie y exclamó: El que tenga sed, que venga a mí y beba. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que nos aprovechen, Señor, los dones que hemos recibido, para que estemos siempre llenos del fervor del Espíritu Santo que derramaste de manera tan inefable en tus Apóstoles. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Para despedir al pueblo, el diácono o, en su ausencia, el mismo sacerdote canta o dice:
Anuncien a todos la alegría del Señor resucitado. Vayan en paz, aleluya, aleluya.
O bien:
Pueden ir en paz, aleluya, aleluya.
R/. Demos gracias a Dios, aleluya, aleluya.
MISA DEL DÍA
MR. 408 (407) / Lecc. I, 349.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sab 1, 7
El Espíritu del Señor llena toda la tierra; él da consistencia al universo y sabe todo lo que el hombre dice. Aleluya.
O bien: Rm 5, 5; cfr. 8, 11
El amor de Dios ha sido infundido en nuestros corazones por el Espíritu Santo, que habita en nosotros. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que por el misterio de la festividad que hoy celebramos santificas a tu Iglesia, extendida por todas las naciones, concede al mundo entero los dones del Espíritu Santo y continúa obrando en el corazón de tus fieles las maravillas que te dignaste realizar en los comienzos de la predicación evangélica. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Todos quedaron llenos del Espíritu Santo y empezaron a hablar.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 2, 1-11
El día de Pentecostés,
todos los discípulos estaban reunidos en un mismo lugar. De repente se
oyó un gran ruido que venía del cielo, como cuando sopla un viento
fuerte, que resonó por toda la casa donde se encontraban. Entonces aparecieron
lenguas de fuego, que se distribuyeron y se posaron sobre ellos; se llenaron
todos del Espíritu Santo y empezaron a hablar en otros idiomas, según
el Espíritu los inducía a expresarse.
En esos días había en Jerusalén judíos devotos,
venidos de todas partes del mundo. Al oír el ruido, acudieron en masa
y quedaron desconcertados, porque cada uno los oía hablar en su propio
idioma.
Atónitos y llenos de admiración, preguntaban: "¿No
son galileos todos estos que están hablando? ¿Cómo, pues,
los oímos hablar en nuestra lengua nativa? Entre nosotros hay medos,
partos y elamitas; otros vivimos en Mesopotamia, Judea, Capadocia, en el Ponto
y en Asia, en Frigia y en Panfilia, en Egipto o en la zona de Libia que limita
con Cirene. Algunos somos visitantes, venidos de Roma, judíos y prosélitos;
también hay cretenses y árabes. Y sin embargo, cada quien los
oye hablar de las maravillas de Dios en su propia lengua".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 103,1 ab. 24ac. 29bc. 30.31. 34
R/. Envía, Señor, tu Espíritu a renovar la tierra. Aleluya.
Bendice al Señor,
alma mía; Señor y Dios mío, inmensa es tu grandeza. ¡Qué
numerosas son tus obras, Señor! La tierra llena está de tus creaturas.
R/.
Si retiras tu aliento, toda creatura muere y vuelve al polvo; pero envías
tu espíritu, que da vida, y renuevas el aspecto de la tierra. R/.
Que Dios sea glorificado para siempre y se goce en sus creaturas. Ojalá
que le agraden mis palabras y yo me alegraré en el Señor. R/.
SEGUNDA LECTURA**
Hemos sido bautizados en un mismo Espíritu para formar un solo cuerpo.
De la primera carta del apóstol san Pablo a los corintios: 12, 3-7.12-13
Hermanos: Nadie puede llamar
a Jesús "Señor", si no es bajo la acción del
Espíritu Santo. Hay diferentes dones, pero el Espíritu es el mismo.
Hay diferentes servicios, pero el Señor es el mismo. Hay diferentes actividades,
pero Dios, que hace todo en todos, es el mismo.
En cada uno se manifiesta el Espíritu para el bien común. Porque
así como el cuerpo es uno y tiene muchos miembros y todos ellos, a pesar
de ser muchos, forman un solo cuerpo, así también es Cristo. Porque
todos nosotros, seamos judíos o no judíos, esclavos o libres,
hemos sido bautizados en un mismo Espíritu para formar un solo cuerpo,
y a todos se nos ha dado a beber del mismo Espíritu.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
O bien:
Los que se dejan guiar por el Espíritu de Dios, ésos son hijos de Dios.
De la carta del apóstol san Pablo a los romanos: 8, 8-17
Hermanos: Los que viven
en forma desordenada y egoísta no pueden agradar a Dios. Pero ustedes
no llevan esa clase de vida, sino una vida conforme al Espíritu, puesto
que el Espíritu de Dios habita verdaderamente en ustedes. Quien no tiene
el Espíritu de Cristo, no es de Cristo. En cambio, si Cristo vive en
ustedes, aunque su cuerpo siga sujeto a la muerte a causa del pecado, su espíritu
vive a causa de la actividad salvadora de Dios. Si el Espíritu del Padre,
que resucitó a Jesús de entre los muertos, habita en ustedes,
entonces el Padre, que resucitó a Jesús de entre los muertos,
también les dará vida a sus cuerpos mortales, por obra de su Espíritu,
que habita en ustedes.
Por lo tanto, hermanos, no estamos sujetos al desorden egoísta del hombre,
para hacer de ese desorden nuestra regla de conducta. Pues si ustedes viven
de ese modo, ciertamente serán destruidos. Por el contrario, si con la
ayuda del Espíritu destruyen sus malas acciones, entonces vivirán.
Los que se dejan guiar por el Espíritu de Dios, esos son hijos de Dios.
No han recibido ustedes un espíritu de esclavos, que los haga temer de
nuevo, sino un espíritu de hijos, en virtud del cual podemos llamar Padre
e Dios.
El mismo Espíritu Santo, a una con nuestro propio espíritu, da
testimonio de que somos hijos de Dios.
Y si somos hijos, somos también herederos de Dios y coherederos con Cristo,
puesto que sufrimos con él para ser glorificados junto con él.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SECUENCIA
1
Ven, Dios Espíritu Santo, |
6
Sin tu inspiración divina |
y envíanos desde el cielo |
los
hombres nada podemos |
tu luz, para iluminamos. |
y el pecado nos domina. |
2
Ven ya, padre de los pobres, |
7
Lava nuestras inmundicias, |
luz que penetra en las almas, |
fecunda
nuestros desiertos |
dador de todos los
dones. |
y cura nuestras heridas. |
3
Fuente de todo consuelo, |
8
Doblega nuestra soberbia, |
amable huésped del alma, |
calienta
nuestra frialdad, |
paz en las horas
de duelo. |
endereza nuestras sendas. |
4
Eres pausa en el trabajo, |
9
Concede a aquellos que ponen |
brisa, en un clima de fuego, |
en
ti su fe y su confianza |
consuelo, en medio
del llanto. |
tus siete sagrados dones. |
5.Ven,
luz santificadora, |
10
Danos virtudes y méritos, |
y entra hasta el fondo del alma |
danos
una buena muerte |
de todos los que
te adoran. |
y contigo el gozo eterno. |
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO
R/. Aleluya, aleluya.
Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor. R/.
EVANGELIO**
Como el Padre me ha enviado, así también los envío yo: Reciban el Espíritu Santo.
Del santo Evangelio según san Juan: 20, 19-23
Al anochecer del día
de la resurrección, estando cerradas las puertas de la casa donde se
hallaban los discípulos, por miedo a los judíos, se presentó
Jesús en medio de ellos y les dijo: "La paz esté con ustedes".
Dicho esto, les mostró las manos y el costado. Cuando los discípulos
vieron al Señor, se llenaron de alegría.
De nuevo les dijo Jesús: "La paz esté con ustedes. Como el
Padre me ha enviado, así también los envío yo". Después
de decir esto, sopló sobre ellos y les dijo: "Reciban el Espíritu
Santo. A los que les perdonen los pecados, les quedarán perdonados; y
a los que no se los perdonen, les quedarán sin perdonar".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
O bien:
El Espíritu Santo les enseñará todas las cosas.
Del santo Evangelio según san Juan: 14, 15-16. 23-26
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "Si me aman, cumplirán mis mandamientos;
yo le rogaré al Padre y él les enviará otro Consolador
que esté siempre con ustedes, el Espíritu de verdad.
El que me ama, cumplirá mi palabra y mi Padre lo amará y vendremos
a él y haremos en él nuestra morada. El que no me ama, no cumplirá
mis palabras. Y la palabra que están oyendo no es mía, sino del
Padre, que me envió.
Les he hablado de esto ahora que estoy con ustedes; pero el Consolador, el Espíritu
Santo que mi Padre les enviará en mi nombre, les enseñará
todas las cosas y les recordará toda cuanto yo les he dicho".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Se dice Credo.
PLEGARIA UNIVERSAL
Invoquemos ahora al
Espíritu, el padre de los pobres, el don de vida que fecunda nuestra
existencia y renueva el camino de la humanidad.
Después de cada petición diremos: Jesús resucitado, escúchanos.
Para que todos los cristianos sepamos amarnos como Jesús nos ha
amado. Oremos.
Para que los movimientos de laicos y laicas cristianos sean en medio del mundo
un buen testimonio de Jesucristo y de su Evangelio. Oremos.
Para que los gobernantes, y especialmente los gobernantes cristianos, busquen
siempre por encima de todo la paz, la concordia y el bienestar de los que menos
tienen. Oremos.
Para que los pobres, los enfermos, los inmigrantes, y todos los que se sienten
sin ánimo ante la vida reciban la fuerza del Espíritu Santo de
Dios. Oremos.
Para que el Espíritu del Señor ilumine con su luz nuestras inseguridades
y dudas, y cure nuestras debilidades. Oremos.
Escucha, Jesús resucitado, nuestra oración, y envíanos
tu Espíritu Santo. Tú que vives y reinas...
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Concédenos, Señor, que, conforme a la promesa de tu Hijo, el Espíritu Santo nos haga comprender con más plenitud el misterio de este sacrificio y haz que nos descubra toda su verdad. Por Jesucristo, nuestro Señor.
PREFACIO
El misterio de Pentecostés.
En verdad es justo y necesario,
es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor,
Padre santo, Dios todopoderoso y eterno. Porque tú, para llevar a su
plenitud el misterio pascual, has enviado hoy al Espíritu Santo sobre
aquellos a quienes adoptaste como hijos al injertarlos en Cristo, tu Unigénito.
Este mismo Espíritu fue quien, al nacer la Iglesia, dio a conocer a todos
los pueblos el misterio del Dios verdadero y unió la diversidad de las
lenguas en la confesión de una misma fe.
Por eso, el mundo entero se desborda de alegría y también los
coros celestiales, los ángeles y los arcángeles, cantan sin cesar
el himno de tu gloria: Santo, Santo, Santo...
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Hch 2, 4. 11
Todos quedaron llenos del Espíritu Santo, y proclamaban las maravillas de Dios. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios nuestro, tú que concedes a tu Iglesia dones celestiales consérvale la gracia que le has dado, para que permanezca siempre vivo en ella el don del Espíritu Santo que le infundiste; y que este alimento espiritual nos sirva para alcanzar la salvación eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Para despedir al pueblo, el diácono o, en su ausencia, el mismo sacerdote canta o dice:
Anuncien a todos la alegría del Señor resucitado. Vayan en paz, aleluya, aleluya.
O bien:
Pueden ir en paz, aleluya, aleluya.
R/. Demos gracias a Dios, aleluya, aleluya.
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- Una verdadera piedra en el zapato es la palabra de Jesús para el corazón humano inclinado al egoísmo y la autoafirmación. No nos deja en paz porque no queremos que nos deje en paz. Jesús es referente, coordenada, guía, amigo, nuestro Getsemaní y nuestra Ítaca. Nos ubica en las horas confusas en que quisiéramos sobreponernos por encima de todo mundo y nos da la perseverante resistencia para mantenernos fieles a pesar de caídas y tropiezos. En medio de todo ese esfuerzo de vivir como sus discípulos, jamás nos ha dejado tirados a media calle, sino que siempre y discretamente nos sostiene y acompaña con su Espíritu para que nos mantengamos en la verdad que nos llena de paz y alegría. La verdad de Jesús no envejece por más que los enterradores de la verdad lo hayan decretado una y mil veces.
Verde / Rojo Feria VII Semana o memoria de San Juan Nepomuceno, mártir MR p. 419 (417). 714 (734) / Lecc. II, p. 345
Otros santos: Gemma Galgani, virgen. Beato Vladimir Ghika, mártir.
Nació en Bohemia (República Checa) en 1350. Su padre era juez. Ya a los 20 años era "notario del tribunal eclesiástico". Fue ocupando diferentes cargos hasta llegar a vicario general del arzobispado de Praga. Se dedicaba a ayudar especialmente a los pobres y humildes. Como el rey cometía innumerables abusos de autoridad, el arzobispo lo excomulgó. El rey, enfurecido, se ensañó contra los cristianos: una de las primeras víctimas fue Juan Nepomuceno, torturado por órdenes reales (16 de mayo de 1393)
UN SABER LÍMPIDO Y APACIBLE
St 3,13-18; Mc 9,14-29
El relato del niño epiléptico nos presenta una escena interesante y muy al natural en la vida pública de Jesús. Escuchamos desde los reproches de la gente por la ineficiencia de sus discípulos hasta las preguntas y respuestas directas de Jesús al padre del niño enfermo. De un lado emerge la seguridad y la confianza de quien obra el milagro: "Sal de éste y no vuelvas a entrar" y por otra parte advertimos la violencia con la cual el espíritu maligno estropea al niño. En la carta de Santiago encontramos un par de criterios interesantes para aprender a descubrir la verdadera sabiduría: el sabio no es amigo de rivalidades ni partidismos. Al contrario la persona verdaderamente sabia transmite paciente y afablemente la verdad, sin pretender apabullar a los demás. El sabio dispone de un saber límpido y apacible; respeta el momento y el proceso de cada persona que anda en busca de la verdad.
Del Común de mártires: para un mártir, p. 883 (922).
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 12, 6
Confío, Señor en tu misericordia. Se alegra mi corazón con tu auxilio; cantaré al Señor por el bien que me ha hecho.
ORACIÓN COLECTA
Señor, tú que otorgaste a san Juan Nepomuceno valor para morir y no ceder ante los perseguidores, concédenos su fortaleza para callar por tu amor cuanto pueda lesionar al prójimo. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Si tienen el corazón amargado por rivalidades, dejen de presumir.
De la carta del apóstol Santiago: 3, 13-18
Hermanos míos: ¿Hay
alguno entre ustedes con sabiduría y experiencia? Si es así, que
lo demuestre con su buena conducta y con la amabilidad propia de la sabiduría.
Pero si ustedes tienen el corazón amargado por envidias y rivalidades,
dejen de presumir y engañar a costa de la verdad.
Ésa no es la sabiduría que viene de lo alto; ésa es terrenal,
irracional, diabólica; pues donde hay envidias y rivalidades, ahí
hay desorden y toda clase de obras malas.
Pero los que tienen la sabiduría que viene de Dios son puros, ante todo.
Además, son amantes de la paz, comprensivos, dóciles, están
llenos de misericordia y buenos frutos, son imparciales y sinceros. Los pacíficos
siembran la paz y cosechan frutos de justicia.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 18, 8. 9. 10. 15
R/. Tú tienes, Señor, palabras de vida eterna.
La ley del Señor
es perfecta del todo y reconforta el alma; inmutables son las palabras del Señor
y hacen sabio al sencillo. R/.
En los mandamientos del Señor hay rectitud y alegría para el corazón;
son luz los preceptos del Señor para alumbrar el camino. R/.
La voluntad de Dios es santa y para siempre estable; los mandamientos del Señor
son verdaderos y enteramente justos. R/.
Que te sean gratas las palabras de mi boca y los anhelos de mi corazón.
Haz, Señor, que siempre te busque, pues eres mi refugio y salvación.
R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. 2 Tim 1, 10
R/. Aleluya, aleluya.
Jesucristo, nuestro Salvador, ha vencido la muerte y ha hecho resplandecer la vida por medio del Evangelio. R/.
EVANGELIO
Creo, Señor, pero dame tú la fe que me falta.
Del santo Evangelio según san Marcos: 9, 14-29
En aquel tiempo, cuando
Jesús bajó del monte y llegó al sitio donde estaban sus
discípulos, vio que mucha gente los rodeaba y que algunos escribas discutían
con ellos. Cuando la gente vio a Jesús, se impresionó mucho y
corrió a saludarlo.
Él les preguntó: "¿De qué están discutiendo?"
De entre la gente, uno le contestó: "Maestro, te he traído
a mi hijo, que tiene un espíritu que no lo deja hablar; cada vez que
se apodera de él, lo tira al suelo y el muchacho echa espumarajos, rechina
los dientes y se queda tieso. Les he pedido a tus discípulos que lo expulsen,
pero no han podido".
Jesús les contestó: "¡Gente incrédula! ¿Hasta
cuándo tendré que estar con ustedes? ¿Hasta cuándo
tendré que soportarlos? Tráiganme al muchacho". Y se lo trajeron.
En cuanto el espíritu vio a Jesús, se puso a retorcer al muchacho;
lo derribó por tierra y lo revolcó, haciéndolo echar espumarajos.
Jesús le preguntó al padre: "¿Cuánto tiempo
hace que le pasa esto?" Contestó el padre: "Desde pequeño.
Y muchas veces lo ha arrojado al fuego y al agua para acabar con él.
Por eso, si algo puedes, ten compasión de nosotros y ayúdanos".
Jesús le replicó: "¿Qué quiere decir eso de
'si puedes'? Todo es posible para el que tiene fe". Entonces el padre del
muchacho exclamó entre lágrimas: "Creo, Señor; pero
dame tú la fe que me falta". Jesús, al ver que la gente acudía
corriendo, reprendió al espíritu inmundo, diciéndole: "Espíritu
mudo y sordo, yo te lo mando: Sal de él y no vuelvas a entrar en él".
Entre gritos y convulsiones violentas salió el espíritu. El muchacho
se quedó como muerto, de modo que la mayoría decía que
estaba muerto. Pero Jesús lo tomó de la mano, lo levantó
y el muchacho se puso de pie.
Al entrar en una casa con sus discípulos, éstos le preguntaron
a Jesús en privado: "¿Por qué nosotros no pudimos
expulsarlo?" Él les respondió: "Esta clase de demonios
no sale sino a fuerza de oración y de ayuno". Palabra del Señor.
T. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Al celebrar con la debida reverencia tus misterios, te rogamos, Señor, que los dones ofrecidos en honor de tu gloria nos sirvan para la salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sal 9, 2-3
Proclamaré todas tus maravillas; me alegraré y exultaré contigo y entonaré salmos a tu nombre, Dios Altísimo.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Concédenos, Dios todopoderoso, que alcancemos aquel fruto celestial, cuyo adelanto acabamos de recibir mediante estos sacramentos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Verde De Feria o Misa por La Paz y La Justicia "A" MR p. 1087 (1133) / Lecc. II, p. 350
Otros santos: Pascual Bailón, religioso; Julia Salzano, fundadora. Beato Iván Ziatyk. Mártir.
LOS APETITOS AGRESIVOS
St 4,1-10; Mc 9, 30-37
Los Doce no habían acrecentado su proceso de identificación personal con Jesús, por eso mismo seguían aferrados a las categorías humanas de la grandeza y la superioridad. A espaldas de Jesús disputaban sobre rangos y jerarquías, imaginando estar encima de los demás por alguna razón más que banal. Jesús les da una lección completa, cuando abraza a un niño pequeño y les advierte que los pequeños son sus preferidos. Así que quien pretenda estar verdaderamente entre los primeros, tendrá que aprender a servir. Un camino de sobra conocido para quien conozca el mensaje de Jesús, y escasamente transitado para desgracia nuestra. En la Carta de Santiago encontramos un análisis suficiente de la agresión y la violencia. El apetito desmedido se transforma en un huracán implacable que nos empuja a imaginar uno y mil modos de adueñamos de cuanto codiciosamente deseamos: sean cosas, placeres, personas, bienes materiales que vamos persiguiendo con demencia! obsesión, olvidando que Dios sabe lo que necesitamos.
ANTÍFONA DE ENTRADA Si 36, 18-19
Concede, Señor, la paz a quienes en ti esperan; escucha las oraciones de tus hijos y guíanos por el camino de la justicia.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que revelaste que han de ser llamados hijos tuyos quienes promueven la paz, concédenos trabajar incansablemente por establecer la justicia, que es la única que garantiza una paz firme y verdadera. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Si ustedes piden y no reciben, es porque piden mal.
De la carta del apóstol Santiago: 4, 1-10
Hermanos míos: ¿De
dónde vienen las luchas y los conflictos entre ustedes? ¿No es,
acaso, de las malas pasiones, que siempre están en guerra dentro de ustedes?
Ustedes codician lo que no pueden tener y acaban asesinando. Ambicionan algo
que no pueden alcanzar, y entonces combaten y hacen la guerra. Y si no lo alcanzan,
es porque no se lo piden a Dios. O si se lo piden y no lo reciben, es porque
piden mal, para derrocharlo en placeres.
Gente infiel, ¿no saben que la amistad con el mundo es enemistad con
Dios? Por lo tanto, quien decide ser amigo del mundo se hace enemigo de Dios.
No piensen que la Escritura dice en vano: Dios ama celosamente a nuestro espíritu
y nos da su gracia con generosidad. Por eso dice también la Escritura:
Dios aborrece a los soberbios y concede su gracia a los humildes.
Por consiguiente, sométanse a Dios; resistan al diablo y se alejará
de ustedes. Acérquense a Dios y él se acercará a ustedes.
Que los pecadores se purifiquen las manos y se decidan por Dios los indecisos.
Comiencen ya a lamentar y a llorar su miseria. Que su risa se convierta en llanto
y su alegría en tristeza. Humíllense ante el Señor y él
los enaltecerá.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 54, 7.8. 9-10a. 10b-11.23
R/. Descarga en el Señor lo que te agobia.
En la angustia me dije:
"Si tuviera, como la paloma, alas, yo me iría volando por el desierto,
para poder vivir libre de intrigas. R/.
A salvo me pondría del viento huracanado, de las voces que dan mis enemigos
y de sus opresiones". R/.
Sólo veo en la ciudad violencias y discordias, que de día y de
noche por sus murallas rondan. R/.
Descarga en el Señor lo que te agobia y él te aliviará.
La derrota del justo para siempre jamás permitirá. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Ga 6, 14
R/. Aleluya, aleluya.
No permita Dios que yo me gloríe en algo que no sea la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por el cual el mundo está crucificado para mí y yo para el mundo. R/.
EVANGELIO
El Hijo del hombre va a ser entregado. Si alguno quiere ser el primero que sea el servidor de todos.
Del santo Evangelio según san Marcos: 9, 30-37
En aquel tiempo, Jesús
y sus discípulos atravesaban Galilea, pero él no quería
que nadie lo supiera, porque iba enseñando a sus discípulos. Les
decía: "El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres;
le darán muerte, y tres días después de muerto, resucitará".
Pero ellos no entendían aquellas palabras y tenían miedo de pedir
explicaciones.
Llegaron a Cafarnaúm, y una vez en casa, les preguntó: "¿De
qué discutían por el camino?" Pero ellos se quedaron callados,
porque en el camino habían discutido sobre quién de ellos era
el más importante. Entonces Jesús se sentó, llamó
a los Doce y les dijo: "Si alguno quiere ser el primero, que sea el último
de todos y el servidor de todos".
Después, tomando a un niño, lo puso en medio de ellos, lo abrazó
y les dijo: "El que reciba en mi nombre a uno de estos niños, a
mí me recibe. Y el que me reciba a mí, no me recibe a mí,
sino a aquel que me ha enviado".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Te rogamos, Señor, que el sacrificio de la salvación de tu Hijo, Rey de la paz, ofrecido bajo estos signos sacramentales con los que se simbolizan la paz y la unidad, sirvan para estrechar la concordia entre todos tus hijos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 5, 9
Dichosos los que trabajan por la paz, porque se les llamará hijos de Dios.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Concédenos, Señor, en abundancia, el espíritu de caridad, para que, alimentados con el Cuerpo y la Sangre de tu Unigénito, fomentemos con eficacia entre todos la paz que Él mismo nos dejó. El, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Verde / Rojo De Feria o Memoria de San Juan I, papa y mártir o Misa "Para pedir caridad". MR p. 1097 (1143) / Lecc. II, p. 354
Fue Papa de 523 a 526. Teodorico, rey arriano, lanzó una persecución contra todos los que sostuvieran la verdadera fe católica acerca de Cristo. El Papa Juan fue uno de los primeros en ser castigados: primero fue enviado por el rey a Constantinopla con una embajada destinada a fracasar, después, también por órdenes del rey, fue confinado en una cárcel de Ravena, en donde murió de hambre.
Otros santos: Félix de Cantalice, religioso. Erico IX Jedvardsson "el Legislador", rey.
UNA NIEBLA MATUTINA
St 4,13-17; Mc 9,38-40
Efectivamente, la imagen es más que transparente para quien haya caminado por un valle húmedo al amanecer. Quien lo sepa, se dará cuenta que apenas brille el sol con intensidad, toda esa neblina se dispersará hasta que ni siquiera queden las gotas de rocío. Fugacidad de la neblina, fugacidad de la vida. Quienes afirman de manera segura la autonomía humana, juzgan desusado que sigamos anteponiendo nuestros planes al designio divino. Les parece ilógico que nos pongamos en las manos del Padre y veamos la vida como un don precioso que conviene agradecer día con día. Otra necedad mayor que esa es la de quien pretende tratar a Jesús como una mercancía o un objeto del que puede disponerse. Jesús Señor de la historia no es monopolizable; nadie podrá reclamarle privilegios ni influencias. Jesús está a favor de todos y todos los que estén a favor de sus hermanos, estarán del lado de Jesús, aunque no lo confiesen con sus labios.
ANTÍFONA DE ENTRADA Ez 36, 26-28
Dice el Señor: Arrancaré de ustedes el corazón de piedra y les daré un corazón de carne, les infundiré mi espíritu. Ustedes serán mi pueblo y yo seré su Dios.
ORACIÓN COLECTA
Inflama, Señor, nuestros corazones con el Espíritu de tu amor, para que podamos pensar siempre lo que es digno y agradable a tus ojos y amarte sinceramente en los hermanos. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
¿Qué cosa es la vida de ustedes? — Digan: "Si el Señor nos presta vida".
De la carta del apóstol Santiago: 4, 13-17
Hermanos míos: Consideremos
ahora a los que dicen: "Hoy o mañana saldremos para tal ciudad,
ahí viviremos unos años, pondremos un negocio y nos haremos ricos".
Ésos no tienen idea de lo que será el mañana. Pues ¿qué
cosa es la vida de ustedes? Una nubecilla que se ve un rato y luego se desvanece.
Lo que ustedes deberían decir es esto: "Si el Señor nos presta
vida, haremos esto y aquello". En lugar de eso, presumen de ser autosuficientes;
y toda esa clase de presunciones es mala. En resumen, el que sabe cómo
portarse bien y no lo hace, está en pecado.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 48, 2-3. 6-7. 8-10.11
R/. Dichosos los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los cielos.
Escuchen, pueblos todos
de la tierra, habitantes del mundo, estén atentos, los ricos y los pobres,
lo mismo el hombre noble que el plebeyo. R/.
¿Por qué temer en días de desgracia, cuando nos cerca la
malicia de aquellos que presumen de sus bienes y en sus riquezas confían?
R/.
Nadie puede comprar su propia vida, ni por ella pagarle a Dios rescate. No hay
dinero capaz de hacer que alguno de la muerte se escape. R/.
Lo mismo que los necios e ignorantes, también los sabios mueren, y a
las manos de extraños van a parar sus bienes. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 14, 6
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie va al Padre si no es por mí, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
El que no está contra nosotros, está a nuestro favor.
Del santo Evangelio según san Marcos: 9, 38-40
En aquel tiempo, Juan le
dijo a Jesús: "Hemos visto a uno que expulsaba a los demonios en
tu nombre, y como no es de los nuestros, se lo prohibimos". Pero Jesús
le respondió: "No se lo prohíban, porque no hay ninguno que
haga milagros en mi nombre, que luego sea capaz de hablar mal de mí.
Todo aquel que no está contra nosotros, está a nuestro favor".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Santifica, Señor, por tu piedad, estos dones, y al recibir en oblación este sacrificio espiritual, concédenos que podamos extender a todos tu amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN 1 Co 13, 13
Ahora tenemos estas tres virtudes: la fe, la esperanza y el amor; pero el amor es la mayor de las tres.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Te rogamos, Señor, que infundas la gracia del Espíritu Santo en quienes has saciado con el mismo pan del cielo; y que nos reanimes abundantemente con la dulzura de la caridad perfecta. Por Jesucristo, nuestro Señor.
San Juan I, MR, p. 715 (734).
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, recompensa de las almas fieles, que consagraste en este día con el martirio del Papa san Juan primero, escucha las plegarias de tu pueblo y concede que, quienes veneramos sus méritos, imitemos la constancia de su fe. Por nuestro Señor Jesucristo...
Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote
Blanco Fiesta, MR p. 721 (741) / Lecc. II, p. 1073
Otros santos: Pedro Celestino, papa; Francisco Coll y Guitart, fundador. Beato Rafael Luis Rafiringa, Hermano de las Escuelas Cristianas.
Jesucristo ejerce su sacerdocio durante toda su vida terrena y, sobre todo, en su pasión, muerte y resurrección. El sacrificio perfecto es el que ofreció en la cruz en ofrenda total como respuesta amorosa al amor del Padre y por nuestra salvación, y es el mismo Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote de la Nueva Alianza, quien, por el ministerio de los sacerdotes, ofrece el sacrificio eucarístico, que es el mismo de la cruz.
HAGAN LO MISMO EN MEMORIA MÍA
Hb 10, 12-23; Lc 22, 14-20
Las palabras del Señor Jesús en la cena pascual están formuladas con tanta precisión e intensidad que no dejan lugar a equívoco alguno. El rito pascual, la copa de la bendición, el pan compartido y la copa de despedida fueron redimensionados y cargados de nuevo significado: Jesús había decidido entregarse por entero, el pan de su cuerpo y el vino de su sangre, su existencia indivisiblemente puesta en las manos del Padre a fin que se cumpliese a plenitud la promesa del Reino. No le arrebataron la vida, tampoco le madrugaron. Al contario él se despojó voluntariamente de la misma porque había entendido que su vida y su muerte nos permitirían entrar con toda libertad al santuario celestial. Jesús se convirtió en nuestro gran sacerdote que media incomparablemente entre Dios y su familia.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Hb 7, 24
Cristo, mediador de la nueva alianza, por el hecho de permanecer para siempre, posee un sacerdocio perpetuo.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que para gloria tuya y salvación de todos los hombres constituiste sumo y eterno sacerdote a tu Hijo, Jesucristo, concede a quienes él ha elegido como ministros suyos y administradores de los sacramentos y del Evangelio, la gracia de ser fieles en el cumplimiento de su ministerio. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los que ha santificado.
De la carta a los hebreos: 10, 12-23
Hermanos: Cristo, ofreció
un solo sacrificio por los pecadores y se sentó para siempre a la derecha
de Dios; no le queda sino aguardar a que sus enemigos sean puestos bajo sus
pies. Así, con una sola ofrenda, hizo perfectos para siempre a los que
ha santificado.
Lo mismo atestigua el Espíritu Santo, que dice en un pasaje de la Escritura:
La alianza que yo estableceré con ellos, cuando lleguen esos días,
palabra del Señor, es ésta: Voy a poner mi ley en lo más
profundo de su mente y voy a grabarla en sus corazones. Y prosigue después:
Yo les perdonaré sus culpas y olvidaré para siempre sus pecados.
Ahora bien y cuando los pecados han sido perdonados, ya no hacen falta más
ofrendas por ellos.
Hermanos, en virtud de la sangre de Jesucristo, tenemos la seguridad de poder
entrar en el santuario, porque él nos abrió un camino nuevo y
viviente a través del velo, que es su propio cuerpo. Asimismo, en Cristo
tenemos un sacerdote incomparable al frente de la casa de Dios.
Acerquémonos, pues, con sinceridad de corazón, con una fe total,
limpia la conciencia de toda mancha y purificado el cuerpo por el agua saludable.
Mantengámonos inconmovibles en la profesión de nuestra esperanza,
porque el que nos hizo las promesas es fiel a su palabra.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 39, 7-8a. 8h-9. 10-11ah. 17
R/. Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.
Cuántas maravillas
has hecho, Señor y Dios mío, cuántos planes en favor nuestro.
Nadie se te puede comparar. R/.
En tus libros se me ordena hacer tu voluntad; esto es, Señor, lo que
deseo: tu ley en medio de mi corazón. R/.
He anunciado tu justicia en la gran asamblea; no he cerrado mis labios, tú
lo sabes, Señor. R/.
No callé tu justicia, antes bien, proclamé tu lealtad y tu auxilio.
Tu amor y tu lealtad no los he ocultado a la gran asamblea. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Is 42, 1
R/. Aleluya, aleluya.
Miren a mi siervo, a quien sostengo; a mi elegido, en quien tengo mis complacencias. En él he puesto mi espíritu, para que haga brillar la justicia sobre las naciones. R/.
EVANGELIO
Hagan esto en memoria mía.
Del santo Evangelio según san Lucas: 22, 14-20
En aquel tiempo, llegada
la hora de cenar, se sentó Jesús con sus discípulos y les
dijo: "Cuánto he deseado celebrar esta Pascua con ustedes, antes
de padecer, porque yo les aseguro que ya no la volveré a celebrar, hasta
que tenga cabal cumplimiento en el Reino de Dios". Luego tomó en
sus manos una copa de vino, pronunció la acción de gracias y dijo:
"Tomen esto y repártanlo entre ustedes, porque les aseguro que ya
no volveré a beber del fruto de la vid hasta que venga el Reino de Dios".
Tomando después un pan, pronunció la acción de gracias,
lo partió y se lo dio diciendo: "Esto es mi cuerpo, que se entrega
por ustedes. Hagan esto en memoria mía". Después de cenar,
hizo lo mismo con una copa de vino, diciendo: "Esta copa es la nueva alianza,
sellada con mi sangre, que se derrama por ustedes".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Que Jesucristo, nuestro Mediador, haga que te sean aceptables, Señor, nuestras ofrendas y que su sacrificio redentor nos haga vivir cada día más unidos a él, para que toda nuestra vida sea grata a tus ojos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
PREFACIO
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno. Ya que, por la unción del Espíritu Santo, constituiste a tu Unigénito Pontífice de la alianza nueva y eterna, y en tu designio salvífico has querido que su sacerdocio único se perpetuara en la Iglesia. En efecto, Cristo no sólo confiere la dignidad del sacerdocio real a todo su pueblo santo, sino que, con especial predilección, elige a algunos de entre los hermanos, y mediante la imposición de las manos, los hace partícipes de su ministerio de salvación, a fin de que renueven, en su nombre, el sacrificio redentor, preparen para tus hijos el banquete pascual, fomenten la caridad en tu pueblo santo, lo alimenten con la palabra, lo fortifiquen con los sacramentos y, consagrando su vida a ti y a la salvación de sus hermanos, se esfuercen por reproducir en sí mismos la imagen de Cristo y te den un constante testimonio de fidelidad y de amor. Por eso, Señor, con todos los ángeles y santos, te alabamos, cantando llenos de alegría: Santo, Santo, Santo...
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 28, 20
Sepan que yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, que hemos ofrecido en el sacrificio y recibido en la comunión, sean para nosotros, Señor, el principio de una vida nueva, a fin de que, unidos a ti por el amor, demos frutos que permanezcan para siempre. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Verde De feria o Memoria de San Bernardino de Siena, Presbítero, MR p. 1154 (1204) / Lecc. II, p. 362
San Bernardino de Siena, Presbítero, MR, p. 715 (735). Se puede decir que este franciscano prosiguió la obra del dominico Vicente Ferrer, como predicador popular que exhortaba a los cristianos a levantar la vista por encima de los conflictos de este mundo. Desde Milán hasta Roma recorría aldeas y ciudades predicando el amor infinito de Dios y ofreciendo el nombre de Jesús como la protección para toda clase de males.
Otros Santos: Áurea de Ostia, mártir. Beata María Crescencia Pérez, religiosa.
LO QUE DIOS HA UNIDO
St 5,9-12; Mc 10,1-12
Las dos lecturas pueden completarse de manera lógica. De un lado en el Evangelio tenemos la postura radical de Jesús en contra del divorcio. La voluntad originaria del Padre fue que los que se aman, se identifiquen tan profundamente por el amor, que se hagan un solo ser. El ideal es incuestionable sin duda alguna; la realidad es que vivimos en una sociedad donde las relaciones amorosas se fracturan y se rompen cada vez con más frecuencia. Un desafío pastoral para la Iglesia. Entre las medidas preventivas que la Carta de Santiago sugiere tomar está la práctica recíproca de la paciencia, la constancia y la tolerancia. Cuando solamente uno de los esposos lo hace, termina por desalentarse. El amor como todas las experiencias importantes de la vida requiere constancia y esfuerzo perseverante: "llamamos dichosos a los que tuvieron constancia".
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Ga 6, 14
Se alegran en el cielo las almas de los santos, que siguieron las huellas de Cristo, y por eso se gozan con él eternamente.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, fuente de toda santidad, concédenos caminar de manera digna, cada uno conforme a nuestra propia vocación, acompañados por la intercesión de tus santos, a quienes diste diversos dones en la tierra y una gloriosa recompensa en el cielo. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Miren que el juez ya está a la puerta.
De la carta del apóstol Santiago: 5, 9-12
Hermanos míos: No
murmuren los unos de los otros, para que en el día del juicio no sean
condenados. Miren que el juez ya está a la puerta. Tomen como ejemplo
de paciencia en el sufrimiento a los profetas, los cuales hablaron en nombre
del Señor. Llamamos dichosos a los que supieron soportar el sufrimiento.
Ustedes han oído hablar de la paciencia de Job y ya ven el final que
le dio el Señor, porque el Señor es compasivo y misericordioso.
Pero sobre todo, hermanos míos, no juren ni por el cielo ni por la tierra,
ni por ninguna otra cosa; que el sí de ustedes sea sí, y el no
de ustedes sea no, para que no queden expuestos a ser condenados en el juicio.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 102, 1-2. 3-4. 8-9. 11-12
R/. El Señor es compasivo y misericordioso.
Bendice al Señor,
alma mía, que todo mi ser bendiga su santo nombre. Bendice al Señor,
alma mía, y no te olvides de sus beneficios. R/.
El Señor perdona tus pecados y cura tus enfermedades; él rescata
tu vida del sepulcro y te colma de amor y de ternura. R/.
El Señor es compasivo y misericordioso, lento para enojarse y generoso
para perdonar. El Señor no estará siempre enojado, ni durará
para siempre su rencor. R/.
Como desde la tierra hasta el cielo, así es de grande su misericordia;
como un padre es compasivo con sus hijos, así es compasivo el Señor
con quien lo ama. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 17, 17
R/. Aleluya, aleluya.
Tu palabra, Señor, es la verdad; santifícanos en la verdad. R/.
EVANGELIO
Lo que Dios unió, que no lo separe el hombre.
Del santo Evangelio según san Marcos: 10, 1-12
En aquel tiempo, se fue
Jesús al territorio de Judea y Transjordania, y de nuevo se le fue acercando
la gente; él los estuvo enseñando, como era su costumbre.
Se acercaron también unos fariseos y le preguntaron, para ponerlo a prueba:
"¿Le es lícito a un hombre divorciarse de su esposa?"
Él les respondió: "¿Qué les prescribió
Moisés?" Ellos contestaron: "Moisés nos permitió
el divorcio mediante la entrega de un acta de divorcio a la esposa". Jesús
les dijo: "Moisés prescribió esto, debido a la dureza del
corazón de ustedes. Pero desde el principio, al crearlos, Dios los hizo
hombre y mujer. Por eso dejará el hombre a su padre y a su madre y se
unirá a su esposa y serán los dos una sola carne. De modo que
ya no son dos, sino una sola carne. Por eso, lo que Dios unió, que no
lo separe el hombre".
Ya en casa, los discípulos le volvieron a preguntar sobre el asunto.
Jesús les dijo: "Si uno se divorcia de su esposa y se casa con otra,
comete adulterio contra la primera. Y si ella se divorcia de su marido y se
casa con otro, comete adulterio".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Que te sean gratos, Señor, los dones que ofrecemos en honor de todos los santos, y concédenos experimentar la ayuda para obtener nuestra salvación, de aquellos ya alcanzaron con certeza la felicidad eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 5, 8-10
Dichosos los limpios de corazón, porque verán a Dios. Dichosos los que trabajan por la paz, porque se les llamará hijos de Dios. Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los cielos.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor Dios, que nos alimentas con un mismo pan y nos sostienes con una misma Esperanza, fortalécenos igualmente con tu gracia, para que todos, junto con tus santos, formemos en Cristo un solo cuerpo y un solo espíritu, y resucitemos con él a la gloria. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, tú que diste a san Bernardino de Siena, presbítero, un extraordinario amor al santo nombre de Jesús, concédenos también a nosotros, por su intercesión y sus méritos, vivir siempre inflamados por el espíritu de tu amor. Por nuestro Señor Jesucristo...
Rojo Memoria Obligatoria Santos Cristóbal Magallanes, Presbítero y Compañeros, Mártires* MR p. 716 (735) y 878 (917) / Lecc. II, p. 366 LH Vísperas I del domingo: 4a. Semana del Salterio Tomo III: pp. 1151 y 260; Fieles: pp. 722 y 397 Ed. Popular: pp. 289 y 465
Otros santos: Eugenio de Mazenod, fundador. Beatos Manuel Gómez González y Adilio Daronch, mártires.
Del año 1915 a 1937, y principalmente en la persecución religiosa de 1926 a 1929, veinticinco mexicanos: 22 sacerdotes diocesanos y tres laicos, se distinguieron entre los cientos de cristianos sacrificados en México por los enemigos de la fe católica. Con admirable constancia preservaron fieles a su compromiso bautismal y a su identidad sacerdotal y ofrecieron su vida por Cristo Rey y santa Maria de Guadalupe, en diversos lugares de la diócesis de Aguascalientes, Autlán, Colima, Chihuahua, Chilpancingo-Chilapa, Durango, Guadalajara, Morelia, San Juan de los Lagos y Zacatecas.
LA FUERZA DE LA ORACIÓN
St 5, 13-20; Mc 10,13-16
Quien se haya dado la oportunidad de orar y poner su vida, sus preocupaciones y por supuesto también sus logros en las manos de Dios, sabrá que la oración es un camino que nos educa en la esperanza y la gratitud. Tal como lo señala el apóstol Santiago en su carta, es oportuno alabar y suplicar, agradecer e implorar a Dios en las buenas y en las malas. Quien está seguro de que Dios se mantiene pendiente de nuestra vida, sabrá que podrá susurrarle o gritarle a cualquier hora y en cualquier tono, porque confía plenamente en él, como plenamente confía un niño en su madre. Esa misma confianza es la que movía a las mamás de los niños galileos que se acercaban confiadamente a Jesús para que los bendijera. Solamente las pretensiones burocráticas de los discípulos que se sentían dueños de Jesús, querían impedirlo.
ANTÍFONA DE ENTRADA
Ahora gozan en el cielo las almas de los santos, que siguieron en la tierra las huellas de Cristo; y, porque lo amaron hasta derramar su sangre por él, con Cristo se gozan eternamente.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso y eterno, que concediste a san Cristóbal Magallanes, presbítero, y a sus compañeros, que fueran fieles a Cristo Rey hasta el martirio, concédenos, por su intercesión, que, perseverando en la confesión de la fe verdadera, podamos ser siempre fieles a los mandatos de tu amor. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Mucho puede la oración insistente del justo.
De la carta del apóstol Santiago: 5, 13-20
Hermanos míos: ¿Sufre
alguno de ustedes? Que haga oración. ¿Está de buen humor?
Que entone cantos al Señor. ¿Hay alguno enfermo? Que llame a los
presbíteros de la Iglesia, para que oren por él y lo unjan con
aceite, invocando al Señor. La oración hecha con fe le dará
la salud al enfermo y el Señor hará que se levante; y si tiene
pecados, se le perdonarán.
Por lo tanto, confiesen sus pecados los unos a los otros y oren los unos por
los otros para que se curen. Mucho puede la oración insistente del justo:
Elías era un hombre igual a nosotros, y cuando oró con insistencia
para que no lloviera, no llovió en tres años y medio; volvió
a orar, y el cielo dio su lluvia, y la tierra, sus cosechas. Hermanos míos,
si alguno de ustedes se desvía de la verdad y otro lo hace volver al
buen camino, tengan presente que quien hace volver a un pecador de su extravío,
salvará su propia alma de la muerte y sepultará una multitud de
pecados.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 140, 1-2. 3.8
R/. Que sea, Señor, mi oración como el incienso.
A ti clamo, Señor,
acude pronto; cuando te invoco, escucha mi plegaria. Que sea mi oración
como el incienso; como ofrenda, mis manos levantadas. R/.
Pon, Señor, en mi boca un centinela, un vigía, a la puerta de
mis labios. En ti, Señor, están puestos mis ojos, no me niegues
tu amparo. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Mt 11, 25
R/. Aleluya, aleluya.
Yo te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has revelado los misterios del Reino a la gente sencilla. R/
EVANGELIO
El que no reciba el Reino de Dios como un niño, no entrará en él.
Del santo Evangelio según san Marcos: 10, 13-16
En aquel tiempo, la gente
le llevó a Jesús unos niños para que los tocara, pero los
discípulos trataban de impedirlo. Al ver aquello, Jesús se disgustó
y les dijo: "Dejen que los niños se acerquen a mí y no se
lo impidan, porque el Reino de Dios es de los que son como ellos. Les aseguro
que el que no reciba el Reino de Dios como un niño, no entrará
en él". Después tomó en brazos a los niños
y los bendijo imponiéndoles las manos.
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Padre santo, las ofrendas que te presentamos en la conmemoración de estos santos mártires y a nosotros tus siervos concédenos permanecer siempre firmes en la confesión de tu nombre. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Lc 22, 28-30
Ustedes han perseverado conmigo en mis pruebas, dice el Señor, y yo les voy a dar el Reino, para que en él coman y beban en mi mesa.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor Dios, que en tus santos mártires manifestaste de modo admirable el misterio de la cruz, concede, benigno, que, fortalecidos por este sacrificio, permanezcamos fielmente adheridos a Cristo y trabajemos en la Iglesia por la salvación de todos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
La Santísima Trinidad
Blanco Solemnidad, [Se omite la memoria de Santa Rita de Casia] MR p. 447 (445) / Lecc. II, p. 304
Otros santos: Juan de Parma, abad; Joaquina de Vedruna, fundadora.
EL INTÉRPRETE DE JESÚS
Pr 8,22-31, Rm 5,1-5; Jn 16,12-15
El elogio de la sensatez está redactado en tono autobiográfico y en clave testimonial. La sabiduría alega haber sido establecida y formada por Dios mismo antes de que creara el mundo. Más aún, ninguna de las grandes obras de la creación fue concluida — desde el océano hasta la bóveda celeste, la tierra y el mar— sin la asistencia solidaria de la Sabiduría. En tanto auxiliar cercano del Creador y mediadora cercana de su revelación, puede aleccionarnos en el descubrimiento de la voluntad del Padre. La revelación evangélica nos despejará la incógnita sobre la identidad de la sabiduría creadora y el espíritu revelador, cuando Jesús nos presente al Espíritu de la verdad, que irá completando y descifrando todas las implicaciones y consecuencias del Evangelio del Señor Jesús.
ANTÍFONA DE ENTRADA
Bendito sea Dios, Padre, Hijo y Espíritu Santo, porque ha tenido misericordia con nosotros.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios Padre, que al enviar al mundo la Palabra de verdad y el Espíritu santificador, revelaste a todos los hombres tu misterio admirable, concédenos que, profesando la fe verdadera, reconozcamos la gloria de la eterna Trinidad y adoremos la Unidad de su majestad omnipotente. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Antes de que existiera la tierra, la sabiduría ya había sido engendrada.
Del libro de los Proverbios: 8, 22-31
Esto dice la sabiduría de Dios: "El Señor me poseía desde el principio, antes que sus obras más antiguas.
Quedé establecida
desde la eternidad, desde el principio, antes de que la tierra existiera. Antes
de que existieran los abismos y antes de que brotaran los manantiales de las
aguas, fui concebida.
Antes de que las montañas y las colinas quedaran asentadas, nací
yo. Cuando aún no había hecho el Señor la tierra ni los
campos ni el primer polvo del universo, cuando él afianzaba los cielos,
ahí estaba yo. Cuando ceñía con el horizonte la faz del
abismo, cuando colgaba las nubes en lo alto, cuando hacía brotar las
fuentes del océano, cuando fijó al mar sus límites y mandó
a las aguas que no los traspasaran, cuando establecía los cimientos de
la tierra, yo estaba junto a él como arquitecto de sus obras, yo era
su encanto cotidiano; todo el tiempo me recreaba en su presencia, jugando con
el orbe de la tierra y mis delicias eran estar con los hijos de los hombres".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 8, 4-5.6-7.8-9
R/. ¡Qué admirable, Señor, es tu poder!
Cuando contemplo el cielo,
obra de tus manos, la luna y las estrellas, que has creado, me pregunto: ¿Qué
es el hombre para que de él te acuerdes, ese pobre ser humano, para que
de él te preocupes? R/.
Sin embargo, lo hiciste un poquito inferior a los ángeles, lo coronaste
de gloria y dignidad; le diste el mando sobre las obras de tus manos y todo
lo sometiste bajo sus pies. R/.
Pusiste a su servicio los rebaños y las manadas, todos los animales salvajes,
las aves del cielo y los peces del mar, que recorren los caminos de las aguas.
R/.
SEGUNDA LECTURA
Vayamos a Dios por Cristo mediante el amor que nos ha infundido el Espíritu Santo.
De la carta del apóstol san Pablo a los romanos: 5, 1-5
Hermanos: Ya que hemos sido
justificados por la fe, mantengámonos en paz con Dios, por mediación
de nuestro Señor Jesucristo. Por él hemos obtenido, con la fe,
la entrada al mundo de la gracia, en el cual nos encontramos; por él,
podemos gloriamos de tener la esperanza de participar en la gloria de Dios.
Más aún, nos gloriamos hasta de los sufrimientos, pues sabemos
que el sufrimiento engendra la paciencia, la paciencia engendra la virtud sólida,
la virtud sólida engendra la esperanza, y la esperanza no defrauda, porque
Dios ha infundido su amor en nuestros corazones por medio del Espíritu
Santo, que él mismo nos ha dado.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Ap 1, 8
R/. Aleluya, aleluya.
Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo. Al Dios que es, que era y que vendrá. R/.
EVANGELIO
Todo lo que tiene el Padre es mío. - El Espíritu recibirá de mí lo que les vaya comunicando a ustedes.
Del santo Evangelio según san Juan: 16, 12-15
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "Aún tengo muchas cosas que decirles,
pero todavía no las pueden comprender. Pero cuando venga el Espíritu
de la verdad, él los irá guiando hasta la verdad plena, porque
no hablará por su cuenta, sino que dirá lo que haya oído
y les anunciará las cosas que van a suceder.
Él me glorificará, porque primero recibirá de mí
lo que les vaya comunicando.
Todo lo que tiene el Padre es mío. Por eso he dicho que tomará
de lo mío y se lo comunicará a ustedes". Palabra
del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Se dice Credo.
PLEGARIA UNIVERSAL
Oremos, hermanos, a Dios,
Padre entrañable, que por Jesucristo nos ha revelado su amor y que escucha
complacido los gemidos inefables con que el Espíritu intercede por nosotros
respondiendo: Santísima Trinidad, escúchanos. (R/. Santísima
Trinidad, escúchanos.)
Para que Dios Padre, Creador todopoderoso del Universo, lleve el mundo a su
plenitud y haga nacer aquel cielo nuevo y aquella tierra nueva que nos ha prometido,
en la que la humanidad entera encontrará la felicidad y podrá
contemplar su rostro glorioso, roguemos al Señor.
Para que el Hijo Unigénito de Dios, que se hizo hombre para desposarse
con la Iglesia, infunda en ella un amor semejante al suyo, como corresponde
a su condición de esposa amada, roguemos al Señor.
Para que el Espíritu del Señor, que enriquece al mundo con sus
dones, sea padre para los pobres, consuelo para los tristes, salud para los
enfermos y fuerza para los decaídos, roguemos al Señor.
Para que los que conocemos el misterio de la vida íntima de Dios, uno
en tres Personas, tengamos celo para anunciarlo a quienes lo desconocen, a fin
de que también ellos encuentren gozo y descanso en Dios, que se nos ha
revelado como Padre, Hijo y Espíritu Santo, roguemos al Señor.
Que te glorifique, Dios nuestro, tu iglesia, al contemplar el misterio de tu
sabiduría con la que has creado y configurado el mundo; tú que,
por medio de Jesucristo, nos has justificado y en tu Espíritu Santo nos
has santificado, escucha la oración de tu pueblo y haz que alcancemos
el conocimiento de la verdad plena y te adoremos a ti, que eres amor, verdad
y vida. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Por la invocación de tu nombre, santifica, Señor, estos dones que te presentamos y transfórmanos por ellos en una continua oblación a ti. Por Jesucristo, nuestro Señor.
PREFACIO
El misterio de la Santísima Trinidad.
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno. Que con tu Hijo único y el Espíritu Santo, eres un solo Dios, un solo Señor, no en la singularidad de una sola persona, sino en la trinidad de una sola sustancia. Y lo que creemos de tu gloria, porque tú lo revelaste, eso mismo lo afirmamos de tu Hijo y también del Espíritu Santo, sin diferencia ni distinción. De modo que al proclamar nuestra fe en la verdadera y eterna divinidad, adoramos a tres personas distintas, en la unidad de un solo ser e iguales en su majestad. A quien alaban los ángeles y los arcángeles, y todos los coros celestiales, que no cesan de aclamarte con una sola voz: Santo, Santo, Santo...
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Ga 4, 6
Porque ustedes son hijos de Dios, Dios infundió en sus corazones el Espíritu de su Hijo, que clama: Abbá, Padre.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que la recepción de este sacramento y nuestra profesión de fe en la Trinidad santa y eterna, y en su Unidad indivisible, nos aprovechen, Señor, Dios nuestro, para la salvación de cuerpo y alma. Por Jesucristo, nuestro Señor.
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.-La sociedad contemporánea ha quedado marcada por cierta visión relativista que pone bajo cuestión toda certeza y toda convicción. Pareciera que todo lo que era sólido se ha vuelto líquido y que todo la que parecía pleno se hubiera tornado vacío. Para no sucumbir en esta hora confusa y no perdernos en el laberinto de propuestas y contrapropuestas, para no secundar las tendencias de la opinión dominante y terminar desfigurando la identidad del Evangelio, necesitamos estar atentos al soplo fecundo del Espíritu. La iglesia vive su camino de fidelidad a Jesús a través de encuentros sinodales donde se quiere responder al desafío de la palabra revelada y al desafío de la palabra acontecida. Quien sepa releer el mensaje de Jesús en sintonía con los llamados que el Espíritu susurra en la historia, sabrá vivir como discípulo del Señor.
Verde De Feria de la Semana VIII del Tiempo Ordinario MR p. 420 (418) / Lecc. II, p. 370
Otros santos: Desiderio de Langres, obispo y mártir; Juana Antida Thouret, fundadora; Juan Bautista de Rossi, presbítero.
LA FE PROBADA
1 P 1,3-9; Mc 10,17-27
San Pedro podía hablar de la fe y la esperanza con autoridad. Había pasado por pruebas y descalabros, había renegado de su Señor y había redescubierto su amor compasivo. Su fe vacilante se fue fortaleciendo a través de las numerosas ocasiones en que tuvo que testimoniar su fidelidad a Jesús. Cárceles, enjuiciamientos, persecuciones y otras pruebas fueron superadas por la decisión del pescador y por el auxilio de la gracia de Dios. El hombre rico del Evangelio no logró superar la prueba del desprendimiento de sus cuantiosas riquezas porque estaba acostumbrado a confiar demasiado en sí mismo. Le hacía falta vivir la experiencia de la fe y el abandono en Dios, para acrecentar su libertad interior y separarse de sus bienes.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 17, 19-20
El Señor es mi refugio, lo invoqué y me libró. Me salvó porque me ama.
ORACIÓN COLECTA
Concédenos, Señor, que tu poder pacificador dirija el curso de los acontecimientos del mundo y que tu Iglesia se regocije al poder servirte con tranquilidad. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Ustedes no han visto a Cristo, y sin embargo, lo aman; al creer ahora en él se llenan de una alegría indescriptible.
De la primera carta del apóstol san Pedro: 1, 3-9
Bendito sea Dios, Padre
de nuestro Señor Jesucristo, por su gran misericordia, porque al resucitar
a Jesucristo de entre los muertos, nos concedió renacer a la esperanza
de una vida nueva, que no puede corromperse ni mancharse y que él nos
tiene reservada como herencia en el cielo. Porque ustedes tienen fe en Dios,
él los protege con su poder, para que alcancen la salvación que
les tiene preparada y que él revelará al final de los tiempos.
Por esta razón, alégrense, aun cuando ahora tengan que sufrir
un poco por adversidades de todas clases, a fin de que su fe, sometida a la
prueba, sea hallada digna de alabanza, gloria y honor, el día de la manifestación
de Cristo. Porque la fe de ustedes es más preciosa que el oro, y el oro
se acrisola por el fuego.
A Cristo Jesús no lo han visto y, sin embargo, lo aman; al creer en él
ahora, sin verlo, se llenan de una alegría radiante e indescriptible,
seguros de alcanzar la salvación de sus almas, que es la meta de la fe.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 110, 1-2. 5-6. 9. /0c
R/. El Señor se acuerda siempre de su alianza.
Quiero alabar a Dios, de
corazón, en las reuniones de los justos. Grandiosas son las obras del
Señor y para todo fiel, dignas de estudio. R/.
Ha hecho inolvidables sus prodigios. El Señor es piadoso y es clemente.
Acordándose siempre de su alianza, él le da de comer al que lo
teme. R/.
Él redimió a su pueblo y estableció su alianza para siempre.
Dios es santo y terrible y su gloria perdura eternamente. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO 2 Co 8, 9
R/. Aleluya, aleluya.
Jesucristo, siendo rico, se hizo pobre, para enriquecernos con su pobreza. R/.
EVANGELIO
Ve y vende lo que tienes y sígueme.
Del santo Evangelio según san Marcos: 10, 17-27
En aquel tiempo, cuando
salía Jesús al camino, se le acercó corriendo un hombre,
se arrodilló ante él y le preguntó: "Maestro bueno,
¿qué debo hacer para alcanzar la vida eterna?" Jesús
le contestó: "¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno
sino sólo Dios. Ya sabes los mandamientos: No matarás, no cometerás
adulterio, no robarás, no levantarás falso testimonio, no cometerás
fraudes, honrarás a tu padre y a tu madre”.
Entonces él le contestó: "Maestro, todo eso lo he cumplido
desde muy joven". Jesús lo miró con amor y le dijo: "Sólo
una cosa te falta: Ve y vende lo que tienes, da el dinero a los pobres y así
tendrás un tesoro en los cielos. Después, ven y sígueme".
Pero al oír estas palabras, el hombre se entristeció y se fue
apesadumbrado, porque tenía muchos bienes.
Jesús, mirando a su alrededor, dijo entonces a sus discípulos:
"¡Qué difícil les va a ser a los ricos entrar en el
Reino de Dios!" Los discípulos quedaron sorprendidos ante estas
palabras; pero Jesús insistió: "Hijitos, ¡qué
difícil es para los que confían en las riquezas, entrar en el
Reino de Dios! Más fácil le es a un camello pasar por el ojo de
una aguja, que a un rico entrar en el Reino de Dios".
Ellos se asombraron todavía más y comentaban entre sí:
"Entonces, ¿quién puede salvarse?" Jesús, mirándolos
fijamente, les dijo: "Es imposible para los hombres, mas no para Dios.
Para Dios todo es posible". Palabra del Señor. Gloria
a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor Dios, que haces tuyas nuestras ofrendas, que tú mismo nos das para dedicarlas a tu nombre, concédenos que también nos alcancen la recompensa eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Sal 12, 6
Cantaré al Señor por el bien que me ha hecho, y en-tonaré un himno de alabanza al Dios Altísimo.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Alimentados por estos dones de salvación, suplicamos, Señor tu misericordia, para que este sacramento que nos nutre en nuestra vida temporal nos haga partícipes de la vida eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Verde De Feria o Misa "Para fomentar la concordia" MR p. 1064 (1110) / Lecc. II, p. 374
Otros santos: Nuestra Señora María Auxiliadora. Donaciano y Rogaciano de Nantes, mártires. Beato Luis Ceferino Moreau, fundador.
LO HEMOS DEJADO TODO
1 P 1, 10-16, Mc 10,28-31
En la vida de los discípulos de Jesús quedó marcado de manera indeleble su encuentro con Él. Fue un verdadero parte aguas que estableció un antes y un después en su vida. Por experiencia propia descubrieron que era posible despojarse del hombre viejo y de la ignorancia y la necedad en que vivían antes de encontrarse con Jesús. Para el apóstol Pedro era motivo de confianza compartir su testimonio de conversión. El hombre anciano que escribe la carta había comenzado ese largo proceso de identificación con Cristo varias décadas atrás. El joven pescador que había tenido el valor de relativizar su oficio, sus relaciones amorosas y su seguridad económica, aprendió a confiar en Dios y en sus hermanos. Ese aprendizaje lo fue fortaleciendo para las horas decisivas de su vida.
ANTÍFONA DE ENTRADA Hch 4, 32-33
La multitud de los que habían creído tenía un sólo corazón y una sola alma. Con grandes muestras de poder, los Apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús y todos gozaban de gran estimación entre el pueblo, aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, suprema unidad y caridad verdadera, da a tus fieles un solo corazón y una sola alma, para que el cuerpo de tu Iglesia se mantenga en concordia y, ya que se apoya en la profesión de la verdad, esté afianzado en una sólida unidad. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Los profetas predijeron la gracia destinada a ustedes. Pongan, pues, en ella una esperanza sin límites.
De la primera carta del apóstol san Pedro: 1,10-16
Hermanos: Los profetas,
cuando predijeron la gracia destinada a ustedes, investigaron también
profundamente acerca de la salvación de ustedes.
Ellos trataron de descubrir en qué tiempo y en qué circunstancias
se habrían de verificar las indicaciones que el Espíritu de Cristo,
que moraba en ellos, les había revelado sobre los sufrimientos de Cristo
y el triunfo glorioso que los seguiría.
Pero se les dio a conocer que ellos no verían lo que profetizaban, sino
que estaba reservado para nosotros. Todo esto les ha sido anunciado ahora a
ustedes, por medio de aquellos que les han predicado el Evangelio con la fuerza
del Espíritu Santo, enviado del cielo, y ciertamente es algo que los
ángeles anhelan contemplar.
Por eso, viviendo siempre atentos y vigilantes, pongan toda su esperanza en
la gracia que les va a traer la manifestación gloriosa de Jesucristo.
Como hijos obedientes, no vivan conforme a las pasiones que tenían antes,
en el tiempo de su ignorancia. Al contrario, así como es santo el que
los llamó, sean también ustedes santos en toda su conducta, pues
la Escritura dice: Sean santos, porque yo, el Señor, soy santo.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 97, 1. 2-3ab. 3cd-4
R/. Cantemos al Señor un canto nuevo.
Cantemos al Señor
un canto nuevo, pues ha hecho maravillas. Su diestra y su santo brazo le han
dado la victoria. R/.
El Señor ha dado a conocer su victoria y ha revelado a las naciones su
justicia. Una vez más ha demostrado Dios su amor y su lealtad hacia Israel.
R/.
La tierra entera ha contemplado la victoria de nuestro Dios. Que todos los pueblos
y naciones aclamen con júbilo al Señor. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Mt 11, 25
R/. Aleluya, aleluya.
Yo te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has revelado los misterios del Reino a la gente sencilla. R/.
EVANGELIO
Recibirán cien veces más en esta vida, junto con persecuciones; y en el otro mundo, la vida eterna.
Del santo Evangelio según san Marcos: 10, 28-31
En aquel tiempo, Pedro le
dijo a Jesús: "Señor, ya ves que nosotros lo hemos dejado
todo para seguirte".
Jesús le respondió: "Yo les aseguro: Nadie que haya dejado
casa, o hermanos o hermanas, o padre o madre, o hijos o tierras, por mí
y por el Evangelio, dejará de recibir, en esta vida, el ciento por uno
en casas, hermanos, hermanas, madres, hijos y tierras, junto con persecuciones,
y en el otro mundo, la vida eterna. Y muchos que ahora son los primeros serán
los últimos, y muchos que ahora son los últimos, serán
los primeros". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor
Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor Dios, que por medio de tus sacramentos y tus mandamientos nos renuevas conforme a tu imagen, dirige, compasivo, nuestros pasos por tus sendas, para que en virtud de este sacrificio que te ofrecemos, nos concedas el don de la caridad que esperamos recibir de ti. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 17, 20-21
Padre, te pido por los que van a creer en mí, para que todos sean uno en nosotros y el mundo crea que tú me has enviado, dice el Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Habiendo recibido el sacramento de la unidad, concede, Señor, a quienes hemos convivido hoy en tu casa en santa concordia, que poseamos aquella paz que hemos dado y conservemos la que hemos recibido. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Verde / Blanco Memoria de San Beda El Venerable, Presbítero y Doctor de la Iglesia, o San Gregorio VII, papa, o Santa María Magdalena de Pazzi, Virgen o Misa "Por los laicos" MR pp. 717 (737). 1056 (1101) / Lecc. II, p. 378
Otros santos: Beatos Mario Vergara e Isidoro Ngei Ko Lat, mártires.
San Beda el Venerable, Su vida entera transcurrió en la abadía de Jarrow (Inglaterra). La regla de san Benito prescribía: "Ora y labora". Éste fue precisamente el ideal de san Beda. Se consagró a empresas intelectuales, como la historia de Inglaterra y de los mártires, y a comentar la Biblia. Ninguna ciencia le parecía extraña. Pero jamás sacrificó la oración por el estudio.
San Gregorio VII, papa. Este famosísimo "monje Hildebrando", que se convirtió en el Papa Gregorio VII (1073-1085), domina la historia de la Edad Media. Reunía una clara visión de las necesidades de su tiempo con un temple inquebrantable, y persiguió un objetivo único: arrancar a la Iglesia de manos del poder feudal y restaurar la disciplina entre los clérigos. El año de 1077 fue verdaderamente increíble: ¡El Papa excomulga y depone al emperador del Sacro Imperio Romano Germánico!
Santa María Magdalena de Pazzi, virgen.A través de dolorosas purificaciones, esta religiosa carmelita florentina fue llamada por el Señor hasta las más elevadas experiencias místicas. Viviendo humildemente en pobreza, castidad y obediencia, llegó al Señor y por este camino condujo también a otras religiones (1566-1607).
EL MODO DE VIVIR IDOLÁTRICO
I P 1,18-25, Mc 10,32-45
Los cristianos a quienes se dirigía el apóstol san Pedro vivían en las distintas regiones de la actual Turquía; ellos habían dado culto a distintos dioses y habían mantenido relaciones idolátricas con el poder, la riqueza y otras realidades terrenales. El paso decisivo que dieron en su vida al aceptar el Evangelio de Jesucristo los liberó de todas esas ataduras y les permitió vivir como hermanos. Los discípulos de Jesús, tal como lo señala el Evangelio de San Marcos, no están exentos de conocer tentaciones y debilidades; sin embargo, están convencidos de la vocación exigente a la que han sido llamados: vivir como servidores de los pequeños, a fin de identificarse con el Señor que vino a servir y dar su vida en rescate por todos.
ANTÍFONA DE ENTRADA Mt 13, 33
El Reino de los cielos se parece a un poco de levadura que tomó una mujer y la mezcló con tres medidas de harina, y toda la masa acabó por fermentar.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que enviaste al mundo a manera de levadura la fuerza del Evangelio, concede a tus fieles que llamaste a vivir en el mundo en medio de las ocupaciones seculares, que, fervorosos en su espíritu cristiano, por medio de las tareas terrenales que desempeñan, colaboren sin cesar en la construcción de tu Reino. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Los ha rescatado Dios con la sangre preciosa de Cristo, el cordero sin mancha.
De la primera carta del apóstol san Pedro: 1, 18-25
Hermanos: Bien saben ustedes
que de su estéril manera de vivir, heredada de sus padres, los ha rescatado
Dios, no con bienes efímeros, como el oro y la plata, sino con la sangre
preciosa de Cristo, el cordero sin defecto ni mancha, al cual Dios había
elegido desde antes de la creación del mundo y, por amor a ustedes, lo
ha manifestado en estos tiempos, que son los últimos. Por Cristo, ustedes
creen en Dios, quien lo resucitó de entre los muertos y lo llenó
de gloria, a fin de que la fe de ustedes sea también esperanza en Dios.
Así pues, purificados ya internamente por la obediencia a la verdad,
que conduce al amor sincero a los hermanos, ámense los unos a los otros
de corazón e intensamente. Porque han vuelto ustedes a nacer, y no de
una semilla mortal, sino inmortal, por medio de la palabra viva y permanente
de Dios. En efecto, todo mortal es hierba y toda su belleza es flor de hierba:
se seca la hierba y cae la flor; en cambio, la palabra del Señor permanece
para siempre. Y ésa es la palabra que se les ha anunciado.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 147, 12-13.
14-15. 19-20
R/. Demos gloria al Señor.
Glorifica al Señor,
Jerusalén, a Dios ríndele honores, Israel. Él refuerza
el cerrojo de tus puertas y bendice a tus hijos en tu casa. R/.
Él mantiene la paz en tus fronteras, con su trigo mejor sacia tu hambre.
Él envía a la tierra su mensaje y su palabra corre velozmente.
R/.
Le muestra a Jacob su pensamiento, sus normas y designios a Israel. No ha hecho
nada igual con ningún pueblo, ni le ha confiado a otro sus proyectos.
R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Mc 10, 45
R/. Aleluya, aleluya.
El Hijo del hombre vino a servir y a dar su vida por la redención de todos. R/.
EVANGELIO
Ya ven que nos estamos dirigiendo a Jerusalén, y el Hijo del hombre va a ser entregado.
Del santo Evangelio según san Marcos: 10, 32-45
En aquel tiempo, Jesús
y sus discípulos iban camino de Jerusalén y Jesús se les
iba adelantando. Los discípulos estaban sorprendidos y la gente que lo
seguía tenía miedo. Él se llevó aparte otra vez
a los Doce y se puso a decirles lo que le iba a suceder: "Ya ven que nos
estamos dirigiendo a Jerusalén y el Hijo del hombre va a ser entregado
a los sumos sacerdotes y a los escribas; van a condenarlo a muerte y a entregarlo
a los paganos; se van a burlar de él, van a escupirlo, a azotarlo y a
matarlo; pero al tercer día resucitará".
Entonces se acercaron a Jesús, Santiago y Juan, los hijos de Zebedeo,
y le dijeron: "Maestro, queremos que nos concedas lo que vamos a pedirte".
Él les dijo: "¿Qué es lo que desean?" Le respondieron:
"Concede que nos sentemos uno a tu derecha y otro a tu izquierda, cuando
estés en tu gloria". Jesús les replicó: "No saben
lo que piden. ¿Podrán pasar la prueba que yo voy a pasar y recibir
el bautismo con que seré bautizado?" Le respondieron: "Sí
podemos". Y Jesús les dijo: "Ciertamente pasarán la
prueba que yo voy a pasar y recibirán el bautismo con que yo seré
bautizado; pero eso de sentarse a mi derecha o a mi izquierda no me toca a mí
concederlo; eso es para quienes está reservado".
Cuando los otros diez apóstoles oyeron esto, se indignaron contra Santiago
y Juan. Jesús reunió entonces a los Doce y les dijo: "Ya
saben que los jefes de las naciones las gobiernan como si fueran sus dueños
y los poderosos las oprimen. Pero no debe ser así entre ustedes. Al contrario:
el que quiera ser grande entre ustedes que sea su servidor, y el que quiera
ser el primero, que sea el esclavo de todos, así como el Hijo del hombre,
que no ha venido a que lo sirvan, sino a servir y a dar su vida por la redención
de todos".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, que quisiste salvar a todo el mundo por el sacrificio de tu Hijo, y llamas también a los laicos al trabajo apostólico, concédeles, por la fuerza de esta ofrenda, impregnar el mundo con el espíritu cristiano y ser fermento de santificación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sal 99, 2
Alabemos a Dios todos los hombrees, sirvamos al Señor con alegría; con júbilo entremos en su templo, aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Habiendo participado de la abundancia de tu gracia, te rogamos, Señor, que, fortalecidos por el poder vivificante del convite eucarístico, tus fieles, que quisiste dedicados a las tareas temporales, sean valientes testigos de la verdad evangélica y en los ambientes en que trabajan hagan siempre presente y activa a tu Iglesia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que iluminas a tu Iglesia con la doctrina de san Beda el Venerable, presbítero, concede, propicio, a tus fieles, ser siempre iluminados por su sabiduría, ayunados por su intercesión. Por nuestro Señor Jesucristo..
ORACIÓN COLECTA
Concede, Señor, a tu Iglesia el espíritu de fortaleza y el celo por la justicia con que hiciste brillas la vida del Papa san Gregorio séptimo, para que, apartándose del mal, platique cuanto es recto, con libertad y amor. Por nuestro Señor Jesucristo...
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que amas la virginidad, tú que adornaste a santa María Magdalena de Pazzi, virgen, inflamada en tu amor, con celestiales dones, concédenos imitar los ejemplos de pureza y caridad de aquella a quien hoy veneramos. Por nuestro Señor Jesucristo...
El Cuerpo y La Sangre de Cristo
Blanco Solemnidad [Se omite la memoria de San Felipe Neri] MR p. 449 (447) / Lecc. II, p. 307 / LH de la solemnidad.
Otros santos: Eleuterio I, papa. Beato Francisco Patrizi de Siena, religioso. MELQUISEDEC, ABRÁN Y JESÚS
Gn 14, 18-20; 1 Co 11,23-26; Lc 9,11-17
Cuando las personas experimentan la escasez de alimento pueden deshumanizarse o aprender a vivir de manera solidaria. Melquisedec disponía de alimentos suficientes mientras que Abrán y sus criados, carecían de los mismos. Del mismo modo las multitudes que seguían a Jesús habían salido desde temprana hora de sus casas y habían terminado sus escasos víveres; Jesús no abundaba en bienes, y sin embargo auxiliándose de los escasos panes de un discípulo, se puso confiadamente en manos del Padre, que obró una señal milagrosa que fue suficiente para saciar a la multitud. Quien haya experimentado la solidaridad de parte de cualquier persona, aprende a agradecer y se siente inclinado a compartir y solidarizarse con los necesitados. Sobrada razón tenía el Señor Jesús al decir que hay más dicha en dar que en recibir.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 80, 17
Alimentó a su pueblo con lo mejor del trigo y lo sació con miel sacada de la roca.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Señor nuestro Jesucristo, que en este admirable sacramento nos dejaste el memorial de tu pasión, concédenos venerar de tal modo los sagrados misterios de tu Cuerpo y de tu Sangre, que experimentemos constantemente en nosotros el fruto de tu redención. Tú que vives y reinas con el Padre en la unidad del Espíritu Santo y eres Dios por los siglos de los siglos.
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Melquisedec presentó pan y vino.
Del libro del Génesis: 14, 18-20
En aquellos días,
Melquisedec, rey de Salem, presentó pan y vino, pues era sacerdote del
Dios altísimo, y bendijo a Abram, diciendo: "Bendito sea Abram de
parte del Dios altísimo, creador de cielos y tierra; y bendito sea el
Dios altísimo, que entregó a tus enemigos en tus manos".
Y Abram le dio el diezmo de todo lo que había rescatado.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 109, 1.2.3.4
R/. Tú eres sacerdote para siempre.
Esto ha dicho el Señor
a mi Señor: "Siéntate a mi derecha; yo haré de tus
contrarios el estrado donde pongas los pies". R/.
Extenderá el Señor desde Sión tu cetro poderoso y tú
dominarás al enemigo. R/.
Es tuyo el señorío; el día en que naciste en los montes
sagrados, te consagró el Señor antes del alba. R/.
Juró el Señor y no ha de retractarse: "Tú eres sacerdote
para siempre, como Melquisedec". R/.
SEGUNDA LECTURA
Cada vez que ustedes comen de este pan y beben de este cáliz, proclaman la muerte del Señor.
De la primera carta del apóstol san Pablo a los corintios: 11, 23-26
Hermanos: Yo recibí
del Señor lo mismo que les he transmitido: Que el Señor Jesús,
la noche en que iba a ser entregado, tomó pan en sus manos, y pronunciando
la acción de gracias, lo partió y dijo: "Esto es mi cuerpo,
que se entrega por ustedes. Hagan esto en memoria mía".
Lo mismo hizo con el cáliz, después de cenar, diciendo: "Este
cáliz es la nueva alianza que se sella con mi sangre. Hagan esto en memoria
mía siempre que beban de él".
Por eso, cada vez que ustedes comen de este pan y beben de este cáliz,
proclaman la muerte del Señor, hasta que vuelva. Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.
SECUENCIA
(Puede omitirse o puede
recitarse en forma abreviada, comenzando par la estrofa: "El pan que del
cielo baja ").
Al Salvador alabemos,
que es nuestro pastor y guía.
Alabémoslo con himnos
y canciones de alegría.
Esto nuevo, siempre nuevo,
es la luz de la verdad.
que sustituye a lo viejo
con reciente claridad.
Alabémoslo sin límites
y con nuestras fuerzas todas;
pues tan grande es el Señor,
que nuestra alabanza es poca.
Gustosos hoy aclamamos
a Cristo, que es nuestro pan.
pues El es el pan de vida
que nos da vida inmortal.
Doce eran los que cenaban
y les dio pan a los doce.
Doce entonces lo comieron,
y, después, todos los hombres.
Sea plena la alabanza
y llena de alegres cantos;
que nuestra alma se desborde
en todo un concierto santo.
Hoy celebramos con gozo
la gloriosa institución
de este banquete divino,
el banquete del Señor.
Esta es la nueva Pascua,
Pascua del único Rey,
que termina con la alianza
tan pesada de la ley.
En aquella ultima cena
Cristo hizo la maravilla
de dejar a sus amigos
el memorial de su vida.
Enseñados por la
Iglesia,
consagramos pan y vino,
que a los hombres nos redimen,
y dan fuerza en el camino.
Es un dogma del cristiano
que el pan se convierte en carne,
y lo que antes era vino
queda convertido en sangre.
Hay cosas que no entendemos,
pues no alcanza la razón;
mas si las vemos con fe,
entraran al corazón.
Bajo símbolos diversos
y
en diferentes figuras,
se esconden ciertas verdades
maravillosas, profundas.
Su sangre es nuestra bebida;
su carne, nuestro alimento;
pero en el pan o en el vino
Cristo esta todo completo
Quien lo come, no lo rompe,
no lo parte ni divide;
El es el todo y la parte;
vivo esta en quien lo recibe.
Cuando parten lo exterior,
solo parten lo que has visto;
no es una disminución
de la persona de Cristo.
Puede ser tan solo uno
el que se acerca al altar,
o pueden ser multitudes:
Cristo no se acabara.
Lo comen buenos y malos,
con provecho diferente;
no es lo mismo tener vida
que ser condenado a muerte.
A los malos les da muerte
y a los buenos les da vida.
¡Que efecto tan diferente
tiene la misma comida!
El pan que del cielo baja
es comida de viajeros.
Es un pan para los hijos.
¡No hay que tirarlo a los perros!
Isaac, el inocente,
es figura de este pan,
con el cordero de Pascua
y el misterioso mana.
Ten compasión de
nosotros,
buen pastor, pan verdadero.
Apaciéntanos y cuídanos
y conducenos al cielo.
Si lo parten, no te apures
solo parten lo exterior;
en el mínimo fragmento
entero late el Señor.
Todo lo puedes y sabes,
pastor de ovejas, divino.
Concedenos en el cielo
gozar la herencia contigo. Amen.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 6, 51
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo, dice el Señor; el que coma de este pan vivirá para siempre. R/.
EVANGELIO
Comieron todos y se saciaron.
Del santo Evangelio según san Lucas: 9, 11-17
En aquel tiempo, Jesús
habló del Reino de Dios a la multitud y curó a los enfermos.
Cuando caía la tarde, los doce apóstoles se acercaron a decirle:
"Despide a la gente para que vayan a los pueblos y caseríos a buscar
alojamiento y comida, porque aquí estamos en un lugar solitario".
Él les contestó: "Denles ustedes de comer".
Pero ellos le replicaron: "No tenemos más que cinco panes y dos
pescados; a no ser que vayamos nosotros mismos a comprar víveres para
toda esta gente". Eran como cinco mil varones.
Entonces Jesús dijo a sus discípulos: "Hagan que se sienten
en grupos como de cincuenta". Así lo hicieron, y todos se sentaron.
Después Jesús tomó en sus manos los cinco panes y los dos
pescados, y levantando su mirada al cielo, pronunció sobre ellos una
oración de acción de gracias, los partió y los fue dando
a los discípulos para que ellos los distribuyeran entre la gente. Comieron
todos y se saciaron, y de lo que sobró se llenaron doce canastos.
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Credo.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, concede a tu Iglesia los dones de la unidad y de la paz, simbolizados en las ofrendas sacramentales que te presentamos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I o II de la Eucaristía, MR, pp. 520-521 (521-522).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 6, 56
El que come mi carne y bebe mi sangre, permanece en mí y yo en él, dice el Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Concédenos, Señor, disfrutar eternamente del gozo de tu divinidad que ahora pregustamos, en la comunión de tu Cuerpo y de tu Sangre. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Verde / Blanco De Feria, o Memoria de San Agustín de Canterbury, o Misa "De la Divina Misericordia" MR p. 1114 (1161)/ Lecc. II, p. 387
San Agustín de Canterbury, obispo.Fue enviado por el Papa Gregorio Magno a Inglaterra, al frente de un grupo de monjes romanos, destinados a predicar el Evangelio a los sajones, que hacía poco se habían establecido en la isla (597). La misión fue un éxito completo. Agustín, consagrado obispo de Canterbury, organizó la Iglesia e infundió la fe cristiana en aquel pueblo, respetando en todo lo posible, sus tradiciones ancestrales.
Otros santos: Bruno de Wurzburgo, obispo; Bárbara Kim y Bárbara Yi, mártires.
ALEGRES EN EL SUFRIR
I P 4, 7-13; Mc 11,11-26
Parece contradictorio e irracional que el apóstol san Pedro invite a los destinatarios de su Carta a acostumbrarse a la adversidad y a ver con alegría el sufrimiento. Sufrir no es algo razonable porque afecta nuestra vida y nuestra integridad personal. El sufrimiento que nace de la brutalidad y la intolerancia es contario al querer divino; por eso mismo lo tenemos que evitar. Sin embargo, para un cristiano no es tan sencillo hacerlo cuando advierte que dichos contratiempos le sobrevienen por causa de su fidelidad a Jesús. Ese sufrimiento es asumido no como una desgracia, sino como la forma visible de la cruz de Cristo. Cuando el cristiano discierne que el sufrimiento lo asemeja con Cristo sufriente, encuentra la fortaleza necesaria para mantenerse firme y perseverante. De esa manera, cuando la fe está sometida a la prueba se convierte en esperanza.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Jr 31, 3; 1 Jn 2, 2
Con amor eterno nos amó Dios. Envió a su Hijo único como víctima de propiciación por nuestros pecados, y no sólo por los nuestros, sino también por los del mundo eterno.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, cuya misericordia es incalculable e infinito el tesoro de su bondad, aumenta, benigno, la fe del pueblo a ti consagrado, para que todos comprendan con verdadera claridad con cuánto amor fueron creados, con qué sangre redimidos y con qué Espíritu reengendrados. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Sean buenos administradores de la gracia multiforme de Dios.
De la primera carta del apóstol san Pedro: 4, 7-13
Hermanos: Ya está
cerca el final de todo; por lo tanto, vivan con sensatez y en vigilancia para
poder orar. Sobre todo, mantengan en continua actividad el amor mutuo, pues
el amor sepulta una multitud de pecados. Sean hospitalarios los unos con los
otros, sin quejas.
Que cada uno, como buen administrador de la gracia multiforme de Dios, emplee
para servir a los demás, los dones recibidos. Quien habla, que sea mensajero
de las palabras de Dios; quien se dedica a servir a los demás, que los
sirva con la fuerza que Dios le comunica. De modo que Dios sea glorificado en
todo, por medio de Jesucristo, a quien corresponden la gloria y el poder, por
los siglos de los siglos. Amén.
No se sorprendan, queridos hermanos, del fuego de persecución que ha
prendido por ahí para ponerlos a prueba, como si les sobreviniera algo
nunca visto. Al contrario, alégrense de compartir ahora los padecimientos
de Cristo, para que, cuando se manifieste su gloria, el júbilo de ustedes
sea desbordante.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 95,10.11-12a. 12b-13
R/. El Señor juzgará a todas las naciones.
"Reina el Señor",
digamos a los pueblos. Él afianzó con su poder el orbe, gobierna
a las naciones con justicia. R/.
Alégrense los cielos y la tierra, retumbe el mar y el mundo submarino.
Salten de gozo el campo y cuanto encierra, manifiesten los bosques regocijo.
R/.
Regocíjese todo ante el Señor, porque ya viene a gobernar el orbe.
Justicia y rectitud serán las normas con las que rija a todas las naciones.
R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 15, 16
R/. Aleluya, aleluya.
Yo los he elegido del mundo, dice el Señor, para que vayan y den fruto y su fruto permanezca. R/.
EVANGELIO
Mi casa será casa de oración para todos los pueblos. — Tengan fe en Dios.
Del santo Evangelio según san Marcos: 11, 11-26
Después de haber
sido aclamado por la multitud, Jesús entró en Jerusalén,
fue al templo y miró todo lo que en él sucedía; pero como
ya era tarde, se marchó a Betania con los Doce.
Al día siguiente, cuando salieron de Betania, sintió hambre. Viendo
a lo lejos una higuera con hojas, Jesús se acercó a ver si encontraba
higos; pero al llegar, sólo encontró hojas, pues no era tiempo
de higos. Entonces le dijo a la higuera: "Que nunca jamás coma nadie
frutos de ti". Y sus discípulos lo estaban oyendo.
Cuando llegaron a Jerusalén, entró en el templo y se puso a arrojar
de ahí a los que vendían y compraban; volcó las mesas de
los que cambiaban dinero y los puestos de los que vendían palomas; y
no dejaba que nadie cruzara por el templo cargando cosas. Luego se puso a enseñar
a la gente, diciéndoles: "¿Acaso no está escrito:
Mi casa será casa de oración para todos los pueblos? Pero ustedes
la han convertido en una cueva de ladrones".
Los sumos sacerdotes y los escribas se enteraron de esto y buscaban la forma
de matarlo; pero le tenían miedo, porque todo el mundo estaba asombrado
de sus enseñanzas. Cuando atardeció, Jesús y los suyos
salieron de la ciudad.
A la mañana siguiente, cuando pasaban junto a la higuera, vieron que
estaba seca hasta la raíz. Pedro cayó en la cuenta y le dijo a
Jesús: "Maestro, mira: la higuera que maldijiste se secó".
Jesús les dijo entonces: "Tengan fe en Dios; les aseguro que si
uno le dice a este monte: 'Quítate de ahí y arrójate al
mar', sin dudar en su corazón y creyendo que va a suceder lo que dice,
lo obtendrá. Por eso les digo: Cualquier cosa que pidan en la oración,
crean ustedes que ya se la han concedido, y la obtendrán. Y cuando se
pongan a orar, perdonen lo que tengan contra otros, para que también
el Padre, que está en el cielo, les perdone a ustedes sus ofensas; porque
si ustedes no perdonan tampoco el Padre, que está en el cielo, les perdonará
a ustedes sus ofensas".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe benignamente, Señor, nuestras ofrendas y conviértelas en el sacramento de la redención, memorial de la Muerte y Resurrección de tu Hijo, para que, por la eficacia de este sacrificio, poniendo siempre nuestra confianza en Cristo, lleguemos a la vida eterna. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sal 102, 17
El amor del Señor es eterno entre aquellos que guardan su alianza.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Concédenos, Dios misericordioso, que, alimentados con el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, bebamos confiadamente en la fuente de la misericordia y nos mostremos más y más misericordiosos con nuestros hermanos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que por la predicación del obispo san Agustín de Canterbury, llevaste la luz del Evangelio a los pueblos de Inglaterra, haz que la semilla de sus trabajos apostólicos continúe dando frutos en tu Iglesia. Por nuestro Señor Jesucristo...
Santa María, Reina de Los Apóstoles
Verde / Blanco De Feria MR p. 1131 (1178) / Lecc. II, p. 392 LH Vísperas I del domingo: 1a. Semana del Salterio Tomo III: pp. 745 y 298; Fieles: pp. 472 y 398 Ed. Popular: pp. 13 y 465
Otros santos: Germán de París, obispo; Guillermo de Aquitania, religioso. Beata Bartolomea Bagnesi, laica.
LA DINÁMICA DE LA COMPASIÓN
Jud 17. 20-25, Mc 11,27-33
La breve Carta de Judas contiene una insistente exhortación a la compasión y la misericordia con los hermanos que vacilan y se extravían. El autor de la carta establece una sutil distinción que está arraigada firmemente en el proceder mismo del Señor Jesús. Efectivamente el maestro era compasivo e indulgente con los pecadores y extraviados, pero era inflexible con el pecado. En el enfrentamiento final del Señor con sus adversarios en el templo de Jerusalén fue sometido a un interrogatorio frontal acerca de su autoridad. El Señor Jesús no se amedrenta, sino que responde inteligentemente invitándolos a discernir la voluntad de Dios en el ministerio profético de Juan Bautista.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Hch 1, 14
Los discípulos perseveraban unánimes en la oración, junto con María, la Madre de Jesús.
ORACIÓN COLECTA
Dios y padre nuestro, que diste el Espíritu Santo a tus Apóstoles, que oraban junto con María, la Madre de Jesús, concédenos, por intercesión de la Virgen, que te sirvamos con fidelidad y trabajemos eficazmente, con nuestra palabra y ejemplo, en la difusión de tu gloria. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Dios puede preservarlos a ustedes de todo pecado y hacer que se presenten ante su gloria, gozosos y sin mancha.
De la carta del apóstol san Judas: 17, 20-25
Queridos hermanos: Recuerden
las palabras que les predicaron los apóstoles de nuestro Señor
Jesucristo. Consolídense sobre el cimiento de su fe santa, oren movidos
por el Espíritu Santo, conserven en ustedes el amor a Dios, en espera
de que la misericordia de nuestro Señor Jesucristo les dé la vida
eterna.
A los indecisos traten de convencerlos, para arrancarlos del fuego de la condenación;
a los otros, manifiéstenles compasión, pero con cautela, aborreciendo
aun la ropa contaminada por su mala vida.
Al Dios único, nuestro Salvador, que puede preservarlos a ustedes de
todo pecado y hacer que se presenten ante su gloria gozosos y sin mancha, honor
y gloria, fuerza y poder, por Jesucristo, nuestro Señor, desde siempre,
ahora y por todos los siglos. Amén.Palabra de Dios. Te alabamos,
Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 62, 1. 3-4.5-6
R/. Señor, mi alma tiene sed de ti.
Señor, tú
eres mi Dios, a ti te busco; de ti sedienta está mi alma. Señor,
todo mi ser te añora como el suelo reseco añora el agua. R/.
Para admirar tu gloria y tu poder, con este afán te busco en tu santuario.
Pues mejor es tu amor que la existencia; siempre, Señor, te alabarán
mis labios. R/.
Podré así bendecirte mientras viva y levantar en oración
mis manos. De lo mejor se saciará mi alma; te alabaré con jubilosos
labios. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Col 3, 16. 17
R/. Aleluya, aleluya.
Que la palabra de Cristo habite en ustedes abundantemente. Háganlo todo dando gracias a Dios Padre, por medio de Cristo. R/.
EVANGELIO
¿Con qué autoridad haces todo esto?
Del santo Evangelio según san Marcos: 11, 27-33
En aquel tiempo, Jesús
y sus discípulos llegaron de nuevo a Jerusalén, y mientras Jesús
caminaba por el templo, se le acercaron los sumos sacerdotes, los escribas y
los ancianos, y le preguntaron: "¿Con qué autoridad haces
todo esto? ¿Quién te ha dado autoridad para actuar así?"
Jesús les respondió: "Les voy a hacer una pregunta. Si me
la contestan yo les diré con qué autoridad hago todo esto. El
bautismo de Juan, ¿era cosa de Dios o de los hombres? Contéstenme".
Ellos se pusieron a razonar entre sí: "Si le decimos que de Dios,
nos dirá: 'Entonces ¿por qué no le creyeron?', y ¿si
le decimos que de los hombres?" Pero, como le tenían miedo a la
multitud, pues todos consideraban a Juan como verdadero profeta, le respondieron
a Jesús: "No lo sabemos". Entonces Jesús les replicó:
"Pues tampoco yo les diré con qué autoridad hago todo esto".
Palabra del Señor. T. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, que estas ofrendas alcancen, por tu benevolencia y por la intercesión de la siempre Virgen María, que tu Iglesia crezca por el número de fieles y resplandezca siempre por la abundancia de las virtudes. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Santa María Virgen, MR pp. 526-530 (527-531).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Lc 11, 27-28
Dichosa la Virgen María, que llevó en sus entrañas al Hijo del eterno Padre.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios nuestro, después de recibir en esta conmemoración de la Virgen María, Reina de los Apóstoles, el alimento que nos da vida, te pedimos que nos concedas perseverar en el cumplimiento de tu voluntad, sirviendo siempre a los demás, para que tu pueblo avance en el camino de la salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Jubileo de Los Diáconos
Dentro del Año de la Misericordia en Roma
Verde Domingo IX del Tiempo Ordinario MR p. 421 (419) / Lecc. II, p. 220 / LH 1a. Semana
Otros santos: Maximino de Tréveris, obispo; Sisinio de Trento y compañeros, mártires. Beato José Gérard, presbítero.
CON UNA PALABRA TUYA
1 R 8, 41-43; Ga 1,1-2. 6-10; Lc 7,1-10
La oración de Salomón al momento de la dedicación del templo reserva un lugar para los extranjeros. En el templo del Dios de Israel tiene que haber cabida para las gentes de buena voluntad de cualquier pueblo y nación: "también al extranjero que venga a rezar en este templo, escúchalo tú desde el cielo... haz lo que te pida". La suplica de Salomón no siempre fue cumplida, porque la historia de Israel estuvo marcada por periodos de cerrazón y de cierta apertura a los extranjeros. Sin embargo, en el proceder del Señor Jesús sí advertimos un trato incluyente y generoso con los extranjeros. El capitán romano no fue desdeñado por causa de su origen y aunque ejercía cierta función de patronazgo con la gente de Cafarnaúm, puesto que les había apoyado en la construcción de la sinagoga, Jesús se decidió a atenderlo para hacerlo partícipe de la bondad del Padre y en manera alguna lo hizo para reproducir la dinámica de la retribución como le aconsejaban los habitantes de Cafarnaúm.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 24, 16. 18
Mírame, Señor, y ten piedad de mí, que estoy solo y afligido. Ve mi pequeñez y mis trabajos, y perdona todos mis pecados, Dios mío.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, cuya providencia no se equivoca en sus designios, te rogamos humildemente que apartes de nosotros todo lo que pueda causarnos algún daño y nos concedas lo que pueda sernos de provecho. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Cuando los extranjeros oran al Señor, él los escucha.
Del primer libro de los Reyes: 8, 41-43
En el templo que había
construido en Jerusalén, Salomón elevó a Dios esta plegaria:
"Los extranjeros oirán hablar de tu gran nombre, de la fuerza de
tu mano y de tu brazo protector. Cuando uno de ellos, no israelita, atraído
por la fama de tu nombre, venga de un país distante para orar, escúchalo
tú desde el cielo, tu morada, y concédele todo lo que él
te pida. Así te conocerán y temerán todos los pueblos de
la tierra, lo mismo que tu pueblo, Israel, y sabrán que este templo que
he construido, está dedicado a tu nombre".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 116, 1.2
R/. Que aclamen al Señor todos los pueblos.
Que alaben al Señor
todas las naciones, que lo aclamen todos los pueblos. R/.
Porque grande es su amor hacia nosotros y su fidelidad dura por siempre. R/.
SEGUNDA LECTURA
El que busca agradar a los hombres, no es servidor de Cristo.
De la carta del apóstol san Pablo a los gálatas: 1, 1-2. 6-10
Yo, Pablo, apóstol
no enviado por hombres ni por intermediarios humanos, sino por Cristo Jesús
y por Dios Padre, que lo resucitó de entre los muertos, y todos los hermanos
que están conmigo dirigimos esta carta a las comunidades cristianas de
Galacia.
Me extraña mucho que tan fácilmente hayan abandonado ustedes a
Dios Padre, quien los llamó a vivir en la gracia de Cristo y que sigan
otro Evangelio. No es que exista otro Evangelio; lo que pasa es que hay algunos
que los perturban a ustedes, tratando de cambiar el Evangelio de Cristo.
Pero, sépanlo bien: si alguien, yo mismo o un ángel enviado del
cielo, les predicara un Evangelio distinto del que les hemos predicado, que
sea maldito. Se lo acabo de decir, pero se lo repito: Si alguno les predica
un Evangelio distinto del que ustedes han recibido, que sea maldito.
¿A quién creen que trato de agradar con lo que acabo de decir?
¿A Dios o a los hombres? ¿Acaso es ésta la manera de congraciarse
con los hombres? Si estuviera buscando agradarles a ustedes no sería
servidor de Cristo.Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 3, 16
R/. Aleluya, aleluya.
Tanto amó Dios al mundo, que le entregó a su Hijo único, para que todo el que crea en él tenga vida eterna. R/.
EVANGELIO
Ni en Israel he hallado una fe tan grande.
Del santo Evangelio según san Lucas: 7, 1-10
En aquel tiempo, cuando
Jesús terminó de hablar a la gente, entró en Cafarnaúm.
Había allí un oficial romano, que tenía enfermo y a punto
de morir a un criado muy querido. Cuando le dijeron que Jesús estaba
en la ciudad, le envió a algunos de los ancianos de los judíos
para rogarle que viniera a curar a su criado. Ellos, al acercarse a Jesús,
le rogaban encarecidamente, diciendo: "Merece que le concedas ese favor,
pues quiere a nuestro pueblo y hasta nos ha construido una sinagoga". Jesús
se puso en marcha con ellos.
Cuando ya estaba cerca de la casa, el oficial romano envió unos amigos
a decirle: "Señor, no te molestes, porque yo no soy digno de que
tú entres en mi casa; por eso ni siquiera me atreví a ir personalmente
a verte. Basta con que digas una sola palabra y mi criado quedará sano.
Porque yo, aunque soy un subalterno, tengo soldados bajo mis órdenes
y le digo a uno: '¡ve!, y va; a otro: ¡Ven!', y viene; y a mi criado:
¡Haz esto!', y lo hace".
Al oír esto, Jesús quedó lleno de admiración, y
volviéndose hacia la gente que lo seguía, dijo: "Yo les aseguro
que ni en Israel he hallado una fe tan grande". Los enviados regresaron
a la casa y encontraron al criado perfectamente sano.Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.
Credo.
PLEGARIA UNIVERSAL
Oremos hermanos a Jesucristo,
el Señor, y pidámosle que, recordando su promesa, escuche la oración
de este pueblo reunido en su nombre.
Después de cada petición diremos: Escúchanos, Padre y aumenta
nuestra fe.
Para que el Señor se acuerde del santo Padre, el Papa Francisco,
de todos los obispos que predican la Palabra de Dios, de los presbíteros
y diáconos y de todos los que en el mundo aman a Jesucristo, roguemos
al Señor.
Para que el Señor se acuerde de los responsables de las naciones, los
asista en su misión, haga desaparecer los proyectos de quienes buscan
la guerra y dé fortaleza a quienes trabajan por la paz y el bien común.
Roguemos al Señor.
Para que el Señor se acuerde de los ancianos y minusválidos, de
los enfermos, de los que sufren y de los necesitados que esperen su ayuda; para
que no se olvide de los presos, de los desterrados y de los que son perseguidos
por su nombre, roguemos al Señor.
Para que el Señor, en su infinita misericordia se acuerde de todos nosotros,
nos conceda un tiempo favorable y cosechas abundantes, nos otorgue el trabajo
que necesitamos, abra su mano y nos sacie con sus bienes, ya que los ojos de
todos están fijos en él, roguemos al Señor.
Dios todopoderoso y eterno, que en tu palabra has manifestado el poder y
la fuerza que nos salva, escucha nuestras oraciones, haz que tu palabra se anuncie
en todas las lenguas y en todas las culturas, que todos los hombres la acojan
y que en ella encuentren su salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Llenos de confianza en tu bondad, acudimos, Señor, ante tu santo altar trayéndote nuestros dones, a fin de que, purificados por tu gracias, quedemos limpios por los mismos misterios que celebramos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio para los domingos del Tiempo Ordinario.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sal 16, 6
Te invoco, Dios mío, porque tú me respondes; inclina tu oído y escucha mis palabras.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dirige, señor, con tu Espíritu, a quienes nutres con el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, para que, dando testimonio de ti, no sólo de palabra, sino con las obras y de verdad, merezcamos entrar en el reino de los cielos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- Los recientes conflictos en Siria, Irak, y otros países africanos han puesto sobre la mesa el problema de los refugiados y la urgencia de vivir la compasión y la solidaridad de manera más decidida y generosa. Más allá de las diferencias culturales, económicas y religiosas que separan a personas y culturas, seguimos reconociendo que todos formamos parte de una sola familia común. La capacidad de reaccionar eficaz y cálidamente con las personas que viven situaciones de emergencia es uno de los distintivos de lo que podemos llamar humanidad. Por más que las ideologías supremacistas y la globalización de la indiferencia nos empujen a cruzarnos de brazos, no podemos hacerlo. El mensaje de compasión incluyente que Jesús muestra al capitán romano y la confiada apertura con la cual éste se dirige a Jesús, nos animan a seguir abriendo nuestro corazón a los necesitados de cualquier condición.
Verde De Feria, o Misa "Por la Santificación del Trabajo Humano" B MR p. 1082 (1128) / Lecc. II, p. 395
Otros santos: Fernando III de España, rey; Juana de Arco, mártir; Anastasio de Pavía, obispo.
LA PERSEVERANCIA
2 P 1,10-17; Mc 12,1-12
Entre las dos lecturas podemos apreciar un nexo más que visible: el del llamado a la perseverancia. En la segunda Carta de San Pedro este llamado aparece de forma explícita y reiterada: "por eso hermanos pongan cada vez más empeño en ir confirmando su llamamiento y elección". De ahí que tengan que mantenerse firmes en la verdad, aun cuando sea necesario pagar congruentemente el precio de esa fidelidad. En boca del apóstol esos no eran alardes oratorios, sino testimonios de una vida vivida de forma congruente con el Evangelio de Jesucristo. La parábola de los viñadores homicidas pone de manifiesto la fidelidad y la misericordia perseverante del Padre, que no obstante el rechazo y la tozudez de los dirigentes y mediadores de Israel, siguió llamando una y otra vez a su pueblo a que participara de su amistad.
ANTÍFONA DE ENTRADA Gn 1, 1.27. 31
En el principio creó Dios el cielo y la tierra. Y creó Dios al hombre a su imagen. Vio Dios todo lo que había hecho y lo encontró muy bueno.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que por medio del trabajo humano quisiste someter las fuerzas de la naturaleza , concede benigno que, dedicados con el espíritu cristiano a nuestras labores, cultivemos una caridad fraterna eficaz, y merezcamos colaborar al perfeccionamiento de la creación. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Dios nos ha concedido los maravillosos bienes prometidos, que nos hacen partícipes de la naturaleza divina.
De la segunda carta del apóstol san Pedro: 1, 1-7
Yo, Simón Pedro,
siervo y apóstol de Jesucristo, les escribo a ustedes, los que han obtenido
una fe tan preciosa como la nuestra, gracias a la justicia de Jesucristo, nuestro
Dios y Salvador. Que abunden entre ustedes la gracia y la paz, por el conocimiento
de Jesucristo, nuestro Señor.
Su acción divina nos ha otorgado todo lo necesario para llevar una vida
de santidad, mediante el conocimiento profundo del que nos ha llamado con su
propia gloria y poder. Por medio de las cuales nos han sido otorgados también
los grandes y maravillosos bienes prometidos, para que por ellos puedan ustedes
escapar de la corrupción que las pasiones desordenadas provocan en el
mundo, y lleguen a participar de la naturaleza divina. Por eso, esfuércense
en añadir a su buena fe, conducta; a la buena conducta, la inteligencia;
a la inteligencia, el dominio propio; al dominio propio, la perseverancia; a
la perseverancia, la piedad; a la piedad, el amor fraterno, y al amor fraterno,
la caridad.Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 90, 1-2. 14-15ah. 15c-16 R/. Tú eres mi Dios y en ti confío.
Tú, que vives al
amparo del Altísimo y descansas a la sombra del Todopoderoso, dile al
Señor: "Tú eres mi refugio y fortaleza; tú eres mi
Dios y en ti confío". R/.
"Puesto que tú me conoces y me amas, dice el Señor, yo te
libraré y te pondré a salvo. Cuando tú me invoques, yo
te escucharé yen tus angustias estaré contigo". R/.
"A quien se acoge a mí, dice el Señor, yo lo defenderé
y colmaré de honores; lo haré disfrutar de larga vida y haré
que pueda ver mi salvación". R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Ap 1, 5
R/. Aleluya, aleluya.
Señor Jesús, testigo fiel, primogénito de entre los muertos, tu amor por nosotros es tan grande, que has lavado nuestras culpas con tu sangre. R/.
EVANGELIO
Se apoderaron del hijo, lo mataron y arrojaron su cuerpo fuera de la viña.
Del santo Evangelio según san Marcos: 12, 1-12
En aquel tiempo, Jesús
comenzó a hablar en parábolas a los sumos sacerdotes, a los escribas
y a los ancianos y les dijo: "Un hombre plantó una viña,
la rodeó con una cerca, cavó un lagar, construyó una torre
para el vigilante, se la alquiló a unos viñadores y se fue de
viaje al extranjero.
A su tiempo, les envió a los viñadores un criado para recoger
su parte del fruto de la viña. Ellos se apoderaron de él, lo golpearon
y lo devolvieron sin nada. Les envió otro criado, pero ellos lo descalabraron
y lo insultaron. Volvió a enviarles otro y lo mataron. Les envió
otros muchos y los golpearon o los mataron.
Ya sólo le quedaba por enviar a uno, su hijo querido, y finalmente también
se lo envió, pensando: 'A mi hijo sí lo respetarán'. Pero
al verlo llegar, aquellos viñadores se dijeron: 'Éste es el heredero;
vamos a matarlo y la herencia será nuestra'. Se apoderaron de él,
lo mataron y arrojaron su cuerpo fuera de la viña. ¿Qué
hará entonces el dueño de la viña? Vendrá y acabará
con esos viñadores y dará la viña a otros. ¿Acaso
no han leído en las Escrituras: La piedra que desecharon los constructores
es ahora la piedra angular. Esto es obra de la mano del Señor, es un
milagro patente?"
Entonces los sumos sacerdotes, los escribas y los ancianos, quisieron apoderarse
de Jesús, porque se dieron cuenta de que por ellos había dicho
aquella parábola, pero le tuvieron miedo a la multitud, dejaron a Jesús
y se fueron de ahí.Palabra del Señor. Gloria a ti,
Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, los dones de tu Iglesia suplicante y concede que, por medio del trabajo humano que ahora te ofrecemos, merezcamos quedar asociados a la obra redentora de Cristo. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Col 3, 17
Todo lo que digan y todo lo que hagan, háganlo en el nombre del Señor Jesús, dándole gracias a Dios Padre, por medio de Cristo.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Tú que nos has alimentado con el pan eterno, concédenos también, Señor, lo necesario para la vida temporal. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Visitación de La Santísima Virgen María
Blanco Fiesta, MR p. 720 (740)/ Lecc. II, p. 1067
Otros santos: Camila Batista Varani, religiosa. Beato Nicolás Barré, fundador.
Entre las fiestas de la Anunciación y el nacimiento de san Juan Bautista se celebra ésta, de la Visitación. Es la fiesta del encuentro de María con Isabel, y sobre todo, de una manera misteriosa, del encuentro de aquellos dos niños: el precursor y el Mesías, encerrados todavía en el seno de sus madres. Es una fiesta que estalla en alegría con el "Magníficat".
ANDEN DE ACUERDO UNOS CON OTROS
Rm 12, 9-16; Lc 1, 39-56
Las exhortaciones finales con las cuales corona su carta el apóstol san Pablo tienen una validez permanente. Las relaciones humanas nunca están exentas de roces y descalificaciones. En el interior de cada persona hay un anhelo de autoafirmación que puede desbordarse y convertirse en motivo de agresión hacia los demás. De ahí que siempre sea necesario ponernos en guardia cuando nuestra autosuficiencia se desborde y atender a las exhortaciones de esta carta. Son tan válidas y oportunas que conviene reproducirlas con toda amplitud: "anden de acuerdo unos con otros; no piensen en grandezas, que los atraiga lo humilde; no muestren suficiencia. No devuelvan a nadie mal por mal".
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 65, 16
Cuantos temen a Dios vengan y escuchen, y les diré lo que ha hecho por mí.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso y eterno, que inspiraste a la santísima Virgen María, cuando llevaba ya en su seno a tu Hijo, el deseo de visitar a Isabel, concédenos que, siguiendo las inspiraciones del Espíritu Santo, podamos con María proclamar siempre tu grandeza. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA**
El Señor, será el rey de Israel dentro de ti.
Del libro del profeta Sofonías: 3, 14-18
Canta, hija de Sion, da
gritos de júbilo, Israel, gózate y regocíjate de todo corazón,
Jerusalén. El Señor ha levantado su sentencia contra ti, ha expulsado
a todos tus enemigos. El Señor será el rey de Israel en medio
de ti y ya no temerás ningún mal.
Aquel día dirán a Jerusalén: "no temas, Sion, que
no desfallezcan tus manos. El Señor, tu Dios, tu poderoso salvador, está
en medio de ti. Él se goza y se complace en ti; él te ama y se
llenará de júbilo por tu causa, como en los días de fiesta.
Apartaré de ti la desgracia y el oprobio que pesa sobre ti".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
O bien:
Ayuden a los hermanos en sus necesidades y esmérense en la hospitalidad.
De la carta del apóstol san Pablo a los romanos: 12, 9-16
Hermanos: Que el amor de
ustedes sea sincero. Aborrezcan el mal y practiquen el bien; ámense cordialmente
los unos a los otros, como buenos hermanos; que cada uno estime a los otros
más que a sí mismo. En el cumplimiento de su deber, no sean negligentes
y mantengan un espíritu fervoroso al servicio del Señor. Que la
esperanza los mantenga alegres; sean constantes en la tribulación y perseverantes
en la oración. Ayuden a los hermanos en sus necesidades y esmérense
en la hospitalidad.
Bendigan a los que los persiguen; bendíganlos, no los maldigan. Alégrense
con los que se alegran; lloren con los que lloran. Que reine la concordia entre
ustedes. No sean, pues, altivos; más bien pónganse al nivel de
los humildes. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Isaías 12, 2-3. 4bcd. 5-6
R/. El Señor ha hecho maravillas con nosotros.
El Señor es mi Dios
y salvador, con él estoy seguro y nada temo. El Señor es mi protección
y mi fuerza y ha sido mi salvación. Sacarán agua con gozo de la
fuente de salvación. R/.
Den gracias al Señor, invoquen su nombre, cuenten a los pueblos sus hazañas,
proclamen que su nombre es sublime. R/.
Alaben al Señor por sus proezas, anúncienlas a toda la tierra.
Griten jubilosos, habitantes de Sión, porque el Dios de Israel ha sido
grande con ustedes. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Lc 1, 45
R/. Aleluya, aleluya.
Dichosa tú, santísima Virgen María, que has creído, porque se cumplirá cuanto te fue anunciado de parte del Señor. R/.
EVANGELIO
¿Quién soy yo para que la madre de mi Señor venga a verme?
Del santo Evangelio según san Lucas: 1, 39-56
En aquellos días,
María se encaminó presurosa a un pueblo de las montañas
de Judea y, entrando en la casa de Zacarías, saludó a Isabel.
En cuanto ésta oyó el saludo de María, la criatura saltó
en su seno.
Entonces Isabel quedó llena del Espíritu Santo, y levantando la
voz, exclamó: "¡Bendita tú entre las mujeres y bendito
el fruto de tu vientre! ¿Quién soy yo, para que la madre de mi
Señor venga a verme? Apenas llegó tu saludo a mis oídos,
el niño saltó de gozo en mi seno. Dichosa tú, que has creído,
porque se cumplirá cuanto te fue anunciado de parte del Señor".
Entonces dijo María: "Mi alma glorifica al Señor y mi espíritu
se llena de júbilo en Dios, mi salvador, porque puso sus ojos en la humildad
de su esclava. Desde ahora me llamarán dichosa todas las generaciones,
porque ha hecho en mí grandes cosas el que todo lo puede. Santo es su
nombre, y su misericordia llega de generación en generación a
los que lo temen. Ha hecho sentir el poder de su brazo: dispersó a los
de corazón altanero, destronó a los potentados y exaltó
a los humildes. A los hambrientos los colmó de bienes y a los ricos los
despidió sin nada.
Acordándose de su misericordia, vino en ayuda de Israel, su siervo, como
lo había prometido a nuestros padres, a Abraham y a su descendencia,
para siempre".
María permaneció con Isabel unos tres meses, y luego regresó
a su casa.
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, recibe con agrado este sacrificio de salvación que ofrecemos a tu majestad, así como te fue grato el gesto de amor de la santísima Madre de tu Unigénito. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.
PREFACIO II de santa María Virgen MR, p. 527 (528).
La iglesia alaba a Dios con las palabras de María
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación proclamar que eres admirable en la perfección de todos tus santos, y de un modo singular en la perfección de la Virgen María. Por eso, al celebrarla hoy, queremos exaltar tu benevolencia inspirados en su propio cántico. Pues en verdad, has hecho maravillas por toda la tierra, y prolongaste tu misericordia de generación en generación, cuando, complacido en la humildad de tu sierva, nos diste por su medio al autor de la salvación, Jesucristo, Hijo tuyo y Señor nuestro. Por él, los ángeles y los arcángeles te adoran eternamente, gozosos en tu presencia. Permítenos unirnos a sus voces cantando jubilosos tu alabanza: Santo, Santo, Santo...
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Lc 1, 48-49
Desde ahora me llamarán dichosa todas las generaciones, porque ha hecho en mí grandes cosas el que todo lo puede. Santo es su nombre.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios nuestro, que la Iglesia
proclame tu grandeza, porque haces cosas grandes en tus fieles, y así
como Juan Bautista se alegró al sentir la presencia oculta de tu Hijo,
haz que tu pueblo pueda reconocer siempre con alegría en este sacramento
al mismo Cristo viviente. Él, que vive y reina por los siglos de los
siglos.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, MR, p. 601 (609).
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